Kaprak63
Madmaxista
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más difícil que la burbuja haya pinchado.
Quiero hablar un poco de una conversación que mantuve con mi cuñado este fin de semana. Para más señas comento que es supervisor de una red de oficinas de una caja de ahorros que opera en Castilla León, Madrid y Castilla la Mancha. No digo el nombre de la Caja por motivos de confidencialidad.
Bien, a lo que iba. La sección de análisis de riesgo de la Caja, tira para atrás todo lo que sea compra de solares, por parte promotores, desde hace más de un año y medio. Eso de comprar solares a crédito, se acabó, al menos para esta Caja, y si se me permite la extrapolación, si esto es así en esta entidad he de suponer que lo que ocurre en entidades de mayor envergadura puede ser peor.
El precio del suelo, aunque parezca increíble está bajando en algunas zonas. No tuve la precaución de preguntar dónde. Tuve que insistirle un par de veces para que me lo creyera, pero parece ser que sí.
Por lo visto más de un director de oficina se ha pillado los dedos con la concesión de créditos. El ansia por cumplir objetivos y el hecho de haber algún que otro empleado de profesionalidad dudosa, como en todos lados, está teniendo sus consecuencias en algunas oficinas.
Muchos de estos directores no contemplaban un escenario con este euribor, y subiendo, ni en el peor de los escenarios. O una de dos, o se es insensato, o se es muy optimista, sobre todo con el dinero ajeno porque en una media de 50 años, lo normal es que repuntasen al menos al 5%, al menos eso es lo que dicen los analistas de riesgo de la Caja.
Una de las justificaciones que me daba mi cuñado para explicar estos excesos irracionales es que según él, ha habido un efecto contagio por parte de algunas entidades a la hora de captar clientes en una competencia atroz. Lo importante era seducir al cliente a cualquier precio, como por ejemplo el precio de la jovenlandesesidad.
Hablando de jovenlandesesidad, parece ser que está subiendo. El problema es que lo está haciendo muy rápidamente, demasiado. La concesión de créditos se mira con lupa, sobre todo las garantías, los avales y el montante del capital financiado.
Una de las cosas más sorprendentes que me ha dicho es que saben que el cliente estándar de hipotecas de algunas zonas, casi ni sabía lo que era el euribor. Pero ahora viene lo bueno. Muchos de estos berzas creen que no pagando, el banco se queda con el piso y no pasa nada más. No hay quien les meta en la cabeza que puede que el activo baje más de la cuenta, que el banco se quede con el piso y que todavía deban una pasta gansa. Oír para creer, (es lo que pasa en un país de ciudadanos preocupados por su formación).
En palabras de mi cuñado, que dicho sea de paso es un optimista la cosa se está poniendo mu malita (que me lo haya dicho él me ha acojonao). Si pega un repunte el paro, según su criterio, se puede vivir una crisis de las que no se olvidan en años.
Una amiga de él, de esas chachi piruli, supermegaguai y megapija trabaja para la promotora de su padre en un pueblo de la costa del sol. Hace 4 años se metieron en una operación de 74 viviendas y las vendieron como churros. Dado el éxito se metieron en una segunda promoción que están tratando de entregar ahora. De momento llevan el 30% y están haciendo de todo para quitarse el muerto de encima.
El plazo de compra hace 6 meses era de tres meses para la compra. Eso fue antes del efecto Astroc. Mi cuñado piensa que se han pillado los dedos y que, como mucho el negocio será lo comido por lo servido.
Seguiremos informando.
Quiero hablar un poco de una conversación que mantuve con mi cuñado este fin de semana. Para más señas comento que es supervisor de una red de oficinas de una caja de ahorros que opera en Castilla León, Madrid y Castilla la Mancha. No digo el nombre de la Caja por motivos de confidencialidad.
Bien, a lo que iba. La sección de análisis de riesgo de la Caja, tira para atrás todo lo que sea compra de solares, por parte promotores, desde hace más de un año y medio. Eso de comprar solares a crédito, se acabó, al menos para esta Caja, y si se me permite la extrapolación, si esto es así en esta entidad he de suponer que lo que ocurre en entidades de mayor envergadura puede ser peor.
El precio del suelo, aunque parezca increíble está bajando en algunas zonas. No tuve la precaución de preguntar dónde. Tuve que insistirle un par de veces para que me lo creyera, pero parece ser que sí.
Por lo visto más de un director de oficina se ha pillado los dedos con la concesión de créditos. El ansia por cumplir objetivos y el hecho de haber algún que otro empleado de profesionalidad dudosa, como en todos lados, está teniendo sus consecuencias en algunas oficinas.
Muchos de estos directores no contemplaban un escenario con este euribor, y subiendo, ni en el peor de los escenarios. O una de dos, o se es insensato, o se es muy optimista, sobre todo con el dinero ajeno porque en una media de 50 años, lo normal es que repuntasen al menos al 5%, al menos eso es lo que dicen los analistas de riesgo de la Caja.
Una de las justificaciones que me daba mi cuñado para explicar estos excesos irracionales es que según él, ha habido un efecto contagio por parte de algunas entidades a la hora de captar clientes en una competencia atroz. Lo importante era seducir al cliente a cualquier precio, como por ejemplo el precio de la jovenlandesesidad.
Hablando de jovenlandesesidad, parece ser que está subiendo. El problema es que lo está haciendo muy rápidamente, demasiado. La concesión de créditos se mira con lupa, sobre todo las garantías, los avales y el montante del capital financiado.
Una de las cosas más sorprendentes que me ha dicho es que saben que el cliente estándar de hipotecas de algunas zonas, casi ni sabía lo que era el euribor. Pero ahora viene lo bueno. Muchos de estos berzas creen que no pagando, el banco se queda con el piso y no pasa nada más. No hay quien les meta en la cabeza que puede que el activo baje más de la cuenta, que el banco se quede con el piso y que todavía deban una pasta gansa. Oír para creer, (es lo que pasa en un país de ciudadanos preocupados por su formación).
En palabras de mi cuñado, que dicho sea de paso es un optimista la cosa se está poniendo mu malita (que me lo haya dicho él me ha acojonao). Si pega un repunte el paro, según su criterio, se puede vivir una crisis de las que no se olvidan en años.
Una amiga de él, de esas chachi piruli, supermegaguai y megapija trabaja para la promotora de su padre en un pueblo de la costa del sol. Hace 4 años se metieron en una operación de 74 viviendas y las vendieron como churros. Dado el éxito se metieron en una segunda promoción que están tratando de entregar ahora. De momento llevan el 30% y están haciendo de todo para quitarse el muerto de encima.
El plazo de compra hace 6 meses era de tres meses para la compra. Eso fue antes del efecto Astroc. Mi cuñado piensa que se han pillado los dedos y que, como mucho el negocio será lo comido por lo servido.
Seguiremos informando.
