Glasterthum
Madmaxista
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Yo he seguido una trayectoria en este tema que ha pasado a grandes rasgos por tres fases.
En la primera fase: el tremendismo. El pesimismo y los miedos irracionales (pero razonados) se adueñan de mí. Imágenes y situaciones ficticias pasan por mi mente, soluciones "imaginativas" leo en el foro y pasan por mi mente, recochineos y humor extraño se hace con algunos agentes de la situación.
En la segunda fase, en la que estaba hasta hace poco y muchos me podíais leer: el relativismo. "Bueno, no será para tanto". "En Japón fue mucho peor que aquí". "No creo que pase lo peor de lo peor que se dice por aquí". En definitiva, tirando un poco hacia "ex-burbujista", pero siguiendo siendo burbujista convencido, sólo que pensando que "había sido demasiado pesimista al principio".
Y en esta tercera fase en la que estoy, que podría considerarse la síntesis de las dos anteriores (tesis y antítesis), considero que va a haber un batacazo rellenito. Lo pienso así sin más, sin tapujos, ni miedos adicionales ni rollos raros ni imaginaciones extrañas. Sencillamente, y me da algo de miedo (pero miedo realista, no un miedo extraño y ante algo lejano), pienso que la bajada de los pisos será brutal, motivada por una brutal situación económica de las familias (la cual acelerará la caída), y que en definitiva, sumirá a España en una durísima recesión. Y que yo no puedo hacer nada para evitarlo, ni sabré qué pasará con mi trabajo y el de mis conocidos: sencillamente, lo que tenga que ser será, y cuando llegue ese puente ya lo cruzaré.
Como digo, tengo un miedo realista. Un miedo que no impulsa a pensar en hacer cosas "ya" mientras no se hace nada inmerso en la maraña de ideas y datos, sino un expectante y realista miedo de "simplemente sentarse y preparse para levantarse cuando toque". Un miedo que no consiste, como era la primera fase, en mirarse el ombligo y pensar "España se hunde", "habrá que emigrar" o enterarse de todo lo posible sobre el tema, aun de los detalles más insignificantes (tal vez porque ya lo sé todo). Y digo no mirarse el ombligo, entre otras cosas, porque veo que la recesión será común a otros países, pero en España será donde más fuerte pegue: así, en EE.UU. también habrá otra, la cual nos impactará al tiempo que nos afecte nuestra propia explosión de la burbuja. Seremos golpeados por varias burbujas al mismo tiempo; y la cosa no será agradable.
En la primera fase: el tremendismo. El pesimismo y los miedos irracionales (pero razonados) se adueñan de mí. Imágenes y situaciones ficticias pasan por mi mente, soluciones "imaginativas" leo en el foro y pasan por mi mente, recochineos y humor extraño se hace con algunos agentes de la situación.
En la segunda fase, en la que estaba hasta hace poco y muchos me podíais leer: el relativismo. "Bueno, no será para tanto". "En Japón fue mucho peor que aquí". "No creo que pase lo peor de lo peor que se dice por aquí". En definitiva, tirando un poco hacia "ex-burbujista", pero siguiendo siendo burbujista convencido, sólo que pensando que "había sido demasiado pesimista al principio".
Y en esta tercera fase en la que estoy, que podría considerarse la síntesis de las dos anteriores (tesis y antítesis), considero que va a haber un batacazo rellenito. Lo pienso así sin más, sin tapujos, ni miedos adicionales ni rollos raros ni imaginaciones extrañas. Sencillamente, y me da algo de miedo (pero miedo realista, no un miedo extraño y ante algo lejano), pienso que la bajada de los pisos será brutal, motivada por una brutal situación económica de las familias (la cual acelerará la caída), y que en definitiva, sumirá a España en una durísima recesión. Y que yo no puedo hacer nada para evitarlo, ni sabré qué pasará con mi trabajo y el de mis conocidos: sencillamente, lo que tenga que ser será, y cuando llegue ese puente ya lo cruzaré.
Como digo, tengo un miedo realista. Un miedo que no impulsa a pensar en hacer cosas "ya" mientras no se hace nada inmerso en la maraña de ideas y datos, sino un expectante y realista miedo de "simplemente sentarse y preparse para levantarse cuando toque". Un miedo que no consiste, como era la primera fase, en mirarse el ombligo y pensar "España se hunde", "habrá que emigrar" o enterarse de todo lo posible sobre el tema, aun de los detalles más insignificantes (tal vez porque ya lo sé todo). Y digo no mirarse el ombligo, entre otras cosas, porque veo que la recesión será común a otros países, pero en España será donde más fuerte pegue: así, en EE.UU. también habrá otra, la cual nos impactará al tiempo que nos afecte nuestra propia explosión de la burbuja. Seremos golpeados por varias burbujas al mismo tiempo; y la cosa no será agradable.
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