sakarino
Madmaxista
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http://www.diariovasco.com/prensa/opinion/opinion.html
¿Crisis en el mercado de la vivienda?
«Con respecto al mercado de la vivienda libre de nueva construcción en Gipuzkoa, los precios no crecerán como lo han hecho hasta el momento, y esto será bueno para todos; pero honradamente no se prevé ninguna caída de precios en las viviendas libres de nueva construcción (...) Lo que sí se está produciendo es una ralentización en la venta».
OSÉ IGNACIO ITURZAETA/ECONOMISTA-AGENTE DE LA PROPIEDAD INMOBILIARIA
Hay desaceleración en los precios de la vivienda, con subidas de precios cada vez más moderadas, y ralentización en las ventas, pero no desplome.
Estos días los medios de comunicación se hacen eco de la caída en Bolsa de algunas compañías inmobiliarias, sin tener conocimiento suficiente del sector y su complejidad. Las pérdidas han sido tan importantes que han llegado hasta el 74,50% en las acciones de la empresa valenciana Astroc, debido a una actuación irregular de su presidente, que se vendió a sí mismo, edificios propiedad de Astroc para la operación de maquillaje de aumentar los beneficios anuales de la empresa, según publicaba el periódico El País, del día 29 de abril pasado.
En base a lo manifestado, en el párrafo precedente, tengo a bien matizar que la cotización bursátil de las empresas inmobiliarias que se cotizan en la Bolsa, no tiene nada que ver con el día a día de la realidad del sector inmobiliario privado, que se dedica a la construcción de viviendas.
El declive bursátil de estas grandes compañías era previsible, pues se trata, en su mayoría, de promotores virtuales, con un crecimiento espectacular, basado en la compra, gestión y, seguramente, especulación del suelo, que han convertido su actividad promotora en una actividad puramente financiera y especulativa.
Estas compañías no tienen nada que ver con los promotores inmobiliarios que realizan todo el proceso del ciclo productivo y deben luchar para comprar el suelo, negociar con las Administraciones, ejecutar con las responsabilidades que conlleva la construcción de viviendas, vender, etcétera.
La imagen catastrofista sobre el sector inmobiliario de la promoción de viviendas transmitida por los medios de comunicación no se ajusta a la realidad. Es cierta una ralentización en las ventas, debido en parte a la subida de los tipos de interés, y un ajuste de los precios, pero no en todas partes ni con igual intensidad. A menudo este ajuste se produce, prácticamente y en exclusiva, en el mercado de la vivienda usada o de segunda mano, por estar los precios sobrevalorados la mayoría de las veces, y no porque el valor de la vivienda haya bajado en términos reales, sino porque se había fijado un precio o una expectativa de precio superior a la del mercado.
Es verdad que existe un problema de vivienda: falta cubrir todo un primer nivel, para grupos de menor poder adquisitivo, que sería la oferta de Viviendas de Protección Oficial. Se trata de un problema de oferta, que debería ser de alquiler, a promover a nivel de la Comunidad Autónoma del País Vasco, por el Gobierno Vasco, Diputaciones y Ayuntamientos, y no de un problema de demanda.
La oferta de viviendas de segundo nivel, para atender las necesidades de grupos de poder adquisitivo medio-bajo, debe ser atendida por la promoción de «vivienda tasada» a precios que deben resultar del orden de 150.000,00 euros a 225.000,00 euros por vivienda.
Debemos, sin embargo, tener en cuenta que son muchos y muy complejos los factores que condicionan el precio final de las viviendas libres de nueva construcción para atender la demanda del tercer nivel, destinada a la clase media: la escasez de suelo alrededor de las grandes poblaciones, el cumplimiento de los requerimientos de las Administraciones, las exigencias, cada vez mayores en la construcción de viviendas e, incluso, el incremento de los precios de determinados materiales de la construcción.
Los agentes de la Propiedad Inmobiliaria, con muchísimos años de actividad profesional (en mi caso cuarenta y cinco años), queremos transmitir a los ciudadanos que no hay un parón del sector inmobiliario residencial, sino una ralentización en la venta de las viviendas, debido en parte, como he comentado en un párrafo anterior a la subida de los tipos de interés, y una desaceleración en los incrementos anuales de los precios de las viviendas con respecto a los últimos años, que han dado una media de incremento anual del 14,10%, en los seis años comprendidos del 2001 al 2006, ambos inclusive, incrementos anuales que se prevé, a partir del año 2008, acaben en torno al Índice de Precios de Consumo, que fija la inflación anual. Para el año 2007, se prevé un incremento en el precio de las viviendas libres de nueva construcción, en torno al 6%.
Con respecto al mercado de la vivienda libre de nueva construcción en Gipuzkoa, los precios no crecerán como lo han hecho hasta el momento, y esto será bueno para todos; pero honradamente no se prevé ninguna caída de precios en las viviendas libres de nueva construcción, salvo en algunas viviendas de segunda mano o usadas que están sobrevaloradas con respecto al precio normal o medio del mercado de la vivienda. Lo que sí se está produciendo, en el presente año, es una ralentización en la venta, tanto en viviendas nuevas como en viviendas usadas.
Para finalizar el artículo, opino que sólo en algunos lugares del resto de España, tal como en la costa mediterránea, en lo referente exclusivamente a la vivienda turística y de precios superiores a 300.000,00 euros/vivienda, se podría producir una bajada de precios.
