Interceptan a un minusválido cuando circulaba con una camilla en autovía

Interceptan a un minusválido cuando circulaba con una camilla en autovía


La policía local de Narón apenas salía de su asombro cuando una de sus patrullas interceptó una camilla-silla motorizada en una autovía conducida por un tetrapléjico que manejaba el vehículo con la boca.

La "intercepción" se produjo en la autovía que comunica Ferrol con Vilalba en sentido a esta localidad cuando una patrulla observó un "extraño" vehículo no homologado para su circulación por vía rápida que abandonaba la autovía.

Según explicaron fuentes de la policía local de Narón (A Coruña) los hechos se produjeron el pasado viernes sobre las 21:00 horas, cuando ya había escasa visibilidad.

El "vehículo", que puede alcanzar una velocidad máxima de 20 kilómetros por hora, era conducido por Antonio N. de 42 años y etnia etniana, quien padece una parálisis en el 95 por ciento de su cuerpo, por lo que utiliza una camilla-silla motorizada para sus desplazamientos.

El conductor reside en el Centro de Atención de Minusválidos Físicos de Sampedro de Leixa de Ferrol desde hace 9 ó 10 años y según explicaron fuentes de este centro, se trata de una persona con comportamiento "normal" al que nunca le había pasado nada parecido.

Las mismas fuentes indicaron que a veces se desplaza a un cercano poblado habitado por personas de etnia etniana, pero que nunca se había producido incidente alguno.

Fuentes de la policía local explicaron que cuando interceptaron a Antonio, éste les explicó que "se había equivocado" en un acceso y acabó en la vía rápida.

Añadieron que una vez inmovilizado el vehículo se planteo el problema de trasladar a su ocupante al centro donde reside, para lo cual los agentes contactaron con Protección Civil y Servicios de Emergencia, aunque finalmente optaron por realizar ellos el transporte con vehículo incluido.

Según diversas fuentes el tetrapléjico recorrió más de 3 kilómetros con su camilla antes de ser descubierto por los agentes.

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El paraplejico venia de una casa de frutas :

Detienen en una autovía a un parapléjico que iba en su silla de ruedas a un club de alterne

Atado a una silla desde los cinco meses de edad, José Antonio Navarro, un ferrolano que ya cuenta 42 primaveras, contesta sin ningún pudor a quien le pregunta por el «encendido» incidente que protagonizó el pasado viernes, cuando la Policía Local del municipio coruñés de Narón interceptó su «camilla-silla» motorizada en la autovía que une Ferrol y As Pontes. «Me había salido del camino correcto al club Jade», nos comenta Navarro. A la extrañeza de los agentes de encontrarse en plena autovía un vehículo no homologado que circulaba a 20 km/h se agregó la sinceridad de Navarro, de etnia etniana, que no se ruborizó al admitir que se dirigía, tres años después, a contratar los servicios de una cortesana.

3 años despues de contratar a una cortesana ????, no entiendo nada.

Pero no hay motivos para el sonrojo, alega Navarro. «Atado no significa que no se tenga ganas de desahogar». Para una persona refugiada en la pintura y con dificultades para entablar amistades en el Centro de Atención de Minusválidos Físicos (CAMF), donde reside hace una década, sólo le quedan dos vías para mantener relaciones picantes: la imaginación y la prespitación.

Sobre la primera, confiesa abiertamente que su mayor sueño es tener una novia e ir a vivir con ella a un piso bajo, sin dificultades de accesibilidad para su silla que, por cierto, está acondicionada para gran parte de los menesteres que requiere su día a día: cenicero, espejo retrovisor, mechero, teléfono, auriculares y todo tipo de artilugios manejables con su boca. «Me gustan morenitas», pero no acierta a quedarse con ninguna. «Hay tantas.... Elsa Pataky no me gusta por coqueta».

Respecto a la segunda opción, admite que ha recurrido al lupanar de su ciudad natal en dos ocasiones, si bien la primera no pudo subir a las habitaciones porque el lugar no está «preparado» para su silla, y la segunda, ya se sabe, la Policía lo captó antes de hora.... no hay derecho ... Pese a su timidez que confiesa galopante, se muestra «contento» por salir a la luz y gritar a los cuatro vientos que es una persona normal, con las mismas necesidades que cualquiera, incluidas las biológicas, por lo que a riesgo de que los demás lo «observen», él seguirá buscando soluciones a su escasa vida picante.

Conversa mientras pasea con su silla con autonomía por los aledaños del CAMF ferrolano. No descarta que, en una de éstas, y ahora sí, sabiendo el vial que hay que coger para entrar al club, haga una «escapadita». Aunque si tiene que pararse y formular un deseo, habla de que, después del «quiqui», como él lo llama, lo que pide es «que arreglen calles y comercios». Ahí queda eso.

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snafu dijo:

Todo Un ejemplo de voluntad y superación :Aplauso:

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