Aquí, desde la oficina de una empresa que no ha cerrado (no somos de primera necesidad). Donde se ha denegado el teletrabajo, las excedencias. Supongo que esperando un ERTE.
El caso, aquí risas, todos juntitos, sin abrir ventanas, sin respetar distancias. Que la gente es una exagerada, que más mata la gripe, que nosotros estamos sanos. Que no se puede parar el mundo. Que hay que trabajar.
Luego criticando a los que sacan el perro.
Y qué bien lo hace el gobierno.
Así que aquí estamos, recibiendo al bicho a pecho descubierto.
Ya está, solo por desahogar, que aquí no puedo. Y para que sepais que hay mucha gente remando pensando que la barca es suya.