Fuego azul
Será en Octubre
Máxima preocupación en el Gobierno. Rajoy y su equipo siguen atentamente la evolución de los acontecimientos económicos desde La Moncloa. Pero hay un aspecto que inquieta aún más al presidente, aunque intente dar impresión de tranquilidad: ¿cuánto tiempo más aguantarán los españoles esta mala situación, económica y social, sin que se produzca un estallido?
Según ha sabido El Confidencial Digital, de fuentes conocedoras de esos contactos reservados, el equipo de máxima confianza de Rajoy está consultando, en estas últimas semanas, a destacadas personalidades del país para conocer su veredicto sobre cómo puede evolucionar la situación en España, teniendo en cuenta los problemas que sufre el país, económicos, pero también políticos por la corrupción.
Estas fuentes confirman que algunas de las consultas las ha llevado a cabo personalmente el propio Mariano Rajoy desde su despacho del Palacio de La Moncloa.
El ‘escándalo Bárcenas’, que ha apuntado también al presidente en los últimos días, ha acrecentado su preocupación de que, sumados los problemas, pueda producirse un estallido social en España.
Consultas reservadas de alto nivel
Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD explican que entre las personalidades que han sido contactadas por Moncloa para conocer su evaluación se encuentran altos cargos, ex políticos, políticos, personas del mundo empresarial, banqueros, agentes sociales, institutos de estudios de máximo prestigio en España, periodistas e intelectuales.
Rajoy teme ahora, concretamente, que los españoles se planten y digan ‘basta’ a la vista de los episodios de corrupción que se están publicando estos días en la prensa.
Unas informaciones que se ven agravadas por la mala situación que atraviesan millones de familias en España como consecuencia de la crisis económica (paro, desahucios, emigración, etc…).
¿Se ha llegado ya al límite en España?
Según las fuentes consultadas, el mensaje que está transmitiendo el Gobierno durante estas conversaciones telefónicas, y en muchos casos el propio Mariano Rajoy, es de una clara preocupación.
A esos interlocutores se les pregunta, concretamente, cuánto tiempo creen que puede aguantar el país en esta difícil situación, y, más aún, si los españoles resistirían nuevos recortes o, por el contrario, se ha llegado ya al límite de lo que pueden aguantar.
También se les está demanda que expliquen, en su caso, posibles soluciones y salidas.
Le “aterra” una situación de tensión
Personas que hablan con frecuencia con el presidente del Gobierno explican a El Confidencial Digital que Mariano Rajoy ha confesado a su entorno más cercano que le “aterra” que se pueda producir una situación de máxima tensión en el país
Y pone un ejemplo concreto. No quiere ni oír hablar de algo semejante a la convulsión social que se vivió en España tras los atentados del 11 de marzo de 2004, que incluyeron protestas, agresiones a militantes, acoso a las sedes del PP…
En aquella ocasión, fue máxima la indignación de la sociedad por la barbarie terrorista, junto con la confusión sobre la autoría del atentado.
Pero ahora tampoco se pasa por alto la maltrecha situación que padecen muchas familias, ahogadas por la crisis económica, un clima que podría provocar un cóctel explosivo mayor incluso que el de entonces.
Hasta el momento, solo se han producido protestas aisladas en el entorno de las sedes del Partido Popular, sobre todo en la calle Génova. Sin embargo, tal y cómo se contó en estas páginas, la Policía ha desplegado desde septiembre furgones policiales en la sede nacional por los acosos (insultos, incluso amenazas de muerte…) que están sufriendo dirigentes y trabajadores del partido.
Rajoy cuenta con el apoyo de Bruselas
Lo que inquieta al presidente del Gobierno sobre todo es una posible reacción general, incluso violenta y en forma de algaradas, de los españoles en las calles.
Fuentes del Gobierno consultadas por ECD explican que a Rajoy no le preocupa la posición que pueda adoptar Europa en relación con los supuestos escándalos de corrupción que han salpicado últimamente al Partido Popular. Cuentan que es un asunto que ya tiene ‘amarrado’ con sus socios europeos, también gracias a sus discretos contactos durante el pasado fin de semana.
En Bruselas, afirman, no existe una presión sobre Mariano Rajoy. Todo lo contrario: Angela Merkel desea evitar que las turbulencias regresen a los mercados de deuda en vísperas de unas elecciones en Alemania.
La exigencia de Merkel
Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD revelan que, durante la última cumbre hispano-germana en Berlín, la canciller exigió en privado a Rajoy que el caso Bárcenas tenía que seguir siendo un asunto interno español, con el fin de evitar que se produzca un efecto contagio en otros países que pueda conducir a una nueva oleada de rescates europeos.
Se insiste en que la debilidad del Gobierno español no termine con los meses de calma que está viviendo la zona euro.
Se da por hecho un grave recrudecimiento de la crisis, si el escándalo de corrupción tumbara a Rajoy. Esta posibilidad lleva, por tanto, a Bruselas a apostar por la continuidad del Gobierno en Madrid.
