«Soy invencible: el amor no es mi punto débil porque no tengo sitio para desarrollarlo»
Barcelona. Elecciones municipales 2007. Campaña. Entrevista con SuperVivienda. Superhéroe contra la especulación inmobiliaria y por el derecho a la vivienda
Pie de Foto: ANTONIO MORENO
BARCELONA.- Ya ha aparecido en un acto de Jordi Hereu y en otro de Xavier Trias para reclamar soluciones al drama de la vivienda.Y anuncia en esta entrevista, celebrada en lugar secreto, que no piensa parar hasta el día de las elecciones.
Pregunta.- ¿Qué alimenta la fuerza de Supervivienda?
Respuesta.- La fuerza principal, la que Popeye obtenía de las espinacas, a Supervivienda le viene de la energía de la gente que quiere cambiar las cosas. Y ahora está pletórico: en la campaña se está viendo que la gente está muy indignada.
P.- ¿Qué superpoderes tiene?
R.- La capa me sirve para volar, y haciéndolo me he dado cuenta de que existen muchos pisos vacíos. Hay unas 70.000 viviendas vacías en Barcelona, 300.000 en toda Cataluña y más de 3.000.000 en todo el Estado. Eso es un dato del censo del año 2000, y he podido comprobar que se queda corto, porque por ejemplo en 2005 llegamos al récord de 800.000 viviendas construidas, más que en Francia, Reino Unido y Alemania juntas.
P.- ¿Qué haría Supervivienda con todos esos pisos vacíos?
R.- Supervivienda no debe responder a esa pregunta, porque no es un político y tampoco un técnico. Lo que hace es reclamar el derecho a una vivienda digna, y pide a los políticos voluntad para proponer reformas estructurales para solucionar el problema.La vivienda de protección, en los términos en los que se hace, es sólo un parche, es como querer apagar un fuego que se extiende por todo el Estado con unos cuantos cubos de agua. Hay que consolidar un parque de viviendas realmente público.
P.- ¿Qué le parecen las propuestas de la campaña en esta materia?
R.- Una subasta de promesas, un baile de cifras que no es nuevo.Las promesas de vivienda no solucionan el problema, porque no atacan la raíz. Son para mantener a la población apaciguada.
P.- ¿Dónde vive Supervivienda?
R.- Esperaba esa pregunta, pero tengo que decir que Supervivienda somos todos: los que padecen mobbing, la gente mayor que no puede pagar el alquiler, los hipotecados que las pasan canutas, separados, parados...
P.- Pero usted en concreto...
R.- No voy a responder a esa indiscreción, no es importante.
P.- ¿Por qué lleva un 47 en la capa?
R.- Hace referencia al artículo 47 de la Constitución, que dice que todos los españoles tienen derecho a una vivienda digna y que se luchará contra la especulación.
P.- ¿Tiene algún superenemigo?
R.- Hay muchos que quieren acabar conmigo. La clase política, sin distinciones, no está cumpliendo con su deber, están secuestrados por un entramado financiero e inmobiliario y actúan al dictado de grandes grupos. Los políticos son mi principal enemigo, porque nos han llevado donde estamos ahora.
P.- ¿Tiene puntos débiles?
R.- No. Podría ser el amor, pero, aunque aparezca, Supervivienda no tiene sitio para desarrollarlo, ni para hacerlo, lo que le hace totalmente invencible.
P.- ¿Dónde se cambia de traje, si no tiene casa?
R.- Eso un superhéroe nunca lo revela. ¿Cuándo Superman ha respondido a preguntas como ésa?
P.- ¿Le altera alguna sustancia, como a Superman la kryptonita?
R.- Sí, la tochonita, pero no me debilita, sino que me irrita y me da fuerza para seguir con la lucha.
P.- ¿Qué actos elige para hacer sus apariciones?
R.- Otro de mis superpoderes son unos sensores que se activan cuando los políticos hablan de vivienda. Entonces me silban los oídos: si hacen un uso electoralista de la vivienda se me irrita la nariz, me gotea, me pican los ojos y la garganta... Es como una alergia.
P.- Pues le debe estar pasando a menudo durante la campaña.
R.- Sí, estoy bastante dolido, me estoy medicando. Cuando se activan los sensores, localizo el sitio donde se está haciendo electoralismo con la vivienda y aparezco.
P.- ¿Va a seguir apareciendo la semana que viene?
R.- Hombre, con un 3% de comisión todavía me lo pensaría... No, seguro que voy a estar, pero no puedo revelar dónde.
P.- ¿Qué más ha visto en sus vuelos sobre Barcelona?
R.- He visto que hay una campaña, llamada Ai quina gràcia, que convoca para una cacerolada a las 22.00 horas del día 26 en la plaza de Sant Jaume. Y tiene todo mi apoyo.
P.- ¿Tiene alguna preferencia por algún partido político?
R.- No, son todos iguales. Ningún partido tiene voluntad para hacer de la vivienda un derecho equiparable a la sanidad o la educación, y sacarla del mercado.
