Todos los afectados por la educación socialista hemos oido la frase los seres vivos nacen, crecen, se reproducen y mueren. Los hadices sobre la vida de Ayn Rand nos enseñan que el tercer paso es prescindible, pero aún así sus seguidores pueden practicar el sesso con carácter recreativo o para tener hijos que posteriormente comercializar; eso sí, siendo una actividad de acto riesgo que puede conducir fácilmente a la muerte o a la parálisis permanente, hemos de tomar precauciones para conseguir sobrevivir a los encuentros.
Análisis de peligro: la otra persona
De acuerdo con estadísticas extraidas de un oscuro libro de los años setenta que he comprado en un rastrillo, el 73% de los asesinados en el coito o en los momentos inmediatamente posteriores lo son a manos de la persona con la que lo estaban practicando 8::8::8. Podemos reducir el riesgo eligiendo bien a nuestra pareja, siendo los grupos más seguros, por este orden:
-Objetos inanimados (melones, peluches).
-Animales sumisos a los que podamos atar.
-Suizos.
Piedra de toque
-Personas a las que conocemos de toda la vida, como parientes cercanos.
-Personas a las que conocemos desde hace al menos una década, tratamos habitualmente y a las que hemos hecho triaje a través de los informes de detectives federados.
En teoría, alguien podría querer tener relaciones sensuales con un adulto desconocido 8::8::8::8. En ese caso, en la conversación anterior al coito hemos de conseguir diversos datos y objetos:
-Número de DNI, para comprobar si es quien dice que es. Si la persona que nos está seduciendo o a la que intentamos seducir emplea un nombre falso o ha nacido antes de 1905 sospeche. Si afirma ser de un sesso diferente al que figura en el documento es un valiente insumiso que está troleando al sistema, fólleselo. Hay diversas maneras de conseguir el documento: afirmar ser un racista que no toca a personas nacidas en otro país, desconfiar de la mayoría de edad de nuestra potencial pareja o señalar que tiene una fobia horrible a los seises. Déjelas caer en la conversación con naturalidad.
-Muestra genética. Aproveche que se gira para pedir en la barra para cortar un mechón de cabello. Si lo advierte, diga que es para "mi colección" y sonría lo más que pueda, mirándola a los ojos y asintiendo. Algunas mujeres reaccionan a esto marchándose; evidentemente no quieren poder ser identificadas, ocultan algo y no nos convienen.
-Respuesta a una batería de preguntas: ¿Ha leído La Rebelión de Atlas? ¿Qué porcentaje de sus ahorros se encuentran fijados en metales preciosos? ¿Ha leído El Manantial? ¿Qué opina de La Virtud del Egoísmo? ¿Qué haría si un médico le diagnosticara cáncer? ¿Ha leído Himno? ¿Es usted un arconte? Etcétera.
Prototipo ideal.
Análisis de riesgos: el lugar
El mejor lugar para tener relaciones sensuales es en nuestra propia casa. Conocemos las posibles entradas y salidas, podemos estar moderadamente seguros de que no hay asesinos con puñales en el armario (un cortesano francés en el siglo XVIII falleció a manos de un asesino oculto en un armario, y también le puede pasar a usted) y tendremos medios para deshacernos del cuerpo de nuestra pareja en el caso de que un movimiento brusco por su parte nos obligue a dispararle spray antivioladores a la cara y golpearlo en la sien con una linterna hasta que deje de moverse.
Si cree que ella puede suponer una amenaza, deposítela aquí.
A la entrada de la habitación en la que mantendremos relaciones sensuales es recomendable disponer de un detector de metales para evaluar si nuestra pareja porta armas ocultas (las nuestras las dejaremos fuera para que no pite, pero tendremos siempre un hacha o ballesta debajo del colchón).
Las sábanas o fundas de almohada podrían ser aprovechadas por nuestra enemiga, digo pareja, para atarle en medio de un juego de naturaleza sensual y luego apiolarle a placer (yo era un hippie promiscuo hasta que vi esta escena en una película hace veinte años y me traumatizó). Un colchón bastará para retozar. En el suelo, para prevenir incómodas caídas o rallar el suelo en los embites de la pasión.
Algunos temerarios encienden velas para dar ambiente y luego mueren asfixiados por el dióxido de carbono o calcinados por un incendio de rápida propagación. Yo prefiero robar velas eléctricas en las iglesias.
Todo el encuentro debe estar grabado por una cámara oculta a fin de disponer de pruebas ante posteriores denuncias. De hecho, lo mejor es que se retransmita en directo a los monitores de una empresa de seguridad que haga un seguimiento las 24 horas del día. Si tiene usted encuentros sensuales frecuentes con mujeres de buen ver puede conseguir descuentos.
Prescinda de los picahielos en la mesilla de noche. Los picahielos son al sesso lo que los insurgentes sudaneses al general Gordon:
Muy poco recomendables.
