Para ser veneno puro aún me parece barato...
Veneno en nuestro plato: alimentos contaminados - OCU
Comer pescado pero ser selectivos
Las recomendaciones sobre ciertos alimentos no deben generar alarma ni extremismos. Una dieta rica en pescado va a seguir siendo buena para nuestra salud cardiaca, así como para el desarrollo embrionario y el crecimiento de los niños. El pescado aporta proteínas de alto valor biológico, vitaminas A, D y B12, yodo y selenio, por lo que es necesario incluirlo en la dieta.
Sin embargo, conviene controlar nuestro consumo de algunos pescados, especialmente los que suelen contener mayores niveles de
mercurio, como el atún, el lucio, el pez espada o emperador, el tiburón y el
pez panga. Estas reglas son válidas para todos, aunque especialmente para embarazados, niños, mayores y otros colectivos sensibles. Conviene también recordar que en el análisis de filetes de pescado realizado por la OCU, se encontraron sustancias contaminantes en el
pez panga y la perca.
Contaminantes en los filetes de pescado - OCU
Contaminantes en los filetes de pescado
Los filetes de panga y de perca han entrado con fuerza en nuestros hábitos de compra y consumo, sobre todo, en comedores colectivos donde a veces se sirven como filetes de lenguado o mero.
Se trata de dos pescados de agua dulce y criados en acuicultura que proceden de países lejanos:
el panga se cría en el río Mekong (Vietnam) y la perca habita en el lago Victoria en África.
La OCU ha analizado 23 muestras de panga (17 congeladas y 6 compradas como frescas) y 6 de perca para comprobar diferentes aspectos de su calidad y seguridad alimentaria. Debido al modo de producción intensivo y a las zonas en las que se localiza, sospechábamos la presencia de posibles contaminantes ambientales
Restos de contaminantes
En 4 muestras de panga de las 23 analizadas, encontramos un
herbicida, la
trifluoralina, que ha sido prohibida en Europa. En los filetes de perca no se han encontrado plaguicidas.
También detectamos
mercurio, un metal pesado, en 9 de las 29 muestras de panga y perca analizadas. Las cantidades de mercurio no superan el límite legal de 0,5 mg/ kg, pero en algunos casos, sí alcanzan la mitad de esa cifra. Teniendo en cuenta que estos pescados se sirven en comedores escolares y los niños pueden llegar a comerlos varias veces por semana, al final la ingesta de mercurio puede llegar a ser significativa.
Mejor no abusar de estos pescados
Ninguno de los dos contaminantes encontrados suponen aisladamente un riesgo inmediato para la salud, pero estos residuos deben ser tenidos en cuenta para realizar los controles y recomendaciones oportunos a la población.
El pescado no se suele considerar como una fuente de pesticidas en la dieta y, sin embargo, a raíz de nuestros resultados, comprobamos que sí lo es.
Por otro lado, el panga y la perca no se encuentran en la lista de los pescados que se suelen considerar como fuente de mercurio, en la que sí se incluyen otros pescados de consumo frecuente como el atún o el emperador.
A juicio de la OCU, esta lista se debería reconsiderar. Desde la Organización de Consumidores y Usuarios recomendamos que el panga y la perca no se consuman más de una vez por semana.