paconan
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Esto animará mucho al votante el pp:XX:
El constructor David Marjaliza asegura ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco que fue el ex secretario general del PP de Madrid Francisco Granados quien puso en marcha las relaciones entre ambos, cuando era alcalde de Valdemoro y le propuso que se juntara con otro constructor, para "ayudarles", a través de la adjudicación de suelo en esa localidad, aunque en el encuentro, admite, no lo dice expresamente.
En los audios de este interrogatorio, practicado en junio de hace un año y a los que ha tenido acceso EL MUNDO, Marjaliza asegura que fue en una comida donde Granados le propuso unir a otro constructor fuerte de Valdemoro, Ramiro Cid Sicluna. "Paco nos junta un día a comer y nos dice que intentemos juntarnos y creamos una sociedad en Valdemoro", explica el investigado y más adelante, a preguntas de la fiscal responde: "Granados nos dice que nos va a ayudar".
"Creamos una sociedad en Valdemoro. Creo que era Servicios de Obras y Vías. Éramos Ramiro, yo y la mujer de su jefe de gabinete, Ignacio Palacios", explica.
El constructor sostiene ante el juez instructor de la operación Púnica y las fiscales del caso que a través de esa mujer era como Granados cobra su porcentaje, que no recuerda si era del 20 o del 10%.
Chalés baratos en Marbella para 'sembrar y después recoger'
La declaración deja claro cómo el empresario invertía en llevarse bien con políticos. Cuando el juez le preguntó sobre las casas en Playas del Arenal de Marbella que tuvieron él mismo, Francisco Granados y el ex alcalde de Valdemoro José Miguel Moreno Torres (el de "me hice diputado para tocarme los bemoles"), dijo Marjaliza que tiene esas casas desde hace 10 o 12 años. Que su mujer y él querían comprar algo en la costa desde hace tiempo. Que la vieron en el salón inmobiliario, se lo contó "a Paco y a José Miguel" y fueron con él a verlo y "decidieron comprar una casa cada uno". Y, finalmente, que cada uno pagó de su bolsillo la señal para pagar la casa.
Sin embargo, "por motivos estéticos", ellos decidieron no figurar en la casa y prefirieron que las casas estuvieran a nombre de Marjaliza, seguramente "porque Paco ya era alcalde y José Miguel teniente de alcalde".
Entonces Marjaliza reconoce al juez y a la fiscal que compró él las casas y él se las alquilaba a precio de amigo: "3.000 o 4.000 euros al año".
La fiscal le pregunta que si pagaba más de hipoteca por esas casas que lo que recibía por el alquiler, y él reconoce que pagaba "mucho más". ¿Por qué?, pregunta la fiscal. "Por agasajarles, por sembrar para después recoger", concluye el empresario.
El juez Velasco le pregunta si le pidió algo a cambio algún funcionario. Responde: "Lo más que me pasó alguna vez es que el alcalde [de Valdemoro] me decía: 'Regálale un reloj a fulanito'. Era un técnico. No, un concejal... Si es que ni me acuerdo, he hecho tantos regalos... A unos les regalaba un reloj, a otros un bolso. He hecho muchos regalos, muchos".
'Pagué a Moreno Torres más de 400.000 en efectivo'
Además, Marjaliza reconoció ante el juez haber pagado "más de 400.000 euros" al ex alcalde de Valdemoro José Miguel Moreno Torres. "Es amigo mío personal y tengo una buena relación con él", empieza relatando al juez y a la fiscal del caso. Eloy Velasco le pregunta si el ex alcalde de Valdemoro, sucesor y amigo de Granados en el cargo de la Alcaldía, recibió alguna prebenda gracias a conceder adjudicaciones a las empresas de Marjaliza".
"Tendría que coger papeles, pero por alguna adjudicación, seguro", reconoce el empresario.
¿Le dio más de 20.000 euros?, pregunta Velasco, y el empresario contesta: "¡Mucho más!".
- ¿Más de 200.000?, sigue Velasco.
- Más de 200.000, más de 300.000, y más de 400.000 seguro. Más de un millón ya no creo.
