Me ha molado este video que he visto en el canal de Pedro Redes
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Lo suscribo totalmente. En este hilo he repetido muchas veces que esto es una carrera estrictamente individual. Tanto respecto a lo que ya tenemos encima, como especialmente a nivel espiritual.
La pertenencia al grupo necesariamente te reduce a una expresión muy reducida y limitada de ti mismo. Y considero grupo ya a dos personas. Eso ya es "grupo" para mi. Y cuántos más miembros en el grupo, más torpeza de movimientos, de toma de decisiones y de ejecución de actuaciones. De manera exponencialmente proporcional al número de miembros.
El grupo crea una falsa percepción de seguridad, cuando se trata más bien de una trampa donde acaban cayendo más facilmente todos de golpe.
Por eso las élites mandan mensajes continuamente donde se ensalza el valor del grupo y la unidad. Son muy "inclusivos" y "fraternales".
El "bien común" es lo más importante. Por e
l "interés general".
Todos unidos saldremos más fuertes.
Irán de victoria en victoria hasta la derrota final. Una manifestación del Mal tan apabullante no puede prevalecer. Serán aplastados sin compasión. Que nadie lo dude. Está escrito además. Les va a durar poco el chiringuito.
Por otro lado, hay que sentirse bien en esa soledad. Si la inmensa mayoría está ciega, dejadlos. No os sintáis contrariados por ello, aunque sea gente cercana.
Dad gracias a Dios por no ser como ellos y que tengáis lo ojos abiertos. La brecha que se ha abierto entre la borregada y la minoría que vemos de qué va esta historia, ya es insalvable. No vale la pena esforzarse por cambiar a nadie. Y sentiros unos privilegiados porque lo somos. Y llevadlo en secreto. Sin ira, arrogancia o provocación hacia nadie. Siempre discretos y con ese regocijo interno de que ves la realidad tal y como es.
No te entristezcas por los demás. Alégrate por ti mismo.
Esta actitud le predispone a uno de forma positiva hacia el despertar espiritual. Esa actitud te acerca a Dios. Te posiciona en su bando. Y que nadie dude que al final Él hará justicia dando a cada uno lo que se merece, para bien y para mal.
Enésima disonancia cognitiva que un borregomatrix jamás detectaría.
