Antonio Maestre tacha al cinturón obrero de Madrid donde han votado a VOX "Periferia madrileña profunda" y "clase media aspiracional" a sus habitantes

Archimanguina

Será en Octubre
Desde
13 Ene 2007
Mensajes
30.380
Reputación
69.639
Lugar
La sagra norte
La gauche caviar dando discursos de supremacismo moral desde su púlpito insultando a los agricultores y trabajadores que les dan la espalda.
Sólo les quedan los jovencitos idealistas urbanos y los carcamales comunistas de toda la vida.
Reconozco que es divertido verles patalear mientras se hunden.
Error los inmis nacionalizados, letrinos y gente de jovenlandia votan en masa a la psoe. Por eso cuantos más vengan mejor para estos me gusta la fruta.
 

Tae-suk

Doña Inés, a sus pies
Desde
16 Jul 2008
Mensajes
19.526
Reputación
41.911
El fulastre de Maestre debe tener diarrea por la indigestión que le ha causado el resultado electoral de VOX.

El de VOX... y el de PUDIMOS, jajajaja !!
 

BlackPropaganda

Madmaxista
Desde
3 Ago 2013
Mensajes
223
Reputación
360
No votar, no aceptar el sistema de listas y sin separación de poderes es la vía para acabar con estos me gusta la fruta.
 

McLovin

Será en Octubre
Desde
27 Ene 2011
Mensajes
17.511
Reputación
65.677
Lugar
Con tu querida madre, en un castillo
Pero qué puñetero perversos de hez. ¿Qué problema tiene la "clase media aspiracional"? Son precisamente las desigualdades sociales las que hacen avanzar a la sociedad, las que impulsan la economía, los cambios y la tecnología. Si no existiesen diferencias sociales como los comunistas da repelúsntes como el pretenden, la gente no movería un dedo por prosperar, no habría evolución ni avance porque no habría a donde avanzar.

Son precisamente estás diferencias las que hacen a la clase baja moverse, trabajar y esforzarse para tener las mismas comodidades que la clase media y para poder darle a sus hijos más oportunidades en la vida. Clase media aspiracional...¿Y qué? ¿Qué tiene de malo que la gente aspire a mejorar?

puñetero fulastre perversos.
 

Vlad_Empalador

Será en Octubre
Desde
24 Ene 2009
Mensajes
62.476
Reputación
142.837
Lugar
En el bunker
Pero qué puñetero perversos de hez. ¿Qué problema tiene la "clase media aspiracional"? Son precisamente las desigualdades sociales las que hacen avanzar a la sociedad, las que impulsan la economía, los cambios y la tecnología. Si no existiesen diferencias sociales como los comunistas da repelúsntes como el pretenden, la gente no movería un dedo por prosperar, no habría evolución ni avance porque no habría a donde avanzar.

Son precisamente estás diferencias las que hacen a la clase baja moverse, trabajar y esforzarse para tener las mismas comodidades que la clase media y para poder darle a sus hijos más oportunidades en la vida. Clase media aspiracional...¿Y qué? ¿Qué tiene de malo que la gente aspire a mejorar?

puñetero fulastre perversos.

Esta ralea quiere a los curritos en infraempleos o mejor aún, parados, para poder acariciarlos como perritos prometiéndoles pagas a costa de "impuestos a los ricos". Que un señor que por ejemplo empieza de aprendiz de fontanero y llega a tener su propia empresita de 3 ó 4 empleados es algo que repatea a vagos de hez como este Maestre, que no ha trabajado en su fruta vida.
 

