Tae-suk
Doña Inés, a sus pies
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¿Pederastas? Qué va, no son pederastas. Son algo mucho peor que eso.DE VERDAD ALGUIEN MAÑANA VA A VOTAR a PEDERASTAS CONFESOS?'
Son bolcheviques, comunistas, soviéticos, juches, maoístas... gente totalitaria que no concibe otra forma de gobernar que no sea sometiendo y alienando a las masas a su antojo. Desde la más tierna infancia, no sea que sus padres les inculquen otras ideas. ¿Libertad? ¿Qué es eso?
Son lo mismo que los que gobiernan en Cuba, en Corea del Norte... en la Unión Soviética de Stalin, que acaparó más poder que el que jamás tuvieron los zares y que reprimio cualquier disidencia con deportaciones, torturas, fusilamientos y trabajos forzados, o en la China de Mao y su "Gran Salto Adelante" (que dejó un saldo de DECENAS de millones de muertos).
En el Congreso Extraordinario celebrado en 1979, el PSOE renunció oficialmente al marxismo como ideología del partido, aunque algunos también admitieron que seguiría siendo uno de los principios inspiradores de su política. Mentira. Jamás renunciaron al marxismo. En el Congreso de Suresnes (Francia) en 1974, el último que el PSOE celebró en el exilio, afirmaron el marxismo como uno de los principios fundamentales del partido, junto con la lucha obrera y el respeto a los movimientos nacionalistas.
¿Por qué renunciaron oficialmente al marxismo 5 años más tarde, con Franco muerto y enterrado, y después de redactarse una Constitución democrática que garantizaba la pluralidad política, y de celebrarse las primeras elecciones al parlamento en más de 4 décadas, que ya encauzaban a España en la senda de la democracia? Porque realmente nunca renunciaron al marxismo, lo que sí acordaron fue ocultarlo, disimularlo, porque si no terminarían desapareciendo o haciéndose insignificantes, como el PCE. Pero de renunciar nada, es la esencia del ser $ociali$ta: totalitarismo, represión de la disidencia, anulación de la libertad y control absoluto del individuo y de las masas, todo ello adornado con un sin fin de contradicciones. Pero la esencia es la misma de siempre: el marxismo, es decir, el totalitarismo más absoluto disfrazado de mentiras y buenas intenciones. Lo llevan en sus genes.
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