La pregunta que se hace Rajoy: ¿cuánto tiempo puede aguantar España sin que se dé un estallido social? El presidente está sondeando a empresarios, instituciones y expertos
Según ha sabido El Confidencial Digital, de fuentes conocedoras de esos contactos reservados, el equipo de máxima confianza de Rajoy está consultando, en estas últimas semanas, a destacadas personalidades del país para conocer su veredicto sobre cómo puede evolucionar la situación en España, teniendo en cuenta los problemas que sufre el país, económicos, pero también políticos por la corrupción.
Estas fuentes confirman que algunas de las consultas las ha llevado a cabo personalmente el propio Mariano Rajoy desde su despacho del Palacio de La Moncloa.
El ‘escándalo Bárcenas’, que ha apuntado también al presidente en los últimos días, ha acrecentado su preocupación de que, sumados los problemas, pueda producirse un estallido social en España.
Consultas reservadas de alto nivel
Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD explican que entre las personalidades que han sido contactadas por Moncloa para conocer su evaluación se encuentran altos cargos, ex políticos, políticos, personas del mundo empresarial, banqueros, agentes sociales, institutos de estudios de máximo prestigio en España, periodistas e intelectuales.
Rajoy teme ahora, concretamente, que los españoles se planten y digan ‘basta’ a la vista de los episodios de corrupción que se están publicando estos días en la prensa.
Unas informaciones que se ven agravadas por la mala situación que atraviesan millones de familias en España como consecuencia de la crisis económica (paro, desahucios, emigración, etc…).
¿Se ha llegado ya al límite en España?
Según las fuentes consultadas, el mensaje que está transmitiendo el Gobierno durante estas conversaciones telefónicas, y en muchos casos el propio Mariano Rajoy, es de una clara preocupación.
A esos interlocutores se les pregunta, concretamente, cuánto tiempo creen que puede aguantar el país en esta difícil situación, y, más aún, si los españoles resistirían nuevos recortes o, por el contrario, se ha llegado ya al límite de lo que pueden aguantar.
También se les está demanda que expliquen, en su caso, posibles soluciones y salidas.
Le “aterra” una situación de tensión
Personas que hablan con frecuencia con el presidente del Gobierno explican a El Confidencial Digital que Mariano Rajoy ha confesado a su entorno más cercano que le “aterra” que se pueda producir una situación de máxima tensión en el país
Y pone un ejemplo concreto. No quiere ni oír hablar de algo semejante a la convulsión social que se vivió en España tras los atentados del 11 de marzo de 2004, que incluyeron protestas, agresiones a militantes, acoso a las sedes del PP…
En aquella ocasión, fue máxima la indignación de la sociedad por la barbarie terrorista, junto con la confusión sobre la autoría del atentado.
Pero ahora tampoco se pasa por alto la maltrecha situación que padecen muchas familias, ahogadas por la crisis económica, un clima que podría provocar un cóctel explosivo mayor incluso que el de entonces.
Hasta el momento, solo se han producido protestas aisladas en el entorno de las sedes del Partido Popular, sobre todo en la calle Génova. Sin embargo, tal y cómo se contó en estas páginas, la Policía ha desplegado desde septiembre furgones policiales en la sede nacional por los acosos (insultos, incluso amenazas de muerte…) que están sufriendo dirigentes y trabajadores del partido.
Rajoy cuenta con el apoyo de Bruselas
Lo que inquieta al presidente del Gobierno sobre todo es una posible reacción general, incluso violenta y en forma de algaradas, de los españoles en las calles.
Fuentes del Gobierno consultadas por ECD explican que a Rajoy no le preocupa la posición que pueda adoptar Europa en relación con los supuestos escándalos de corrupción que han salpicado últimamente al Partido Popular. Cuentan que es un asunto que ya tiene ‘amarrado’ con sus socios europeos, también gracias a sus discretos contactos durante el pasado fin de semana.
En Bruselas, afirman, no existe una presión sobre Mariano Rajoy. Todo lo contrario: Angela Merkel desea evitar que las turbulencias regresen a los mercados de deuda en vísperas de unas elecciones en Alemania.
La exigencia de Merkel
Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD revelan que, durante la última cumbre hispano-germana en Berlín, la canciller exigió en privado a Rajoy que el caso Bárcenas tenía que seguir siendo un asunto interno español, con el fin de evitar que se produzca un efecto contagio en otros países que pueda conducir a una nueva oleada de rescates europeos.
Se insiste en que la debilidad del Gobierno español no termine con los meses de calma que está viviendo la zona euro.
Se da por hecho un grave recrudecimiento de la crisis, si el escándalo de corrupción tumbara a Rajoy. Esta posibilidad lleva, por tanto, a Bruselas a apostar por la continuidad del Gobierno en Madrid.
La pregunta que se hace Rajoy: ¿cuánto tiempo puede aguantar España sin que se dé un estallido social? El presidente está sondeando a empresarios, instituciones y expertos
