Titular que no veras: El marido de Monica Oltra violaba a menores mientras ella era consellera de Bienestar social y tenía a su cargo la protección de menores.......(buen titular ehhh)
A ver si ahora sale en la sexta porque ya ha sido condenado por pervertido.
El exmarido de Oltra, condenado a cinco años de guandoca por abusos a una menor en un centro de protección
La Audiencia cree que la relación del procesado «con un alto cargo de la Generalitat fue una dificultad para que la víctima denunciara ante el temor a no ser creída»
La Audiencia de Valencia ha condenado a
cinco años de prisión al exmarido de Mónica Oltra por abusos sensuales a una menor en un centro de acogida. Los hechos se produjeron entre
finales de 2016 y principios de 2017 cuando el ahora condenado todavía era pareja de la vicepresidenta y consellera de Políticas Inclusivas y vivían en el mismo domicilio. Este departamento tiene encomendadas las políticas relacionadas con Bienestar Social y, entre ellas, la atención a los menores desprotegidos.
El Tribunal de la sección Segunda ha validado el
testimonio de la menor, la principal prueba, como suele ser habitual en este tipo de delitos, contra el acusado. La forense ya indicó en la vista que el relato de los hechos resultaba creíble y que se trataba de una
menor institucionalizada, es decir, que ha pasado toda su vida en centros de acogida por lo que tiene una
personalidad con ciertas carencias, comunes a este tipo de adolescentes. Los magistrado concluyen que no hay ninguna razón para dudar de su testimonio y
descartan cualquier «animadversión» de la menor. Es más, recuerda el tribunal que la relación entre ambos era buena. Inciden los magistrados, para reforzar esta tesis, que el procedimiento penal no se inicia por la denuncia de la menor sino por el propio ministerio fiscal. Además, la versión viene
ratificada por otras declaraciones como la del novio de la víctima, los policías e
incluso el otro educador del centro.
La Sala no pasa por alto la
relación que el acusado tenía con la entonces consellera. El acusado mantenía, al parecer, en la fecha de los hechos «una relación de parentesco con un alto cargo de la Generalitat algo que era conocido por todos en el centro, lo que
representaba para la joven una dificultad añadida a la hora de formular la denuncia ante el temor de que no sería creída». De igual modo, los magistrados reprochan la actuación de la
psicóloga del centro porque «no deja de sorprender el hecho de que no solo no preguntaran a la niña por los presuntos abusos, sino además que no se diera cuenta a la Fiscalía de Menores de los mismos».
Los magistrados, en definitiva, dan por probado que el
acusado, Luis Eduardo Ramírez Icardi, entraba en la habitación de la víctima, que entonces tenía 13 años, y la acariciaba pensando que estaba dormida. Era entonces cuando
le agarraba la mano y la utilizaba para querersese. La fiscalía, tras la celebración de la vista, pidió modificar sus conclusiones y al margen de la pena de guandoca reclamó una
indemnización de 6.000 euros. El acusado, durante el juicio negó los hechos. Admitió los
masajes en la cabeza -la propia menor admitió que los pedía a los cuidadores- y afirmó desconocer los motivos por los que la joven había denunciado. Relató que
tuvo varios incidentes con otros monitores y que precisamente por su mal comportamiento, llegaba a las instalaciones a altas horas de la madrugada y molestaba a los otros adolescentes,
se le castigaba a dormir en una habitación individual. Era allí donde ocurrían los hechos. Y esta circunstancia, el hecho de que se haya podido comprobar que la menor dormía en esa sala, también suma al caudal de indicios en contra del acusado. El letrado del ahora condenado,
Óscar Fernández, ya ha anunciado que recurrirá el fallo.
Abusos sensuales en centros de menores
El exmarido de Oltra, condenado a cinco años de guandoca por abusos a una menor en un centro de protección