Oraciones y devociones católicas

Oh Dios, no permanezcas en silencio;
No calles, oh Dios, ni te quedes quieto.
2 Porque Tus enemigos rugen,
Y los que te aborrecen se han enaltecido.
3 Hacen planes astutos contra Tu pueblo,
Y juntos conspiran contra Tus protegidos.
4 Han dicho: «Vengan, y destruyámoslos como nación,
Para que ya no haya memoria del nombre de Israel».
5 Porque de corazón han conspirado a una;
Hacen pacto contra Ti:
6 Las tiendas de Edom y de los ismaelitas,
Moab y los agarenos,
7 Gebal, Amón y Amalec,
Filistea con los habitantes de Tiro;
8 Asiria también se ha unido a ellos;
Se han convertido en ayuda para los hijos de Lot. (Selah)
9 Trátalos como a Madián,
Como a Sísara, como a Jabín en el torrente Cisón,
10 Que fueron destruidos en Endor,
Que quedaron como estiércol para la tierra.
11 Pon a sus nobles como a Oreb y Zeeb,
Y a todos sus príncipes como a Zeba y Zalmuna,
12 Que dijeron: «Apoderémonos
De los prados de Dios».
13 Oh Dios mío, ponlos como polvo en remolino;
Como paja ante el viento.
14 Como fuego que consume el bosque,
Y como llama que incendia las montañas,
15 Así persíguelos con Tu tempestad,
Y aterrorízalos con Tu torbellino.
16 Cubre sus rostros de vergüenza,
Para que busquen Tu nombre, oh Señor.
17 Sean avergonzados y turbados para siempre;
Sean humillados y perezcan,
18 Para que sepan que solo Tú, que te llamas el Señor,
Eres el Altísimo sobre toda la tierra.
 
El poder sanador de las oraciones del Padre Pío:




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Aquí exploraremos cómo Dios está obrando en la Franja de Gaza, llamando a los fiel a la religión del amores a la conversión y revelándose a ellos de maneras extraordinarias.

 
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