Los alcaldes crean un Estado policial para saquear a los ciudadanos

asqueado

Madmaxista
Desde
7 Abr 2009
Mensajes
5.526
Reputación
18.121
LA PRIORIDAD: HACER CAJA
Los alcaldes crean un Estado policial para saquear a los ciudadanos


Los responsables municipales han encontrado nuevas vías para vaciar los bolsillos de los ciudadanos con el objeto de tapar las vergüenzas financieras de los municipios y, de paso, crear un acoso policial basado en el miedo. Los vecinos participarán en la vigilancia.

La crisis inmobiliaria ha situado a muchos municipios españoles al borde de la bancarrota. Lejos quedan los tiempos en los que las recalificaciones de suelo y las licitaciones de obras públicas aportaban jugosos beneficios a las arcas consistoriales y, debido a la falta de previsión de los alcaldes, la caja esta vacía. Si a esto se suma el retraso de la nueva financiación municipal, la mezcla que se produce es explosiva.


Ante esta situación los ayuntamientos han decidido escoger la vía fácil: multar a los ciudadanos por casi cualquier cosa, justificando las sanciones a través de una ordenanza que ha mandado la Federación Española de Municipios y Provincias a los consistorios para dar cobertura legal a todo el proceso. La Policía ya no deberá solo perseguir a los criminales de toda la vida, a los ladrones, agresores, asesinos, violadores y demás calaña. Ahora cualquier ciudadano estará en la mira de las fuerzas de seguridad municipales.

Pero vayamos a lo concreto. Si usted es de aquellos que cuando llega la Navidad coge musgo de un parque cercano para montar un belén, ya puede despedirse de esta actividad. Con la nueva ordenanza será multado hasta con 1.500 euros por esta peligrosa acción. Y esto es tan sólo un ejemplo, según el documento de la FEMP al que ha accedido el diario Expansión y que ha sido publicado por Estela S. Mazo.

La lista es interminable. Las sanciones se producirán si usted decide poner macetas en sus ventanas, si tiende la ropa en su balcón a la vista de la Policía, si lava su coche en la calle, si escupe sobre la vía pública, si tira un papel fuera de la papelera, si riega las plantas fuera del horario establecido por el consistorio en el que viva, o si llama a su hijo para que suba a comer... en definitiva, actitudes que antes se solucionaban con amonestaciones verbales ahora son delitos.

Y los nuevos delitos no se ciñen sólo a acciones que puedan suponer un perjuicio para el medioambiente, la conservación de la vía pública o la contaminación visual y acústica. También se pone coto a las reuniones de personas, siempre que el Policía asignado considere que es “demasiado numerosa”. También llama la atención la persecución de los ciudadanos que emitan malos olores o que tengan demasiado polvo en sus casas, dejando que salga al exterior.

Estas actividades sólo las podrán realizar los poderes públicos, como lo demuestran la cantidad de obras que se están realizando en toda la geografía española que no permiten dormir a los ciudadanos, que les llenan las casas de suciedad y que están terminando de hundir a los pequeños comercios. Como siempre, el sector público tiene el monopolio de actividades que, si las cometen los particulares, son delitos con sus correspondientes multas.

La mayor sorpresa viene cuando se acude a las últimas páginas de la ordenanza y se descubre que los propios vecinos deberán informar de las autoridades de las actividades que puedan ser constitutivas de delito en esta nueva sociedad del miedo. Si un vecino llama varias veces al telefonillo por la noche podrá ser denunciado, del mismo modo que si un vagabundo busca en la basura algo de comer estará cometiendo una infracción perseguible por las autoridades. Todo está listo para crear una sociedad de espías como en los tiempos de la Alemania nancy o de los regímenes comunistas.

Ejemplos de sanciones

3.000 euros por abandonar vehículos en la vía pública, colocar macetas u otros objetos en ventanas o no cumplir las restricciones de riego y llenado de piscinas.

