Miss Marple
Más allá de la burbuja
Primero, minimizar la crisis financiera.
Para evitar multiplicación de hilos con la misma noticia (el informe de Ricardo Vergés), algún administrador con exceso de celo cerró esta mañana varios hilos, incluyendo este de Marlo que incluía otra noticia en el Confidencial. La pongo aquí otra vez porque es importante. Mis disculpas, Marlo, por causar el cierre de su hilo.
http://www.cotizalia.com/cache/2007/05/18/8_inversiones_riesgo_ladrillo_credito_concedido_cajas.html
Para quien no los conozca, AFI es una consultora financiera iniciada a finales de los 80 por un grupo de profesores de economía financiera de la Universidad Autónoma de Madrid. Tienen muy buenos contactos. Su primer logro fue el encargo de elaborar y calcular un índice sobre los valores más liquidos de la bolsa que pudiera ser usado como base para futuros y opciones (el Ibex35). Son considerados en muchos medios como el analista independiente (o sea, no vinculado a bancos o a la administración) de referencia, y se les escucha en sitios muy altos. Ahora no lo sigo, pero hace años la mitad de las páginas de expertos en el dominical de Economía de El País las escribían ellos.
Angel Bergés en particular es experto en banca, y lleva tiempo hablando sobre los desequilibrios de las cajas, pero nunca que yo haya leido con tanta claridad, vinculándolo tan abiertamente con el inmobiliario y declarando que esto se acabó.
"Es necesario un replanteamiento estratégico." No se puede decir más claro. Las cajas ya saben que se les está acabando el tiempo para planear su futuro, que va a ser muy distinto del presente. En unos meses, tendrán que presentar a la administración planes de fusiones viables que reconozcan el previsible agujero en sus pasivos. Las que fallen se verán abocadas a la intervención.
Para evitar multiplicación de hilos con la misma noticia (el informe de Ricardo Vergés), algún administrador con exceso de celo cerró esta mañana varios hilos, incluyendo este de Marlo que incluía otra noticia en el Confidencial. La pongo aquí otra vez porque es importante. Mis disculpas, Marlo, por causar el cierre de su hilo.
http://www.cotizalia.com/cache/2007/05/18/8_inversiones_riesgo_ladrillo_credito_concedido_cajas.html
Inversiones de alto riesgo: el ladrillo copa el 70% del crédito concedido por las cajas de ahorros
Las entidades financieras -principalmente las cajas de ahorros- están jugando con fuego en el mercado inmobiliario. Los últimos datos del Banco de España indican que nada menos que el 55,8% del saldo vivo crediticio de los bancos españoles tiene que ver con la industria del ladrillo, pero es que, en el caso de las cajas de ahorros, su exposición al riesgo es todavía mayor. Nada menos que el 70% de los créditos concedidos a los agentes económicos (empresas o familias) está relacionado con el negocio inmobiliario.
Los datos son los siguientes. Según el banco central, el crédito concedido por el conjunto del sistema financiero para actividades productivas ascendía al finalizar el año pasado a 1,5 billones de euros, de los que prácticamente la tercera parte (544.292 millones de euros) se destinaron a adquisición o rehabilitación de viviendas. Además, hay que tener en cuenta que bancos y cajas prestaron a las empresas otros 249.059 millones de euros para actividades inmobiliarias y otros 134.314 millones para actuaciones relacionadas estrictamente con la construcción.
En total, 927.664 millones de euros, lo que significa que el ladrillo se ha llevado 61 de cada 100 euros que han destinado bancos y cajas a la financiación de las actividades productivas del país. Pero, mientras que los bancos han destinado a ese fin ‘únicamente’ 367.400 millones de euros, las cajas de ahorros han invertido nada menos que 496.900 millones. Es decir, dicho de otro modo, en el caso de las cajas, de cada 100 euros que prestan a los agentes económicos privados para financiar actividades productivas, 70 euros van a parar al ladrillo.
Una cuestión de riesgo
Sin duda, un alto grado de exposición que ayer fue puesto de manifiesto durante un seminario sobre el mercado inmobiliario organizado por Analistas Financieros Internacionales (AFI), y en el que su director general, Ángel Bergés, aseguró que el riesgo es todavía mayor si se tiene en cuenta que en los últimos años el 75% de la inversión crediticia tiene que ver directamente con el ladrillo. De hecho, y según un estudio publicado por AFI, esa estimación queda incluso corta si se tuvieran en cuenta todas las demandas de crédito relacionadas indirectamente con actividades inmobiliarias: muebles, equipamientos de los hogares (electrodomésticos) o fabricación y alquiler de material de construcción.
Dos últimos datos ilustran el alto nivel de exposición de la economía española a una hipotética crisis de la construcción. Por un lado, nada menos que uno de cada tres puestos de trabajo creados en los últimos años tienen que ver con el ladrillo. Por otro, si en 1995 existían en España 18.000 empresas inmobiliarias, según datos del sector, en estos momentos hay más de 40.000, lo que hace prever un ajuste en caso de una desaceleración relevante de la actividad.
Según AFI, una dinámica “tan expansiva” del negocio vinculado a la actividad inmobiliaria, ha obligado a bancos y cajas a crecer por la vía del volumen, más que de la rentabilidad. Y la prueba de ello es que para el conjunto del sector, y durante la última década, el volumen de negocio se ha triplicado, mientras que el margen por unidad de negocio se ha reducido un 35%.
Replanteamiento estratégico
Este estrechamiento de la rentabilidad (basada casi exclusivamente en un aumento de la clientela) es, según los analistas de AFI, un riesgo a futuro, como lo es el hecho de que el fuerte crecimiento de la inversión crediticia “ha generado desequilibrios tanto en la captación de recursos ajenos como propios, lo que en ambos casos se ha traducido en un fuerte deterioro de la liquidez y de la solvencia”. El informe de Analistas dice tener la sensación de que el sistema financiero ha construido un “monocultivo” del que se derivan algunos efectos negativos: concentración de riesgos y “abandono” de otros segmentos de negocio con potencial a largo plazo.
La conclusión que saca es la siguiente. “Es necesario un replanteamiento estratégico” toda vez que “cada vez son más evidentes las señales de gradual agotamiento del modelo de crecimiento -tanto económico como financiero- basado de forma tan intensa en la actividad inmobiliaria”.
Para quien no los conozca, AFI es una consultora financiera iniciada a finales de los 80 por un grupo de profesores de economía financiera de la Universidad Autónoma de Madrid. Tienen muy buenos contactos. Su primer logro fue el encargo de elaborar y calcular un índice sobre los valores más liquidos de la bolsa que pudiera ser usado como base para futuros y opciones (el Ibex35). Son considerados en muchos medios como el analista independiente (o sea, no vinculado a bancos o a la administración) de referencia, y se les escucha en sitios muy altos. Ahora no lo sigo, pero hace años la mitad de las páginas de expertos en el dominical de Economía de El País las escribían ellos.
Angel Bergés en particular es experto en banca, y lleva tiempo hablando sobre los desequilibrios de las cajas, pero nunca que yo haya leido con tanta claridad, vinculándolo tan abiertamente con el inmobiliario y declarando que esto se acabó.
"Es necesario un replanteamiento estratégico." No se puede decir más claro. Las cajas ya saben que se les está acabando el tiempo para planear su futuro, que va a ser muy distinto del presente. En unos meses, tendrán que presentar a la administración planes de fusiones viables que reconozcan el previsible agujero en sus pasivos. Las que fallen se verán abocadas a la intervención.