- ¿Cómo se lo daba?
- En sobres, siempre en efectivo.
Marjaliza concluye esta parte de sus 13 horas de declaraciones explicando que "la mayoría del dinero siempre ha estado en el suelo", en las adjudicaciones de parcelas para edificar por las que él pagaba comisiones.
Marjaliza presionó a los Huérfanos de la Guardia Civil para que cedieran un terreno a Lidl
Marjaliza admite en otro corte cómo presionó a través del alcalde de Valdemoro a la Asociación Pro Huérfanos de la Guardia Civil para quedarse con un terreno en el centro de la localidad por el que "estaba interesada una empresa de alimentación". "Era un plan parcial que no se podía inscribir porque la Guardia Civil no había pagado un dinero de una licencia, y luego había una parcela que nos interesaba porque la quería sacar a concurso", explica Marjaliza. "Me dijeron que faltaba un pago y en una conversación [yo] decía: 'Oye, pues presiona al general o al que sea para que pague ya de una vez y podemos sacar esto a concurso'".
En realidad, completando la versión con las escuchas policiales, se trataba de un terreno propiedad de la asociación en el centro de Valdemoro que le iba a ser cambiado por otro nueve veces mayor en las afueras para uso y disfrute propio. Sin embargo, la institución no había llegado a cerrar el acuerdo con el Consistorio, que le pedía 120.000 euros en licencias. Marjaliza necesitaba que el acuerdo llegara para sacar a concurso el suelo y hacerse con él. "Bueno, en ese caso no iba a ser yo, sino un amigo", le comenta a Velasco. "Nos interesaba porque había una empresa de alimentación que lo quería, pero no se llegó a hacer. ¿Qué sacaríamos? Cuando se supiera el precio ya pactábamos, oye, pues si hay un margen de 100, nos repartimos 50". ¿Qué empresa era?, le pregunta el magistrado. "Era Lidl", contesta.
Francisco Granados se llevaba mordidas de hasta el 20% por las adjudicaciones de suelo | España | EL MUNDO
El constructor David Marjaliza asegura ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco que fue el ex secretario general del PP de Madrid Francisco Granados quien puso en marcha las relaciones entre ambos, cuando era alcalde de Valdemoro y le propuso que se juntara con otro constructor, para "ayudarles", a través de la adjudicación de suelo en esa localidad, aunque en el encuentro, admite, no lo dice expresamente.
En los audios de este interrogatorio, practicado en junio de hace un año y a los que ha tenido acceso EL MUNDO, Marjaliza asegura que fue en una comida donde Granados le propuso unir a otro constructor fuerte de Valdemoro, Ramiro Cid Sicluna. "Paco nos junta un día a comer y nos dice que intentemos juntarnos y creamos una sociedad en Valdemoro", explica el investigado y más adelante, a preguntas de la fiscal responde: "Granados nos dice que nos va a ayudar".
"Creamos una sociedad en Valdemoro. Creo que era Servicios de Obras y Vías. Éramos Ramiro, yo y la mujer de su jefe de gabinete, Ignacio Palacios", explica.
El constructor sostiene ante el juez instructor de la operación Púnica y las fiscales del caso que a través de esa mujer era como Granados cobra su porcentaje, que no recuerda si era del 20 o del 10%.
Chalés baratos en Marbella para 'sembrar y después recoger'
La declaración deja claro cómo el empresario invertía en llevarse bien con políticos. Cuando el juez le preguntó sobre las casas en Playas del Arenal de Marbella que tuvieron él mismo, Francisco Granados y el ex alcalde de Valdemoro José Miguel Moreno Torres (el de "me hice diputado para tocarme los bemoles"), dijo Marjaliza que tiene esas casas desde hace 10 o 12 años. Que su mujer y él querían comprar algo en la costa desde hace tiempo. Que la vieron en el salón inmobiliario, se lo contó "a Paco y a José Miguel" y fueron con él a verlo y "decidieron comprar una casa cada uno". Y, finalmente, que cada uno pagó de su bolsillo la señal para pagar la casa.