Vlad_Empalador

Será en Octubre
Desde
24 Ene 2009
Mensajes
62.476
Reputación
142.837
Lugar
En el bunker
Mira por dónde el propio Maestre decía hace 2 años orgulloso que pertenecía a lo que ahora él mismo define como "clase media aspiracional"




Antonio Maestre
26 junio 2017
Una lectura de 3 minutos
Cuando tenía tres años mi madre me disfrazó de augusto y me llevó a un concurso de disfraces de carnaval. Gané el primer premio y el regalo fue un libro sobre los orígenes del hombre. Mi primer libro. Uno de tapa dura y divulgación científica que me mostraba los australopitecus y que pintarrajeé primero, subrayé después y aún guardo con tremendo cariño. Mi biblioteca de un libro se encontraba en un piso de la periferia de la periferia madrileña que mis padres, obreros sin estudios que se mataron por sacarnos adelante, compraron firmando a mano letra a letra hasta llegar a las 500, y que se encontraba situado en un descampado fuenlabreño.
Pasaron los años, y el barro del barrio permanecía en la puerta del piso. Para poder comer y que las letras firmadas cayeran una a una, mi padre trabajaba 16 horas limpiando cabezas de cerdo y casi no le veíamos. Mientras, mi madre, obrera del hogar, trabajaba esas 16 horas intramuros. Mi siguiente libro fue un atlas, con el que me fotografiaba con el barrio de fondo cada vez que me ponían una Polaroid delante. No me explicaron el esfuerzo y sacrificio que les costaba cada libro de mi biblioteca. Me quejaba, no lo comprendía.
Llegaron los años 90. Aprendí a reprobar mi barrio. La publicidad y la televisión me mostraban que podía tener muchas cosas. Que este sistema me daba la oportunidad de poseer todo lo que quisiera. Mis padres no me lo daban. Seguían trabajando 16 horas diarias y ni siquiera podía tener unas zapatillas diferentes a esas J’Hayber horrendas que no se rompían nunca. Ya no había descampado, el barrio había crecido y ahora era asfalto y acera gris. Quería salir de allí, de ese lugar que alimentaba la anomia y machacaba las ilusiones de toda una clase a la que todavía no sabía que pertenecía. Mi biblioteca había crecido, me compré algún libro más en la cuesta de los libreros gracias al esfuerzo de mis padres. Seguía sin darme cuenta.
Epifanía. Ya tenía edad para trabajar. Mi primer empleo sería de camarero en un bar. Doce horas de jornada después del instituto por 30.000 pesetas. ¡La de cosas que podría hacer con 30.000 pesetas! Iba a jorobar viva a la anomia y podría cumplir con lo que la publicidad me servía en bandeja. Mi madre fue conmigo antes de que firmara el contrato y me sacó de allí sin dejarme hacerlo explicándome con un lenguaje poco académico lo que es la dignidad y la servidumbre. Mi biblioteca había crecido y la mayor lección de clase me la dio, cómo no, mi familia.
Empecé a comprender. Dejé de exigir a mis padres lo que no podían dar. A valorar todo lo que me habían dado con un esfuerzo sobrehumano, esfuerzo obrero. Aquel barrio que odiaba era el que me conformaba. Y comencé a amarlo. Amar el frío, sucio y duro barrio que me había enseñado sin darme cuenta unos valores que, hasta entonces, no había comprendido. Ahora sí era consciente de mi clase. De mi origen.
Entendía las razones por las que no veía a mi padre hasta el domingo, y el motivo por el que mi madre había cocinado patatas con pimentón tantos días seguidos.
Por fin, encontré sentido a la dureza de esas malditas zapatillas. La biblioteca ahora tiene más de mil volúmenes. Libros guardados en otro piso de la periferia de la periferia de Madrid. Abrazada de duros adoquines de acera gris. Asfalto del que aprendí; a amar, y a ser.



Información personal
Antonio Maestre en 2019
Nacimiento18 de junio de 1979 Ver y modificar los datos en Wikidata (40 años)
Getafe (España) Ver y modificar los datos en Wikidata
NacionalidadEspañola Ver y modificar los datos en Wikidata


Nació en Getafe, aunque a los tres años se mudó a Fuenlabrada, ciudad donde se crió y reside. Se graduó en Biblioteconomía y Documentación por la Universidad Complutense de Madrid (UCM). Después, empezó a estudiar la carrera de Historia en la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), pero no terminó los estudios.1