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Tud Amun
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Pues como comentaba trinity, despues de China, van las industrias europeas, luego los bancos y el sector servicios y turismo. Finalmente los estados en bancarrota, funcicharos sin cobrar, sin pensiones, o reduciendolas mucho mucho, y todo a la vuelta de la esquina, para octubre!Lo del "ano llameante" me ha impactado. Es poético. Le felicito..
La bancarrota será general. En el caso de que las fábricas de coches (y cualquier otra tecnológica) paren temporalmente, no será nada más que la punta del iceberg.
Comeremos cosa todos (si llega). La rueda dejará de girar y eso es malo. Muy malo.
Todas las empresas sufriremos en nuestras carnes el problema. ERES a destajo, no como antaño.
- O bien no será posible fabricar algo o directamente no será necesario hacerlo porque no tendrá salida ya que el resto estará parado.
- Los servicios idem del lienzo.
- El consumo se desplomará por el miedo y la falta de suministro.
- El sector del transporte en todos sus ámbitos, quieto parado.
- El turismo a pique.
- El comercio llegará el momento en que tenga que cerrar por falta de suministros.
....
¿Y cómo se paga esta fiesta, porque vale mucho dinero, eh ?
Y todo esto sin que la gente muera por miles. Solo para evitar contagios.
No sé...yo lo veo tan claro... Me resulta tan palpable que me pasma que la gente ande tan tranquila. Y no...no hablo de los funcionarios.
Marzo 2020
Parecía que la epidemia iba a remitir, que se estaba normalizando la situación laboral en China, y las fábricas comenzarían a producir. Pero repentinamente, la cuarentena se extendió a casi toda China. Todo el inmenso imperio industrial paralizado ante el estupor occidental. A las pocas semanas las fábricas en EEUU y Europa comenzaron a cerrar por falta de algún pequeño detalle que impedía la producción. A los dos meses no solo había parado casi toda la industria occidental, sino que los impagos arrastraron a los bancos y al sistema financiero.En el verano, los estados eran incapaces de pagar a sus funcionarios y a sus pensionistas ya que la fuerza laboral era menos de la mitad.
Acudir a la deuda pública tampoco funcionó. Primero porque el comprador de deuda pública de los últimos años era precisamente China, que astutamente prestaba y prestaba. En octubre, China, no solo no acudió a la subasta de deuda sino que exigió la devolución íntegra del inmenso capital prestado en los últimos años aludiendo a motivos de fuerza mayor. Todo ese dinero dilapidado en infinidad de gastos inútiles, desde chiringuitos de viogen y feminazismo, hasta viajes del inserso. Desde aumentar más y más funcionarias y autonomías hasta atraer pagapensiones de todos los países pobres del mundo. Paguitas y paguitas y más paguitas que ahora había que devolver.
Uno tras otro, los estados europeos fueron declarándose en bancarrota. Entonces China sí que puso el dinero. Y las condiciones draconianas. En una jugada magistral, había puesto de rodillas a todo el mundo, prácticamente sin bajas. Ahora Europa se llamaría EuroChina. EEUU tampoco pudo resistirse. La solución de imprimir varios cuatrillones consiguió la implosión total del dólar y el colapso social madmaxista definitivo. Tuvo que ser rescatado por Rusia en una capitulación vergonzante.
