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Madmaxista
5 de diciembre de 2019 —- El ex director del Departamento de Física de la Universidad de Princeton, William Happer, ex asesor adjunto del Presidente y director principal de Tecnologías Emergentes en el Consejo de Seguridad Nacional de los Estados Unidos (NSC, en sus siglas en inglés), fue el ponente principal en la conferencia del Heartland Institute, que se llevó a cabo en Madrid el 2 de diciembre, titulada, “Refutación del engaño climático de la ONU”.
Comenzó sin desperdiciar palabras, y señaló que los asistentes a la “cumbre” de la ONU sobre cambio climático (COP25), en la misma ciudad, eran miembros de una “secta ecologista” reunida para debatir una “emergencia climática inexistente”. parte de un "culto ecologista" que tiene un aquelarre para debatir sobre una "emergencia climática inexistente".
“Es difícil entender que más lejos pueden llegar con su estridencia, dado que esto comenzó como el ‘calentamiento global’, luego se convirtió en ‘cambio climático’ o el misterio global, la crisis climática, la emergencia climática, ¿qué vendrá después? Pero manténganse atentos; algo va a venir. Yo espero que tarde o temprano habrá suficiente gente que reconozca la santidad de esta secta ambientalista descabellada y pongan un parado”, dijo Happer. “Lo que tenemos es una cruzada climática… Esto no es ciencia. Es una religión”. Y les recordó que las "cruzadas terminan de mala manera. Por lo común, mucha, mucha gente resulta herida; no se hace ningún bien, pero algunos oportunistas cínicos sacan ganancias y la mayoría de la gente paga por ello. Lo mismo va a suceder con la cruzada climática si permitimos que siga avanzando, y ruego porque podamos detenerla antes de que haga más daño", agregó. (Pueden ver el video del discurso de Harper en este enlace: Watch: Fmr. Trump Science Adviser Dr. Happer in Madrid At UN Summit: Rips ‘non-existent climate emergency’ & ‘Phoniness of this bizarre environmental cult’).
Según la reseña de E&ENews, Happer habló también de por qué dejó su cargo en el Consejo de Seguridad Nacional, indicando que el Presidente Donald Trump estaba muy dispuesto a llevar “más racionalidad a las políticas sobre el clima… En lo personal, él lo siente así firmemente”, pero “mucha gente en la Casa Blanca que lo asesora están nerviosos por las implicaciones políticas de ello”. En el NSC Happer tenía la intención de instalar dos equipos opuestos —un equipo rojo y uno azul— para analizar la exactitud de la ciencia climática, pero su propuesta fue rechazada, por los funcionarios “lavados de cerebro” de la Casa Blanca, explicó Happer. Estos mismos asesores se rehusaron a cambiar, o estaban muy asustados como para ponerlo en duda, la alarmista Evaluación Nacional sobre el Clima del 2018, que dio crédito a la seudociencia climática.
Happer dijo que si el Presidente Trump es reelecto, es posible que la “idea de un equipo rojo” pueda discutirse de nuevo. Y afirmó que si Trump gana de nuevo las elecciones, él lo va a asesorar para que reduzca el financiamiento a la ciencia climática. Hay demasiado presupuesto del gobierno que está yendo a esta área, dijo, “en el entendido que los resultados de las investigaciones deben reforzar la narrativa de que sí hay una crisis”.
Comenzó sin desperdiciar palabras, y señaló que los asistentes a la “cumbre” de la ONU sobre cambio climático (COP25), en la misma ciudad, eran miembros de una “secta ecologista” reunida para debatir una “emergencia climática inexistente”. parte de un "culto ecologista" que tiene un aquelarre para debatir sobre una "emergencia climática inexistente".
“Es difícil entender que más lejos pueden llegar con su estridencia, dado que esto comenzó como el ‘calentamiento global’, luego se convirtió en ‘cambio climático’ o el misterio global, la crisis climática, la emergencia climática, ¿qué vendrá después? Pero manténganse atentos; algo va a venir. Yo espero que tarde o temprano habrá suficiente gente que reconozca la santidad de esta secta ambientalista descabellada y pongan un parado”, dijo Happer. “Lo que tenemos es una cruzada climática… Esto no es ciencia. Es una religión”. Y les recordó que las "cruzadas terminan de mala manera. Por lo común, mucha, mucha gente resulta herida; no se hace ningún bien, pero algunos oportunistas cínicos sacan ganancias y la mayoría de la gente paga por ello. Lo mismo va a suceder con la cruzada climática si permitimos que siga avanzando, y ruego porque podamos detenerla antes de que haga más daño", agregó. (Pueden ver el video del discurso de Harper en este enlace: Watch: Fmr. Trump Science Adviser Dr. Happer in Madrid At UN Summit: Rips ‘non-existent climate emergency’ & ‘Phoniness of this bizarre environmental cult’).
Según la reseña de E&ENews, Happer habló también de por qué dejó su cargo en el Consejo de Seguridad Nacional, indicando que el Presidente Donald Trump estaba muy dispuesto a llevar “más racionalidad a las políticas sobre el clima… En lo personal, él lo siente así firmemente”, pero “mucha gente en la Casa Blanca que lo asesora están nerviosos por las implicaciones políticas de ello”. En el NSC Happer tenía la intención de instalar dos equipos opuestos —un equipo rojo y uno azul— para analizar la exactitud de la ciencia climática, pero su propuesta fue rechazada, por los funcionarios “lavados de cerebro” de la Casa Blanca, explicó Happer. Estos mismos asesores se rehusaron a cambiar, o estaban muy asustados como para ponerlo en duda, la alarmista Evaluación Nacional sobre el Clima del 2018, que dio crédito a la seudociencia climática.
Happer dijo que si el Presidente Trump es reelecto, es posible que la “idea de un equipo rojo” pueda discutirse de nuevo. Y afirmó que si Trump gana de nuevo las elecciones, él lo va a asesorar para que reduzca el financiamiento a la ciencia climática. Hay demasiado presupuesto del gobierno que está yendo a esta área, dijo, “en el entendido que los resultados de las investigaciones deben reforzar la narrativa de que sí hay una crisis”.