Análisis de riesgos: el equipo y las posturas
Cuando la FARMAFIA le hable de "protección" se referirá a los preservativos, pero despreocúpese; he llegado a la conclusión de que el SIDA y la sífilis son timos a base de leer selectivamente la literatura médica. En cambio, la FARMAFIA no le habla de aquellas cosas que la FARMAFIA no vende y que son esenciales a la hora de tener relaciones sensuales, como los guantes anticorte, la bombona de oxígeno para responder a situaciones de asfixia autoerótica o los protectores de rodilla.
De hecho, lo mejor es tener disponible una ropa para amar. ¿Usted se viste de una determinada forma para ir a la piscina o para acudir a una entrevista de trabajo, verdad? Hágalo entonces también para tener relaciones sensuales.
Ropa de folleteo. Si se encuentra a una zagala vestida así no la deje escapar, es una prepper.
¿Se ha preguntado alguna vez por qué tanta propaganda del Kamasutra y sus tendiníticas posturas? De mis frecuentes lecturas de El Retorno de los Brujos y el subforo de Conspiraciones he averiguado que a los arcontes ya no les excita ver cómo nos apareamos cocodrileando en el misionero, y que una mamadilla normal ya no les da para paja: después de milenios viéndonos amar han hecho callo. Así que intentan convencernos para que hagamos El Dragón Entra en la Tercera Casa Celestial y demás guarradas.
Aquí Stanley Kubrick intentando advertirnos contra los tríos, promovidos por sociedades secretas y tal. Fíjense que encima del tío del medio tenemos una única luz y a los lados muchas más pequeñas; representan el sol y las estrellas y son un aviso de que el hombre nunca llegó a la Luna.
Las posturas con ella arriba no son nunca recomendables. Desde la Antigüedad los ejércitos vienen buscando la mayor altura para conseguir ventaja sobre el enemigo, no la ceda así como así y piense en lo que haría Aníbal en su situación. Las posturas con el hombre arriba son, en general, recomendables, pero le dan pie a ella para ponerle las manos en la espalda (Aníbal no cedería la retaguardia) y hasta le pueden meter un dedo por... ahí :vomito:
La postura preferida por el positivista sombrío es la del perrito, que además permite girar el cuello y tener una buena visión panorámica del entorno ante posibles peligros que nos pueden coger desprevenidos, como tifones o asesinos saliendo del armario (nunca se está seguro de esto). Pero cuidado, podríamos equivocarnos y realizar una penetración anal, que equivale a muerte.
En definitiva, no hay postura sensual segura. Lo más recomendable no llegar a tocar nunca a nuestra amante, y mantener una distancia mínima de seguridad.
Como podemos apreciar en este dibujo, la distancia íntima va entre los 15 y 45 centímetros de distancia, así que no hay que acercarse más que quince centímetros en el peor de los casos. Qué alivio.
Análisis de peligro: la otra persona
De acuerdo con estadísticas extraidas de un oscuro libro de los años setenta que he comprado en un rastrillo, el 73% de los asesinados en el coito o en los momentos inmediatamente posteriores lo son a manos de la persona con la que lo estaban practicando 8::8::8. Podemos reducir el riesgo eligiendo bien a nuestra pareja, siendo los grupos más seguros, por este orden:
-Objetos inanimados (melones, peluches).
-Animales sumisos a los que podamos atar.
-Suizos.
Piedra de toque
-Personas a las que conocemos de toda la vida, como parientes cercanos.
-Personas a las que conocemos desde hace al menos una década, tratamos habitualmente y a las que hemos hecho triaje a través de los informes de detectives federados.
En teoría, alguien podría querer tener relaciones sensuales con un adulto desconocido 8::8::8::8. En ese caso, en la conversación anterior al coito hemos de conseguir diversos datos y objetos:
-Número de DNI, para comprobar si es quien dice que es. Si la persona que nos está seduciendo o a la que intentamos seducir emplea un nombre falso o ha nacido antes de 1905 sospeche. Si afirma ser de un sesso diferente al que figura en el documento es un valiente insumiso que está troleando al sistema, fólleselo. Hay diversas maneras de conseguir el documento: afirmar ser un racista que no toca a personas nacidas en otro país, desconfiar de la mayoría de edad de nuestra potencial pareja o señalar que tiene una fobia horrible a los seises. Déjelas caer en la conversación con naturalidad.
-Muestra genética. Aproveche que se gira para pedir en la barra para cortar un mechón de cabello. Si lo advierte, diga que es para "mi colección" y sonría lo más que pueda, mirándola a los ojos y asintiendo. Algunas mujeres reaccionan a esto marchándose; evidentemente no quieren poder ser identificadas, ocultan algo y no nos convienen.
-Respuesta a una batería de preguntas: ¿Ha leído La Rebelión de Atlas? ¿Qué porcentaje de sus ahorros se encuentran fijados en metales preciosos? ¿Ha leído El Manantial? ¿Qué opina de La Virtud del Egoísmo? ¿Qué haría si un médico le diagnosticara cáncer? ¿Ha leído Himno? ¿Es usted un arconte? Etcétera.
