Colin
Madmaxista
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La opinión reinante entre los “expertos” en cuanto a la evolución del precio de la vivienda es el de un escenario de crecimiento para el próximo año y pico tendente a la moderación hasta el precio de equilibrio, que tendrá lugar como pronto para el 2006. Me remito como referencia fundamental al archiconocido informe del BBVA, que habla de un cambio estructural en nuestra economía que determina un precio de equilibrio para la vivienda al cual se está tendiendo, pero al que todavía no se ha llegado.
Se que por otro lado –y todavía dentro de las informaciones que nos proporcionan los “expertos”- el BDE afirma una desviación del 20 % del precio real de la vivienda respecto del que determinan los modelos económicos. También he leído algo sobre las advertencias del FMI también relativas a la sobrevaloración.
También sé que cada vez cuesta más vender, y este sería para mí el principal indicador de que el mercado inmobiliario está experimentando una creciente brecha entre la oferta y la demanda.
Luego están vuestra opiniones –me refiero a la de la mayoría de las personas que participáis en este foro- que apuntan a una considerable deflacción del precio de la vivienda en el corto o, como mucho, el medio plazo.
El resultado final es el de una gran incertidumbre. Cualquier persona razonable llegaría a la parálisis ante este escenario informativo tan poco clarificador. Y sé que la gente que compra lo hace en base a dogmas (nunca bajarán, siempre subirán, si no compras ahora ya no podrás comprar, etc).
Las dos preguntas que os lanzo son las siguientes:
1) ¿Es posible que a pesar de la paulatina retirada de la demanda extranjera, de la más que segura contracción de la demanda interna por razones demográficas y por la creciente insolvencia de la demanda meramente potencial, de una probable subida de tipos, del agotamiento de las soluciones financieras y de la mayor competitividad de otros productos de inversión distintos del ladrillo, el precio de la vivienda siga subiendo?
2) En caso de que no, ¿qué impide que simplemente el precio se estabilice? A fin de cuentas las motivaciones para vender y para comprar son distintas, permitiendo las primeras aguantar más tiempo sin vender y sin bajar el precio. Por lo demás pienso que si uno defiende una bajada de precios, deberá hacerlo argumentando el alcance de esa bajada, los plazos, etc... esto es, cómo tendrá lugar esa bajada.
Se que por otro lado –y todavía dentro de las informaciones que nos proporcionan los “expertos”- el BDE afirma una desviación del 20 % del precio real de la vivienda respecto del que determinan los modelos económicos. También he leído algo sobre las advertencias del FMI también relativas a la sobrevaloración.
También sé que cada vez cuesta más vender, y este sería para mí el principal indicador de que el mercado inmobiliario está experimentando una creciente brecha entre la oferta y la demanda.
Luego están vuestra opiniones –me refiero a la de la mayoría de las personas que participáis en este foro- que apuntan a una considerable deflacción del precio de la vivienda en el corto o, como mucho, el medio plazo.
El resultado final es el de una gran incertidumbre. Cualquier persona razonable llegaría a la parálisis ante este escenario informativo tan poco clarificador. Y sé que la gente que compra lo hace en base a dogmas (nunca bajarán, siempre subirán, si no compras ahora ya no podrás comprar, etc).
Las dos preguntas que os lanzo son las siguientes:
1) ¿Es posible que a pesar de la paulatina retirada de la demanda extranjera, de la más que segura contracción de la demanda interna por razones demográficas y por la creciente insolvencia de la demanda meramente potencial, de una probable subida de tipos, del agotamiento de las soluciones financieras y de la mayor competitividad de otros productos de inversión distintos del ladrillo, el precio de la vivienda siga subiendo?
2) En caso de que no, ¿qué impide que simplemente el precio se estabilice? A fin de cuentas las motivaciones para vender y para comprar son distintas, permitiendo las primeras aguantar más tiempo sin vender y sin bajar el precio. Por lo demás pienso que si uno defiende una bajada de precios, deberá hacerlo argumentando el alcance de esa bajada, los plazos, etc... esto es, cómo tendrá lugar esa bajada.