http://www.elmundo-eldia.com/2006/12/08/opinion/1165532403.html
DAVID TORRES
DAVID TORRES
Al igual que el equilibrio biológico, el equilibrio político procede por una sutil estructura de ganancias y pérdidas. Los carnívoros son necesarios para mantener controladas las poblaciones de herbívoros, eliminar a los individuos tarados y hacer que la especie mejore. Es uno de los mecanismos principales de la llamada selección natural, propuesta por Darwin en su Teoría de la Evolución. Probablemente Darwin sea el científico más influyente de los últimos tres siglos, incluido Alfred Einstein. La teoría de la evolución vino a echar por tierra nuestras últimas ínfulas de grandeza. Resulta que no éramos ángeles modelados por Dios, sino primates evolucionados, monos que hasta ayer mismo andaban por ahí con el trastero al aire. En el tinglado de la política ocurre lo mismo. Nos escandalizamos de que exista la corrupción, pero es que la corrupción es consustancial al hecho mismo de la política. Si uno tira de la manta para denunciar un caso flagrante de trapicheo en una alcaldía, puede estar seguro de que mañana aparecerá un alcalde de su cuerda con el trastero al aire.
Los alcaldes corruptos son necesarios para la buena circulación del dinero y la recalificación de terrenos: eliminarlos a todos sería una maniobra suicida, algo así como cargarse a todas las moscas y gusanos del planeta. El sutil equilibrio político de la corrupción se vendría abajo. Sin un porcentaje suficientemente alto de alcaldías podridas, los grandes constructores no podrían medrar a sus anchas, y entonces, ¿cómo iba a construirse el Pocero ese yate que parece un portaaviones? Al final resulta que las moscas, las humildes y diminutas moscas que se alimentan de excrementos, son la frágil base sobre la que se sustentan los paquidermos.
Por eso, la llamada a la serenidad de Conde-Pumpido a Matas es la vuelta al equilibrio del sistema. La Fiscalía Anticorrupción no va a intervenir en más consistorios del archipiélago, ni del PP, ni del PSOE, ni de UM. Duerman tranquilos, lo de Andratx no es más que un espejismo. El poder judicial sabe muy bien que un exceso de higiene es más peligroso aún que la propia miseria. Los anticuerpos judiciales, libres de trabas morales, podrían lanzarse a la yugular misma del sistema y entonces estábamos aviados. ¿Cómo íbamos a sobrevivir en Mallorca sin cuchipandas, sin componendas, sin pelotazos, sin construcciones ilegales? Una isla completamente limpia de corrupción, sin moscas ni gusanos, sería el fin, sería como vivir en una burbuja, como respirar jabón en un pulmón de acero. Es duro decirlo pero necesitamos la hez. Sin corrupción Mallorca no habría evolucionado y no seríamos más que monos con el trastero al aire.
Andratx no ha sido más que el herbívoro sacrificado, el ejemplar más torpe y penoso de la manada, despedazado por los carnívoros para que el resto de la podredumbre evolucione y pueda seguir adelante. Lección de Darwin: hay que robar mejor, sin que se note. En la corrupción, como en la evolución, sólo sobreviven los más aptos