Estás usando un navegador desactualizado. Es posible que no muestre este u otros sitios web correctamente. Debe actualizar o usar un navegador alternativo.
un africano desgarra literalmente el ano a leticia dolera
El Sábado pasado de madrugada, la famosa feminista que lucha por los derechos de la mujer e igualdad de género, sufrió una terrible agresión sensual por parte (trasera) de 3 senegaleses. Después de que la trataran los facultativos de el hospital La Paz y estar 24h en observación pudo pasar por quirófano para realizarle una ciruijía estética reconstruyéndole el ano. Fue a altas horas de la noche y no pudo ver de los agresores más que los dientes, por lo que cobró vital importancia la labor de los forenses, que pudieron deducir que los agresores rondaban los 25 centímetros. Desconocemos si la señora Leticia pondrá una denuncia al tratarse de extranjeros. Les mantendremos informados Mediterráneo, de Joan Manuel Serrat (con letra) - YouTube
Destrucción de la lógica, quejarse por vicio, gaysidad espontánea... Según el departamento de psiquiatría de la universidad de Oxford, que realizó entrevistas a 12.000 mujeres feministas con cáncer durante siete años, los síntomas mentales que manifiesta este sistema de creencias provocan una forma de estrés en el cerebro que posteriormente se transforma biológicamente en un cáncer. De esta manera el feminismo se podría convertir en un problema de salud pública de primer orden. Según Melania Beauty, directora del estudio y ex-feminista: "Yo ya intuía que estar peleada con el patriarcado me estaba afectando emocionalmente" -dijo- "lo que no sabía es que a largo plazo produce un efecto psicosomático".
La ciencia ya había encontrado vínculos entre el estado mental y los problemas de salud físicos, pero lo importante de este estudio es que demuestra que el feminismo provoca una forma de estrés basado en la paranoia, que a largo plazo tiene efectos iguales a los del cáncer.
El 15 por ciento de las mujeres estudiadas se sintió oprimida por culpa del aire acondicionado, asociándolo a una forma de misoginia que buscaba intencionadamente que usaran una chaqueta en el trabajo; "los hombres no nos dejan usar nuestro cuerpo con libertad". Cuando algunos hombres respondieron que "es el sol el que nos oprime a todos", el estrés psicológico de estas mujeres aumentó.
El 99 por ciento de ellas había reclamado un mayor acceso a los altos cargos de dirección de empresas, pero sufrieron una forma de angustia severa cuando se les preguntaba por qué no reclamaban igualmente la presencia de más mujeres cavando en las zanjas o en los camiones de recogida de sarama.
El 89 por ciento sufrió estrés cuando vio a mujeres en bikini en anuncios de televisión, calificándolo de "cosificación". Sin embargo, estas mujeres también se habían quejado de acoso machista después de subir fotos semidesnudas a sus redes sociales bajo el lema "mi cuerpo, mis normas". Cuando se les mostró la incoherencia de defender el citado lema para una cosa pero no para la otra, el estrés psicológico se agravó sensiblemente.
El 73 por ciento de ellas se sentía reprimida si no se les permitía cobrar por tener sesso, bajo la premisa de que su cuerpo es suyo; pero a su vez se mostraban contrarias a los vientres de alquiler, por ser "una mercantilización de la mujer". Según los neurólogos, estas contradicciones provocan una forma de neurosis inconsciente que con el paso de los años desemboca en un tipo especial de cáncer, que ya han bautizado como Cáncer Feminista.
Pero uno de los aspecto más importantes del estudio es la evidencia innegable de que la heterofobia existe. Hasta el 97 por ciento de los(las) sujetos(as) creen que la heterosexualidad es una forma de control machista sobre las mujeres. Melania Beauty nos explica que "ven la penetración como una agresión machista". Nos cuenta el caso de la paciente María Rubio, que intentó cortarle el miembro viril a su padre y después se intentó suicidar pensando que lo lógico es que ella no hubiese nacido, y que además eso ayudaría a combatir el calentamiento global. Beauty nos explica que "nunca habíamos visto unas conductas tan trastornadas derivadas de una creencia", la creencia en el patriarcado.
