Ferdinand Bardamou
Madmaxista
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- 15 Nov 2006
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buenas, me presento.
Desde principios año que os descubrí y reconozco que no puedo empezar el dia sin dar una ojeada por el foro. Soy burbujista desde hace años, creo que no es normal lo empufada que va la gente y las barbaridades que se estan pagando por una hez de pisos que hace 5 años valían la mitad.
Comentar que soy responsable de una refinanciera y creo que desde el foro se tiene una mirada obtusa y parcial de lo que es el sector. El trabajo es duro y desagradecido, en tanto te pasas la mayor parte del día escuchando penas pero esta compensado cuando consigues salvar el trastero a algún pepito y este queda de nuevo feliz y agradecido con su refinanciado zulo. En definitiva el negocio es tan honrado o no cómo cualquier otro... sin ser una ONG.
El asunto es que en menos de un año he visto aflorar a mi lado competencia. Hasta el punto que en una pequeña capital de provincia hemos pasado, en menos de un año, de 4 a 17.
Decíros que tradicionalmente este negocio era destino de gente de banca y de antiguos usureros que querían darle un poco mas de imagen a su negocio. El caso es que en el último año y gracias a la aparición de franquiciadoras se ha metido en este sector pepitos que ni tienen conocimientos ni idea ni contactos ni nada.
Veo que muchos de ellos se han metido en ello sin tener en cuenta los costes de mantenimiento, entre los que hay alquileres bestiales, gastos en publicidad, etc sin menospreciar los conocidos royaltis. Atándose a los que realmente sí hacen pasta que son las franquiciadoras que a base de power points y previsiones de facturación totalmente irreales se encadenan por cinco años a una maquinaria que en el mejor de los casos sólo les dará para mantenerse y sobrevivir.
En la mayoría de los casos las fabulosas comisiones quedan menguadas para cuadrar o el porcentage de tasación o la tasa de esfuerzo.
Resumiendo, detrás de los centros de intermediación bancaria por regla general hay un pepito al que le han vendido la moto de mala manera.
Tengo colegas que darían lo que fuese para colocar o traspasar el negocio.
Si los bancos cierran el grifo lo cierran para todos.
Y para acabar y a corte de curiosidad desde hace unos meses que no paro de recibir visitas de clientes que han comprado en los últimos meses... y a los que, amablemente, les tengo que dar un calendario, un golpecito en la espalda y decirles que quizás de aquí un añito puedan refinanciar (no lo creo pero bueno...)
Desde principios año que os descubrí y reconozco que no puedo empezar el dia sin dar una ojeada por el foro. Soy burbujista desde hace años, creo que no es normal lo empufada que va la gente y las barbaridades que se estan pagando por una hez de pisos que hace 5 años valían la mitad.
Comentar que soy responsable de una refinanciera y creo que desde el foro se tiene una mirada obtusa y parcial de lo que es el sector. El trabajo es duro y desagradecido, en tanto te pasas la mayor parte del día escuchando penas pero esta compensado cuando consigues salvar el trastero a algún pepito y este queda de nuevo feliz y agradecido con su refinanciado zulo. En definitiva el negocio es tan honrado o no cómo cualquier otro... sin ser una ONG.
El asunto es que en menos de un año he visto aflorar a mi lado competencia. Hasta el punto que en una pequeña capital de provincia hemos pasado, en menos de un año, de 4 a 17.
Decíros que tradicionalmente este negocio era destino de gente de banca y de antiguos usureros que querían darle un poco mas de imagen a su negocio. El caso es que en el último año y gracias a la aparición de franquiciadoras se ha metido en este sector pepitos que ni tienen conocimientos ni idea ni contactos ni nada.
Veo que muchos de ellos se han metido en ello sin tener en cuenta los costes de mantenimiento, entre los que hay alquileres bestiales, gastos en publicidad, etc sin menospreciar los conocidos royaltis. Atándose a los que realmente sí hacen pasta que son las franquiciadoras que a base de power points y previsiones de facturación totalmente irreales se encadenan por cinco años a una maquinaria que en el mejor de los casos sólo les dará para mantenerse y sobrevivir.
En la mayoría de los casos las fabulosas comisiones quedan menguadas para cuadrar o el porcentage de tasación o la tasa de esfuerzo.
Resumiendo, detrás de los centros de intermediación bancaria por regla general hay un pepito al que le han vendido la moto de mala manera.
Tengo colegas que darían lo que fuese para colocar o traspasar el negocio.
Si los bancos cierran el grifo lo cierran para todos.
Y para acabar y a corte de curiosidad desde hace unos meses que no paro de recibir visitas de clientes que han comprado en los últimos meses... y a los que, amablemente, les tengo que dar un calendario, un golpecito en la espalda y decirles que quizás de aquí un añito puedan refinanciar (no lo creo pero bueno...)