Prototipo ideal.
Análisis de riesgos: el lugar
El mejor lugar para tener relaciones sensuales es en nuestra propia casa. Conocemos las posibles entradas y salidas, podemos estar moderadamente seguros de que no hay asesinos con puñales en el armario (un cortesano francés en el siglo XVIII falleció a manos de un asesino oculto en un armario, y también le puede pasar a usted) y tendremos medios para deshacernos del cuerpo de nuestra pareja en el caso de que un movimiento brusco por su parte nos obligue a dispararle spray antivioladores a la cara y golpearlo en la sien con una linterna hasta que deje de moverse.
Si cree que ella puede suponer una amenaza, deposítela aquí.
A la entrada de la habitación en la que mantendremos relaciones sensuales es recomendable disponer de un detector de metales para evaluar si nuestra pareja porta armas ocultas (las nuestras las dejaremos fuera para que no pite, pero tendremos siempre un hacha o ballesta debajo del colchón).
Las sábanas o fundas de almohada podrían ser aprovechadas por nuestra enemiga, digo pareja, para atarle en medio de un juego de naturaleza sensual y luego apiolarle a placer (yo era un hippie promiscuo hasta que vi esta escena en una película hace veinte años y me traumatizó). Un colchón bastará para retozar. En el suelo, para prevenir incómodas caídas o rallar el suelo en los embites de la pasión.
Algunos temerarios encienden velas para dar ambiente y luego mueren asfixiados por el dióxido de carbono o calcinados por un incendio de rápida propagación. Yo prefiero robar velas eléctricas en las iglesias.
Todo el encuentro debe estar grabado por una cámara oculta a fin de disponer de pruebas ante posteriores denuncias. De hecho, lo mejor es que se retransmita en directo a los monitores de una empresa de seguridad que haga un seguimiento las 24 horas del día. Si tiene usted encuentros sensuales frecuentes con mujeres de buen ver puede conseguir descuentos.
Prescinda de los picahielos en la mesilla de noche. Los picahielos son al sesso lo que los insurgentes sudaneses al general Gordon:
Muy poco recomendables.
Análisis de riesgos: el equipo y las posturas
Cuando la FARMAFIA le hable de "protección" se referirá a los preservativos, pero despreocúpese; he llegado a la conclusión de que el SIDA y la sífilis son timos a base de leer selectivamente la literatura médica. En cambio, la FARMAFIA no le habla de aquellas cosas que la FARMAFIA no vende y que son esenciales a la hora de tener relaciones sensuales, como los guantes anticorte, la bombona de oxígeno para responder a situaciones de asfixia autoerótica o los protectores de rodilla.
De hecho, lo mejor es tener disponible una ropa para amar. ¿Usted se viste de una determinada forma para ir a la piscina o para acudir a una entrevista de trabajo, verdad? Hágalo entonces también para tener relaciones sensuales.
Ropa de folleteo. Si se encuentra a una zagala vestida así no la deje escapar, es una prepper.
¿Se ha preguntado alguna vez por qué tanta propaganda del Kamasutra y sus tendiníticas posturas? De mis frecuentes lecturas de El Retorno de los Brujos y el subforo de Conspiraciones he averiguado que a los arcontes ya no les excita ver cómo nos apareamos cocodrileando en el misionero, y que una mamadilla normal ya no les da para paja: después de milenios viéndonos amar han hecho callo. Así que intentan convencernos para que hagamos El Dragón Entra en la Tercera Casa Celestial y demás guarradas.
Aquí Stanley Kubrick intentando advertirnos contra los tríos, promovidos por sociedades secretas y tal. Fíjense que encima del tío del medio tenemos una única luz y a los lados muchas más pequeñas; representan el sol y las estrellas y son un aviso de que el hombre nunca llegó a la Luna.
Las posturas con ella arriba no son nunca recomendables. Desde la Antigüedad los ejércitos vienen buscando la mayor altura para conseguir ventaja sobre el enemigo, no la ceda así como así y piense en lo que haría Aníbal en su situación. Las posturas con el hombre arriba son, en general, recomendables, pero le dan pie a ella para ponerle las manos en la espalda (Aníbal no cedería la retaguardia) y hasta le pueden meter un dedo por... ahí :vomito:
La postura preferida por el positivista sombrío es la del perrito, que además permite girar el cuello y tener una buena visión panorámica del entorno ante posibles peligros que nos pueden coger desprevenidos, como tifones o asesinos saliendo del armario (nunca se está seguro de esto). Pero cuidado, podríamos equivocarnos y realizar una penetración anal, que equivale a muerte.
En definitiva, no hay postura sensual segura. Lo más recomendable no llegar a tocar nunca a nuestra amante, y mantener una distancia mínima de seguridad.
Como podemos apreciar en este dibujo, la distancia íntima va entre los 15 y 45 centímetros de distancia, así que no hay que acercarse más que quince centímetros en el peor de los casos. Qué alivio.