Cuando se les preguntó qué se supone que era el patriarcado, todas respondían con la misma frase: "es una conspiración para que los hombres dominen el mundo". Sin embargo, al intentar que dieran una explicación más precisa, las mujeres acusaban al entrevistador (o entrevistadora) de "acoso", presentando casi todas ellas una demanda judicial despúes de terminado el estudio.
El jefe del equipo de psicoanálisis, Machi Rullos, explica que la forma en la que ven el mundo provoca enfermedad: "No se puede vivir bajo un sentimiento de opresión constante durante mucho tiempo, pero lo curioso de este caso es que son ellas mismas las que se autoflagelan. Hay que suministrarles sedantes cuando ven el patriarcado por todas partes".
Los médicos registraron diferentes frases dichas por las pacientes mientras dormían, como por ejemplo "eres un maldito hombre blanco", "en tu cama patriarcado" o "quiero tener miembro viril".
Varios médicos sufrieron agresiones cuando preguntaron por la palabra "feminista radical"; "les salía espuma por la boca y tuvimos que ponerles correas de seguridad".
Otro aspecto que provoca daños graves es la preocupación por los estereotipos. Una de las afectadas sufrió una crisis de agorafobia porque no sabía qué ropa usar para no perpetuar los arquetipos del sistema patriarcal. Después de estar un mes sin pisar la calle y darle muchas vueltas, salió completamente desnuda, lo que provocó una accidentada detención por parte de la policía, a la que acusó de "violación machista".
"Son muchas las obsesiones que provoca el feminismo moderno, y que progresivamente van alejándolas de este mundo", -explica el doctor Rullos-. Otra paciente llamada Loola Pérez decidió declararse muda al no poder determinar qué lenguaje era el apropiado para que nadie se sintiera discriminado. Después de usar pronombres neutros para no ofender a los seres que no son ni mujeres ni hombres, llegó a la conclusión de que estaba invisibilizando a las personas cisgénero, para después autoprohibirse usar refranes "por ser une herencia patriarcal", y luego no mencionar colores para evitar el racismo, para finalmente tomar la responsabilidad de no hablar en absoluto como la mejor forma de solidaridad.
Otro asunto que preocupa a los médicos es la ingestión de sangre menstrual; "Algunas de ellas creen que les da superpoderes".
Otra paciente renunció a emprender acciones legales contra un grupo de fiel a la religión del amores que la violaron en un centro de acogida, por considerar que pertenecían a un "grupo oprimido", y añadió que de hecho la violación no era más que un deseo inconsciente de muchas mujeres por culpa del patriarcado. "Ella quería" -afirmó uno de los mangapensiones-
Otra forma de frustración se reflejaba cuando se les preguntaba por los hombres maltratados. Al sostener la idea de que un hombre no merece el mismo apoyo que una mujer, y a su vez defender que el feminismo busca la igualdad, la ansiedad se apoderaba de ellas irremediablemente.
El cáncer se desarrolla lentamente a medida que la bilis va extendiéndose desde el cerebro hasta el resto del cuerpo, principalmente a las mamas. El síntoma secundario más recurrente es una insatisfacción sensual que las hace creer que son lesbianas.
El estudio concluye que se debe realizar un plan nacional para la erradicación del feminismo, y ya se prepara un informe para que se incluya en la clasificación internacional de enfermedades. "Es la epidemia del siglo XXI; las paguitas mensuales que se reparten los grupos feministas solo sirven para que acaben dependientes e inútiles. Les estamos haciendo muy mal a estas pobres mujeres".
por suerte o por desgracia a Leticia dolerá nunca le desgarraran el ojo ciego es una mujer que aunque físicamente no sea antiestética no tiene gracia es muy bichopalo y los hombres que le gusten tan delgadas que no son muchos no piensan en el ojo ciego.
por desgracia hay muchas mujeres y no feminista radicals que les va a pasar.