1.500 euros por escupir en la calle, usar petardos o tirar basura fuera del contenedor adecuado.

750 euros por colocar publicidad sobre la parte exterior de los cristales de los vehículos o por bañarse en la playa cuando haya bandera roja.

500 euros por comprar alimentos o bebidas en puestos ambulantes no autorizados, lo que se hace extensible a cualquier otro tipo de servicio, como los videntes, dibujantes o tatuadores que, con la llegada de la primavera, montan casetas en los parques.

Las arcas están vacías: municipios en bancarrota

Ocho de las 52 capitales de provincia españolas superaron en 2009 el listón de los 1.000 euros de deuda por habitante. El endeudamiento de las entidades locales alcanzó el año pasado un nuevo récord de 34.595 millones de euros, de los que 28.770 corresponden a los ayuntamientos y 5.825 a las diputaciones, consejos y cabildos insulares, según el Ministerio de Economía y Hacienda.

Por encima de todos los entes locales sobresale, de nuevo, el Ayuntamiento de Madrid, que suma casi tanta deuda como todas las demás capitales de provincia juntas. Los 6.777 millones que adeuda Madrid suponen casi la cuarta parte de la deuda de los más de 8.000 municipios que hay en España.
Los alcaldes crean un Estado policial para saquear a los ciudadanos - Libertad Digital
 

willbeend

Madmaxista
Desde
10 Jun 2009
Mensajes
15.216
Reputación
23.212
Lugar
Negociudad
Multados con 375 euros por comer pipas y tirar las cáscaras al suelo

Una decena de jóvenes de Bonavista despertaron hace unos días con una carta certificada, procedente del Ayuntamiento de Tarragona, en la que se les alertaba que deberán pagar una multa de 375 euros (cada uno) por vulnerar el artículo 122.1.b de la Ordenanza General de Convivencia Ciudadana y Uso de los Espacios Públicos de Tarragona. En la denuncia efectuada por los agentes de la Guàrdia Urbana el pasado 26 de noviembre, a las ocho y media de la tarde, en la plaza de la Constitución se describen los hechos de los que se les acusa: «El reseñado se encuentra escupiendo y comiendo pipas arrojando al suelo cáscaras ensuciando la vía pública».

Algunos de estos jóvenes, de entre 21 y 28 años, denunciaron ayer al Diari que «la multa nos parece totalmente desproporcionada». Lo que quizá desconozcan es que este tipo de sanciones, calificadas como leves, pueden ascender a los 750 euros.

Los hechos sucedieron el pasado 26 de noviembre alrededor de las ocho de la tarde, cuando una veintena de agentes de la Guàrdia Urbana realizaba una redada en la zona. «Nos cachearon delante de todo el barrio, había al menos cien personas, y nos hicieron quedar como delincuentes, cuando ni siquiera estábamos comiendo pipas», explicó Francisco Marín.
«¿Cómo vamos a pagar 375 euros si estamos todos en paro y sólo recibimos una ayuda de 420? ¿Qué quieren, que robemos?», espetó Francisco Gavilán.

Los chicos explicaron que se sienten «perseguidos» por las autoridades. «Me han llegado a pedir la documentación cuatro días seguidos», aseguró Carlos Arroyo, quien, a pesar de «entender» el trabajo de los agentes, considera «intolerable que te puedan clavar 375 euros por tirar cáscaras al suelo». «Voy a ponerme en la Rambla de Bonavista con una videocámara para ver cuánta gente tira las cáscaras al suelo y cuánta es multada», sentenció Gavilán
 

Maradono

Madmaxista
Desde
16 Jun 2006
Mensajes
5.249
Reputación
6.190
Habrá que mirar a los lados para que no me vea nadie cuando escupo. Ojo que siempre procuro escupir en descampados, la tierra de los arboles o alcantarillas, no voy dejando flemones en mitad de la acera.