Alegrarse de la caida de una industria (o quizás deberíamos decir, lo que debería ser una industria) en el momento que vivimos no creo que sea la solución. Creo que lo apropiado sería encontrarle viabilidad, y ahí sí que estoy con todos vosotros (o casi) que el primer paso sería eliminar las subvenciones.
El problema hasta ahora, según mi humilde opinión, ha sido las dos más que extendidas prácticas para hacer cine:
1. En las escuelas de cines y festivales de cortometrajes (escuela por la que suelen pasar los futuros cineastas) se premia demasiado el "buen cine" (en muchas ocasiones también llamado caricias mentales) que poco o nada tiene que ver con el circuito comercial. Acostumbran a ser historias sencillas, dramas, historias de personajes, algunos directamente caricias mentales, etc, etc, etc...
Muchos "cineastas", tipo Albert Serra, tienen declaraciones tan increibles como "El espectador no me importa. No moveré mi criterio artístico". Pero lo dolido es que es una práctica muy extendida y hasta algunos llegan a tratar al público como gente poco culta que no entienden sus "obras de arte".
2. Los productores, hasta ahora, lo tenían demasiado fácil para levantar una película con tan sólo subvenciones. Véase el ejemplo que comenta el forero Vamos P´Alemania Pepe. Es una práctica demasiado extendida, o quizás deberíamos decir normal. Y ahí radica ese poco o nada respeto por el espectador, al fin y al cabo con esas triquiñuelas tenían beneficios jugosos a base de trampas (y de liar a trabajadores, claro, llámese técnicos y personal artístico). Como siempre, el hecho de tener "amigos" funciona para estar en este grupo de productores.
Todo esto ha provocado que se hagan muchas películas pero de dudoso gusto y sin ninguna viabilidad comercial ¿para qué? si ya tienen beneficios ¿por qué se van a preocupar de que al público le guste la película?
Por suerte, aunque esto ha sido bastante generalizado, siempre hay excepciones y ha habido gente que sí se ha preocupado de intentar aproximarse al público (vaya, lo que tendría que ser habitual) pero hasta estos han tenido el estigma de ser "cine español", aunque por suerte, han sido los que han salvado la taquilla los años que han estrenado.
España tendría que fortalecer su industria audiovisual, ya que, aunque muchos no os lo creáis, hay mucho, pero mucho talento aquí, sobre todo en la parte técnica, y ahora hacen faltan directores que estén a la altura (que los hay y muchos, pero por desgracia los dinosaurios apalancados privan de que muchos de esos jóvenes tengan alguna oportunidad).
Para empezar, se tendrían que eliminar TODAS o casi todas las subvenciones y hacer un plan de viabilidad para la industria cinematográfica que pasase íntegramente (o casi) por capital privado, así después se debería rendir cuentas del producto creado con alguien que estuviera interesado en los beneficios que pudiera generar y no con el "valor artístico" que es muy difícil cuantificable. Para conseguir esto se tendrían aplicar desgravaciones fiscales a toda empresa o entidad que colaborase con películas (del tipo como en Estados Unidos, donde creo que es sobre el 20% si no recuerdo mal), y por supuesto, un margen de las ganancias sobre la película serían para los inversores. Así conseguiríamos que una parte muy pero que muy importante del presupuesto se destinase a la promoción de la película y no como ahora, que nadie sabe que existen las pocas películas que se estrenan. En todo caso, las únicas subvenciones que creo podrían estar justificadas, son las ayudas a la promoción y a la distribución, sobre todo cuando estas fueran para la promoción fuera de nuestras fronteras (recordemos que el cine es publicidad, eso es lo que ha hecho grande la industria cinematográfica norteamericana).
Otro tema que doy por supuesto es que los que se dedican al cine se tendrían que quedar completamente al margen de política. Ése es otro de los grandes errores de "nuestra" industria cinematográfica, pero es que en el actual contexto, por desgracia, todo está demasiado unido cine-política! Lo que no sé es si ahora mismo se puede rectificar...
Y lo que es esencial es unificar la producción. De nada sirve crear 174 películas en un año si sólo un 10% se estrenan, y lo peor, son pocas las que tienen posibilidades comerciales (Amenabar, Almodovar, Segura, Fesser, en otro momento lo fue Medem, Aranóa, ahora Arévalo, Cobeaga o simplemente películas potenciales por temática como Spanish movie o fuga de cerebros sin un director conocido detrás). Mejor hacer tan sólo 20 películas, con presupuestos muy abultados y muchas posibilidades de generar beneficios (en Estados Unidos la máxima es que a mayor inversión en una película, mayor será el beneficio) y sobre todo, facilmente exportables por lo que influye mucho la temática de la peli (abstenerse temáticas sociales y guerra civil y coger como referencia un transpoter hecho en Francia!).
De cumplirse todo esto, también ayudaría un poco de proteccionismo hacia el cine Español como ocurre en muchos países (por ejemplo Francia). Y hasta quizás aumentar y mucho los impuestos hacía el cine americano (ya que quisieran el monopolio total en las salas comerciales a base de paquetes de películas y de presionar al gobierno para tener absoluta cuota de pantalla, al menos que España tenga algún beneficio de ello, sería lo justo). Y ya, lo que sería la leche es la creación de un star system que diera de qué hablar (aunque esto sí que ya lo veo bastante utópico).
Pero creo que lo que no nos podemos plantear es simplemente la eliminación de una "industria" porqueyovalguismo. Hay que intentar poner soluciones, ya que no vamos sobrados de industria!
Saludos