"Debemos estar contentos de que se haya parado. Si iba a durar un mes, y ha sido el volcán más efímero de la historia de La Palma, pues es magnífico, porque será bueno para la población", señala a EL MUNDO Manuel Regueiro, presidente del Colegio de Geólogos.
Yo creo que el que se haya parado significa que ya no tiene presión la lava y no va a seguir saliendo, porque no se ven indicios de que tenga fuerza".