Las dinámicas de todo chiringuito que monta el PCE (y SUMAR lo és) son siempre las mismas.
En cuanto un candidato del PCE empieza a ser conocido y a tener una mínima relevancia electoral, toda la estructura del PCE entra en pánico ante el temor de que ese candidato utilice su popularidad para alterar la jerarquía de poder interna del PCE.
El candidato en cuestión, por su parte, en cuanto empieza a tener algo de popularidad se da cuenta de que su mayor problema es tener que cargar con el lastre del PCE, y empieza a montarse su propia estructura paralela en el chiringuito que en teoría solo debía ser un escaparate electoral (Anguita -> IU, Yolanda -> SUMAR).
El PCE empieza a boicotear a su propio candidato y acaba liquidándolo.
Como siempre ha sido y siempre será, por los siglos de los siglos, Amén.