¡¡ LA VIRGINIDAD!!

warlok

Himbersor
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Hola amijos:

hoy os propongo un tema que ha propiciado desde asesinatos y venganzas familiares, hasta que la cirugía se reinvente para reconstruir esa telita que separa lo externo de lo interno, el shishi que interesa de ese otro que , aun siendo importante, interesa menos.

¡La virginidad! causante de debates , de tabúes, de morbo.
¿No os preguntáis el Por qué de la virginidad? cuanta mentira , cuantos ríos de tinta se ha derramado en torno a ella. Con cuanto mimo algunas la han guardado (y la guardan) y otras por contra, la han "perdido" en alguna cloaca de barrio o con el dedo de algún primo , o como una de mis novias a la cual desvirgué en la parte trasera de mi Ford focus (ah que tiempos) Esta fue la última doncella a la que desfloré​

La primera , siendo muy jóvenes ambos , mis padres de vacaciones y toda la casa para mi (nosotros) recuerdo como le olía el chichi a fresita de nena joven ,y ese tenue y acre olorcillo de feromonas que nos embrutece a todos (a los trisómicos como yo más que somos más calentitos que el resto de los mortales) olor a fruta fresca , a rocio mañanero y, como no, a shishi , a shishi rico. Desflorada quedó y henchida de mi

La otra fué mi segunda novia (creo que con el dedo)

pero, ¿Qué tienen todas en común? pues que yo NUNCA, en NINGUNA DE LAS TRES, noté la mas mínima resistencia y puedo afirmar y afirmo que eran núbiles vírgenes.

amijos! contad, !contad¡ vuestras experiencias...

¿ A CUANTAS LE HABEIS PARTIDO EL VIRGO?
¿LO NOTASTEIS?
¿LE DOLIÓ?


 
Última edición:
EN Muchos pueblos de La Sagra hay la costumbre (la sipotah o el desfloro) que aunque nunca se perdió, estuvo algo en desuso y ahora está muy de moda de que sean las madres, las otras madres, las que enseñan a los hijos de otras.



En mi caso fue la vecina de enfrente la que me enseñó, yo tendría 13 años y ella rondando la treintena, tenia un hijo de 11 una hija de 6 y estaba preña de pocos meses, asi que no había riesgo de nada ni futuras sospechas, y allí estuve yo metiendo la colita y masajeando galletas maría con leche de preñada.



Es algo normal en La Sagra que una progenitora le pida a una compañera, amiga o vecina, que enseñe a su hijo a amar, o que sea estas últimas las que se ofrezcan.
 
Sobre la virginidad de las hembras descansa la honra de una familia. Violar un schoscho es como cagarse en la estirpe del clan. Además que antes el mayor tesoro de una familia de vasallos era la flor de la hija, que se podía cambiar por unas cabras y demás bienes.
 
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