En España hay redes clientelares enormes. Funcionarios que deben su pan a la consistencia de ciertos partidos políticos en el gobierno. ¿Cómo podríamos convencerles de que no voten para deslegitimar al R78? Y son suficientes millones como para legitimar el resultado de unas elecciones. El tercio Laocrático de los indecisos no es suficiente.