Sin embargo, "por motivos estéticos", ellos decidieron no figurar en la casa y prefirieron que las casas estuvieran a nombre de Marjaliza, seguramente "porque Paco ya era alcalde y José Miguel teniente de alcalde".
Entonces Marjaliza reconoce al juez y a la fiscal que compró él las casas y él se las alquilaba a precio de amigo: "3.000 o 4.000 euros al año".
La fiscal le pregunta que si pagaba más de hipoteca por esas casas que lo que recibía por el alquiler, y él reconoce que pagaba "mucho más". ¿Por qué?, pregunta la fiscal. "Por agasajarles, por sembrar para después recoger", concluye el empresario.
El juez Velasco le pregunta si le pidió algo a cambio algún funcionario. Responde: "Lo más que me pasó alguna vez es que el alcalde [de Valdemoro] me decía: 'Regálale un reloj a fulanito'. Era un técnico. No, un concejal... Si es que ni me acuerdo, he hecho tantos regalos... A unos les regalaba un reloj, a otros un bolso. He hecho muchos regalos, muchos".
'Pagué a Moreno Torres más de 400.000 en efectivo'
Además, Marjaliza reconoció ante el juez haber pagado "más de 400.000 euros" al ex alcalde de Valdemoro José Miguel Moreno Torres. "Es amigo mío personal y tengo una buena relación con él", empieza relatando al juez y a la fiscal del caso. Eloy Velasco le pregunta si el ex alcalde de Valdemoro, sucesor y amigo de Granados en el cargo de la Alcaldía, recibió alguna prebenda gracias a conceder adjudicaciones a las empresas de Marjaliza".
"Tendría que coger papeles, pero por alguna adjudicación, seguro", reconoce el empresario.
¿Le dio más de 20.000 euros?, pregunta Velasco, y el empresario contesta: "¡Mucho más!".
- ¿Más de 200.000?, sigue Velasco.
- Más de 200.000, más de 300.000, y más de 400.000 seguro. Más de un millón ya no creo.
- ¿Cómo se lo daba?
- En sobres, siempre en efectivo.
Marjaliza concluye esta parte de sus 13 horas de declaraciones explicando que "la mayoría del dinero siempre ha estado en el suelo", en las adjudicaciones de parcelas para edificar por las que él pagaba comisiones.
Marjaliza presionó a los Huérfanos de la Guardia Civil para que cedieran un terreno a Lidl
Marjaliza admite en otro corte cómo presionó a través del alcalde de Valdemoro a la Asociación Pro Huérfanos de la Guardia Civil para quedarse con un terreno en el centro de la localidad por el que "estaba interesada una empresa de alimentación". "Era un plan parcial que no se podía inscribir porque la Guardia Civil no había pagado un dinero de una licencia, y luego había una parcela que nos interesaba porque la quería sacar a concurso", explica Marjaliza. "Me dijeron que faltaba un pago y en una conversación [yo] decía: 'Oye, pues presiona al general o al que sea para que pague ya de una vez y podemos sacar esto a concurso'".
En realidad, completando la versión con las escuchas policiales, se trataba de un terreno propiedad de la asociación en el centro de Valdemoro que le iba a ser cambiado por otro nueve veces mayor en las afueras para uso y disfrute propio. Sin embargo, la institución no había llegado a cerrar el acuerdo con el Consistorio, que le pedía 120.000 euros en licencias. Marjaliza necesitaba que el acuerdo llegara para sacar a concurso el suelo y hacerse con él. "Bueno, en ese caso no iba a ser yo, sino un amigo", le comenta a Velasco. "Nos interesaba porque había una empresa de alimentación que lo quería, pero no se llegó a hacer. ¿Qué sacaríamos? Cuando se supiera el precio ya pactábamos, oye, pues si hay un margen de 100, nos repartimos 50". ¿Qué empresa era?, le pregunta el magistrado. "Era Lidl", contesta.
Francisco Granados se llevaba mordidas de hasta el 20% por las adjudicaciones de suelo | España | EL MUNDO
