El culto a Baphomet en la Masonería.
La masonería fue fundada en 1717 basándose en la anterior sociedad secreta de los rosacruces 1614. A partir de ese momento y para darle mayor importancia se fue creando una "prehistoria" a su fundación. Aunque algunas logias pretenden remontarse a los hijos de Caín, la historia comunmente aceptada es que empezó con el arquitecto del templo de Salomón. Para ello utilizan el personaje Bíblico de Hiran Abif, que es llamado por Salomón para construir las columnas del templo, por ser un afamado platero. La masonería le otorga el título de arquitecto del templo y primer maestro masón. Este personaje es muy importante para la masonería, y protagonista del rito de grado 3 de maestro masón.
Continuando con la historia inventada de la masonería, los caballeros templarios serían también los continuadores de la tradición masónica. Los templarios fueron disueltos por Felipe IV de Francia en 1314, acusados de herejía. Aunque el principal motivo fue político y económico, del que se aprovechó el rey de Francia para quedarse con todas las propiedades de los templarios, hubo un proceso del tribunal de la Santa Inquisición, y se consiguieron algunas confesiones a fuerza de torturas. La principal herejía (seguramente inventada) de la que se culpaba a los templarios era la de adorar algún ídolo pagano que habían traído de tierra santa. Aunque como digo en toda Francia se utilizó la tortura para arrancar alguna confesión sobre el supuesto ídolo y se registraron todas las propiedades de la Orden del Temple, no se encontró ningún supuesto ídolo, de las confesiones no se pudo sacar nada en claro porque de los pocos que declararon haber visto algo, unos hablaban de un gato, otros de una cabrá, una cabeza que hablaba, etc. Sin embargo en una de los procesos inquisitoriales se utilizó la palabra bafometo, para referirse a un ídolo pagano sin especificar.
Baphomet no es un término bíblico, y no se corresponde con ninguno de los diferentes nombres que se utilizan en la biblia para referirse al malo. Es una invención de la masonería.
Los masones aprovecharon esta circunstancia para justificar de alguna manera que los templarios no eran realmente católicos, si no los precursores de la masonería y que de puertas a dentro adoraban a Lucifer en su forma de Baphomet. Para la masonería Lucifer no tiene connotaciones negativas si no todo lo contrario, es más bien un Prometeo, portador de la luz y de la sabiduría, en contraposición a Jesucristo que trae la oscuridad.
Como bien es sabido el principal objetivo de la masonería es la destrucción de la fe cristiana católica, y es muy conveniente adorar la antítesis de Jesucristo, Lucifer en su forma de Baphomet. Sin embargo la masonería en Europa se nutre principalmente de católicos por lo que no es hasta los grados altos en los que se hace de forma clara y evidente. En el grado 29 del rito escoces antiguo y aceptado se pisa la cruz cristiana y se adora la cruz de Baphomet.
La mayoría de las logias masónicas europeas son las denominadas azules, y sólo tienen tres grados, aprendiz, compañero y maestro. En estos grados la adoración a Lucifer se hace de forma muy velada, y se habla más bien del gran arquitecto o Gadu, lo que hace que a priori no sea incompatible con el cristianismo. Hecho que ha provocado a lo largo de la historia diferentes pronunciamientos papales, en los que se ha declarado incompatible la masonería con la fe católica.