Para entrar a las tías parece que hay que tener un máster en psicología, porque al menos aquí en España, ellas nunca van de frente, a menos que sea un alfa, claro..., pero parece que todo funciona por señales de humo, comunicación telepática, o a saber...
En el gimnasio hay una chica con la que coincido bastante, y le quiero entrar, pero es que nunca, nunca me da una puñetera señal para que le entre, y no sé si es casualidad, o sí de verdad ella intuye algo y me está evitando, y creo que es más bien esto último. Pues al coincidir en la salida el último día, intenté saludarla sutilmente, a ver si daba pie a algo, y va y se pone a chatear con el móvil, pues obviamente no le dije nada.