Esto es algo que se dice en casi todas las generaciones, seguramente los griegos lo pensaron, antes de ser asimilador por los romanos, y los romanos antes de los godos.
Lo bueno de todo esto, es que cuando no existamos, la gente ni entenderá ni echara de menos aquello que nosotros tanto valoramos, pues no se puede echar de menos aquello que no conoces, aparte que la moral cambia y el ser humano se adapta a todo.
Se nos llena la boca diciendo lo que tenemos y antes carecían, pero somos incapaces siquiera de pensar lo que se ha perdido, simplemente lo hemos olvidado, porque nunca lo hemos tenido.
¿Que pensaría uno de la Grecia clásica al vernos? seguramente nos ofrecería ser sus esclavos, asegurando que al menos así tendríamos una vida digna.
A medida que la gente cambia libertad por felicidad, la sociedad va avanzando, y el individuo involucionando.