ALGO QUE OBJETAR?
¿Crisis en el mercado de la vivienda?
«Con respecto al mercado de la vivienda libre de nueva construcción en Gipuzkoa, los precios no crecerán como lo han hecho hasta el momento, y esto será bueno para todos; pero honradamente no se prevé ninguna caída de precios en las viviendas libres de nueva construcción (...) Lo que sí se está produciendo es una ralentización en la venta».
OSÉ IGNACIO ITURZAETA/ECONOMISTA-AGENTE DE LA PROPIEDAD INMOBILIARIA
Hay desaceleración en los precios de la vivienda, con subidas de precios cada vez más moderadas, y ralentización en las ventas, pero no desplome.
Estos días los medios de comunicación se hacen eco de la caída en Bolsa de algunas compañías inmobiliarias, sin tener conocimiento suficiente del sector y su complejidad. Las pérdidas han sido tan importantes que han llegado hasta el 74,50% en las acciones de la empresa valenciana Astroc, debido a una actuación irregular de su presidente, que se vendió a sí mismo, edificios propiedad de Astroc para la operación de maquillaje de aumentar los beneficios anuales de la empresa, según publicaba el periódico El País, del día 29 de abril pasado.
En base a lo manifestado, en el párrafo precedente, tengo a bien matizar que la cotización bursátil de las empresas inmobiliarias que se cotizan en la Bolsa, no tiene nada que ver con el día a día de la realidad del sector inmobiliario privado, que se dedica a la construcción de viviendas.
El declive bursátil de estas grandes compañías era previsible, pues se trata, en su mayoría, de promotores virtuales, con un crecimiento espectacular, basado en la compra, gestión y, seguramente, especulación del suelo, que han convertido su actividad promotora en una actividad puramente financiera y especulativa.
Estas compañías no tienen nada que ver con los promotores inmobiliarios que realizan todo el proceso del ciclo productivo y deben luchar para comprar el suelo, negociar con las Administraciones, ejecutar con las responsabilidades que conlleva la construcción de viviendas, vender, etcétera.
La imagen catastrofista sobre el sector inmobiliario de la promoción de viviendas transmitida por los medios de comunicación no se ajusta a la realidad. Es cierta una ralentización en las ventas, debido en parte a la subida de los tipos de interés, y un ajuste de los precios, pero no en todas partes ni con igual intensidad. A menudo este ajuste se produce, prácticamente y en exclusiva, en el mercado de la vivienda usada o de segunda mano, por estar los precios sobrevalorados la mayoría de las veces, y no porque el valor de la vivienda haya bajado en términos reales, sino porque se había fijado un precio o una expectativa de precio superior a la del mercado.
Es verdad que existe un problema de vivienda: falta cubrir todo un primer nivel, para grupos de menor poder adquisitivo, que sería la oferta de Viviendas de Protección Oficial. Se trata de un problema de oferta, que debería ser de alquiler, a promover a nivel de la Comunidad Autónoma del País Vasco, por el Gobierno Vasco, Diputaciones y Ayuntamientos, y no de un problema de demanda.
La oferta de viviendas de segundo nivel, para atender las necesidades de grupos de poder adquisitivo medio-bajo, debe ser atendida por la promoción de «vivienda tasada» a precios que deben resultar del orden de 150.000,00 euros a 225.000,00 euros por vivienda.
Debemos, sin embargo, tener en cuenta que son muchos y muy complejos los factores que condicionan el precio final de las viviendas libres de nueva construcción para atender la demanda del tercer nivel, destinada a la clase media: la escasez de suelo alrededor de las grandes poblaciones, el cumplimiento de los requerimientos de las Administraciones, las exigencias, cada vez mayores en la construcción de viviendas e, incluso, el incremento de los precios de determinados materiales de la construcción.
Los agentes de la Propiedad Inmobiliaria, con muchísimos años de actividad profesional (en mi caso cuarenta y cinco años), queremos transmitir a los ciudadanos que no hay un parón del sector inmobiliario residencial, sino una ralentización en la venta de las viviendas, debido en parte, como he comentado en un párrafo anterior a la subida de los tipos de interés, y una desaceleración en los incrementos anuales de los precios de las viviendas con respecto a los últimos años, que han dado una media de incremento anual del 14,10%, en los seis años comprendidos del 2001 al 2006, ambos inclusive, incrementos anuales que se prevé, a partir del año 2008, acaben en torno al Índice de Precios de Consumo, que fija la inflación anual. Para el año 2007, se prevé un incremento en el precio de las viviendas libres de nueva construcción, en torno al 6%.
Con respecto al mercado de la vivienda libre de nueva construcción en Gipuzkoa, los precios no crecerán como lo han hecho hasta el momento, y esto será bueno para todos; pero honradamente no se prevé ninguna caída de precios en las viviendas libres de nueva construcción, salvo en algunas viviendas de segunda mano o usadas que están sobrevaloradas con respecto al precio normal o medio del mercado de la vivienda. Lo que sí se está produciendo, en el presente año, es una ralentización en la venta, tanto en viviendas nuevas como en viviendas usadas.
Para finalizar el artículo, opino que sólo en algunos lugares del resto de España, tal como en la costa mediterránea, en lo referente exclusivamente a la vivienda turística y de precios superiores a 300.000,00 euros/vivienda, se podría producir una bajada de precios.
ALGO QUE OBJETAR?