Barcelona. Elecciones municipales 2007. Campaña. Entrevista con SuperVivienda. Superhéroe contra la especulación inmobiliaria y por el derecho a la vivienda
Pie de Foto: ANTONIO MORENO
BARCELONA.- Ya ha aparecido en un acto de Jordi Hereu y en otro de Xavier Trias para reclamar soluciones al drama de la vivienda.Y anuncia en esta entrevista, celebrada en lugar secreto, que no piensa parar hasta el día de las elecciones.
Pregunta.- ¿Qué alimenta la fuerza de Supervivienda?
Respuesta.- La fuerza principal, la que Popeye obtenía de las espinacas, a Supervivienda le viene de la energía de la gente que quiere cambiar las cosas. Y ahora está pletórico: en la campaña se está viendo que la gente está muy indignada.
P.- ¿Qué superpoderes tiene?
R.- La capa me sirve para volar, y haciéndolo me he dado cuenta de que existen muchos pisos vacíos. Hay unas 70.000 viviendas vacías en Barcelona, 300.000 en toda Cataluña y más de 3.000.000 en todo el Estado. Eso es un dato del censo del año 2000, y he podido comprobar que se queda corto, porque por ejemplo en 2005 llegamos al récord de 800.000 viviendas construidas, más que en Francia, Reino Unido y Alemania juntas.
P.- ¿Qué haría Supervivienda con todos esos pisos vacíos?
R.- Supervivienda no debe responder a esa pregunta, porque no es un político y tampoco un técnico. Lo que hace es reclamar el derecho a una vivienda digna, y pide a los políticos voluntad para proponer reformas estructurales para solucionar el problema.La vivienda de protección, en los términos en los que se hace, es sólo un parche, es como querer apagar un fuego que se extiende por todo el Estado con unos cuantos cubos de agua. Hay que consolidar un parque de viviendas realmente público.
P.- ¿Qué le parecen las propuestas de la campaña en esta materia?
R.- Una subasta de promesas, un baile de cifras que no es nuevo.Las promesas de vivienda no solucionan el problema, porque no atacan la raíz. Son para mantener a la población apaciguada.
P.- ¿Dónde vive Supervivienda?
R.- Esperaba esa pregunta, pero tengo que decir que Supervivienda somos todos: los que padecen mobbing, la gente mayor que no puede pagar el alquiler, los hipotecados que las pasan canutas, separados, parados...
P.- Pero usted en concreto...
R.- No voy a responder a esa indiscreción, no es importante.
P.- ¿Por qué lleva un 47 en la capa?
R.- Hace referencia al artículo 47 de la Constitución, que dice que todos los españoles tienen derecho a una vivienda digna y que se luchará contra la especulación.
P.- ¿Tiene algún superenemigo?
R.- Hay muchos que quieren acabar conmigo. La clase política, sin distinciones, no está cumpliendo con su deber, están secuestrados por un entramado financiero e inmobiliario y actúan al dictado de grandes grupos. Los políticos son mi principal enemigo, porque nos han llevado donde estamos ahora.
P.- ¿Tiene puntos débiles?
R.- No. Podría ser el amor, pero, aunque aparezca, Supervivienda no tiene sitio para desarrollarlo, ni para hacerlo, lo que le hace totalmente invencible.
P.- ¿Dónde se cambia de traje, si no tiene casa?
R.- Eso un superhéroe nunca lo revela. ¿Cuándo Superman ha respondido a preguntas como ésa?
P.- ¿Le altera alguna sustancia, como a Superman la kryptonita?
R.- Sí, la tochonita, pero no me debilita, sino que me irrita y me da fuerza para seguir con la lucha.
P.- ¿Qué actos elige para hacer sus apariciones?
R.- Otro de mis superpoderes son unos sensores que se activan cuando los políticos hablan de vivienda. Entonces me silban los oídos: si hacen un uso electoralista de la vivienda se me irrita la nariz, me gotea, me pican los ojos y la garganta... Es como una alergia.
P.- Pues le debe estar pasando a menudo durante la campaña.
R.- Sí, estoy bastante dolido, me estoy medicando. Cuando se activan los sensores, localizo el sitio donde se está haciendo electoralismo con la vivienda y aparezco.
P.- ¿Va a seguir apareciendo la semana que viene?
R.- Hombre, con un 3% de comisión todavía me lo pensaría... No, seguro que voy a estar, pero no puedo revelar dónde.
P.- ¿Qué más ha visto en sus vuelos sobre Barcelona?
R.- He visto que hay una campaña, llamada Ai quina gràcia, que convoca para una cacerolada a las 22.00 horas del día 26 en la plaza de Sant Jaume. Y tiene todo mi apoyo.
P.- ¿Tiene alguna preferencia por algún partido político?
R.- No, son todos iguales. Ningún partido tiene voluntad para hacer de la vivienda un derecho equiparable a la sanidad o la educación, y sacarla del mercado.
