ECONOMÍA
La inflación se bate en retirada: el IPC se situará por debajo del 2% en el próximo trimestre@Carlos Sánchez
Martes, 13 de marzo de 2007
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El ministro de Economía, Pedro Solbes.
La inflación se bate en retirada. Al menos, eso es lo que dejan entrever los indicadores adelantados que sirven para estimar la futura evolución de los precios, y que sitúan el IPC para los próximos meses por debajo, incluso, del 2%. De confirmarse esta tendencia, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) volvería a situarse en víveles cercanos al 1,3% de mayo de 1997, que marca la tasa interanual de inflación más baja de la reciente historia económica española.
Las estimaciones tan favorables sobre la futura evolución del IPC están avaladas por datos como los que ayer publicó el Instituto Nacional de Estadística (INE), que indican que los precios de las importaciones aumentaron un 0,7% en enero respecto al mismo mes del año anterior. Se trata, con diferencia, de la tasa más baja de los últimos años, y contrasta con la registrada hace tan sólo un año, cuando el Índice de Precios de Importación llegó al 7,3% empujado, fundamentalmente, por el alza del crudo.
El hecho de que el precio de las importaciones haya caído en picado en los últimos es extraordinariamente relevante para una economía tan dependiente del exterior como es la española, que acumula el déficit comercial más importante del mundo en términos relativos entre los países más industrializados.
Un déficit que tiene mucho que ver con la escasa capacidad de competir que tienen los productos españoles como consecuencia, precisamente, de la elevada inflación interior (debida en buena medida al diferencial de crecimiento). Y es que, según los datos que publicó ayer el INE, los precios de las exportaciones crecen a un ritmo del 2,2% en términos anuales, es decir algo más que el triple que lo que aumentan los precios de los bienes y servicios que compra España del exterior.
España exporta inflación e importa deflación
Quiere decir esto que España exporta inflación -lo que es letal para los exportadores- y, por el contrario, importa deflación, lo que sin duda beneficia a quien quiera ampliar su cuota de mercado en España (con el consiguiente perjuicio para los productores nacionales). En el último año, mientras los precios de las importaciones han caído del 7,3% al 0,7% citados, los precios de las exportaciones únicamente se han reducido del 4,6% al 2,2%.
La tendencia descendente de la inflación está avalada, además, por la evolución de los precios industriales -indicador adelantado del IPC, ya que los comerciantes trasladan el alza de precios a sus clientes-, que han pasado de crecer un 6,3% hace un año al 2,7% actual.
Estos antecedentes son los que explican las revisiones a la baja que están haciendo estos días los distintos servicios de estudios sobre la futura evolución de los precios.
Funcas, por ejemplo, ha estimado que en julio de este año la tasa anguila del IPC se va a situar en el 1,6%, con descensos continuados hasta ese mes. A partir del verano, y como consecuencia de que en la segunda parte del año pasado comenzó a notarse la caída de los precios del petróleo, el servicio de estudios de las cajas de ahorros observa una suave evolución al alza que llevará a situar el IPC en diciembre en el 2,7%. En media anual, lo que es más representativo, el IPC se situará en el 2,1%, muy lejos del 3,5% con que se cerró el año pasado.
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Ya estaaaa aquiiiii, ya ha llagadoooo...
La inflación se bate en retirada: el IPC se situará por debajo del 2% en el próximo trimestre@Carlos Sánchez
Martes, 13 de marzo de 2007
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El ministro de Economía, Pedro Solbes.
La inflación se bate en retirada. Al menos, eso es lo que dejan entrever los indicadores adelantados que sirven para estimar la futura evolución de los precios, y que sitúan el IPC para los próximos meses por debajo, incluso, del 2%. De confirmarse esta tendencia, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) volvería a situarse en víveles cercanos al 1,3% de mayo de 1997, que marca la tasa interanual de inflación más baja de la reciente historia económica española.
Las estimaciones tan favorables sobre la futura evolución del IPC están avaladas por datos como los que ayer publicó el Instituto Nacional de Estadística (INE), que indican que los precios de las importaciones aumentaron un 0,7% en enero respecto al mismo mes del año anterior. Se trata, con diferencia, de la tasa más baja de los últimos años, y contrasta con la registrada hace tan sólo un año, cuando el Índice de Precios de Importación llegó al 7,3% empujado, fundamentalmente, por el alza del crudo.
El hecho de que el precio de las importaciones haya caído en picado en los últimos es extraordinariamente relevante para una economía tan dependiente del exterior como es la española, que acumula el déficit comercial más importante del mundo en términos relativos entre los países más industrializados.
Un déficit que tiene mucho que ver con la escasa capacidad de competir que tienen los productos españoles como consecuencia, precisamente, de la elevada inflación interior (debida en buena medida al diferencial de crecimiento). Y es que, según los datos que publicó ayer el INE, los precios de las exportaciones crecen a un ritmo del 2,2% en términos anuales, es decir algo más que el triple que lo que aumentan los precios de los bienes y servicios que compra España del exterior.
España exporta inflación e importa deflación
Quiere decir esto que España exporta inflación -lo que es letal para los exportadores- y, por el contrario, importa deflación, lo que sin duda beneficia a quien quiera ampliar su cuota de mercado en España (con el consiguiente perjuicio para los productores nacionales). En el último año, mientras los precios de las importaciones han caído del 7,3% al 0,7% citados, los precios de las exportaciones únicamente se han reducido del 4,6% al 2,2%.
La tendencia descendente de la inflación está avalada, además, por la evolución de los precios industriales -indicador adelantado del IPC, ya que los comerciantes trasladan el alza de precios a sus clientes-, que han pasado de crecer un 6,3% hace un año al 2,7% actual.
Estos antecedentes son los que explican las revisiones a la baja que están haciendo estos días los distintos servicios de estudios sobre la futura evolución de los precios.
Funcas, por ejemplo, ha estimado que en julio de este año la tasa anguila del IPC se va a situar en el 1,6%, con descensos continuados hasta ese mes. A partir del verano, y como consecuencia de que en la segunda parte del año pasado comenzó a notarse la caída de los precios del petróleo, el servicio de estudios de las cajas de ahorros observa una suave evolución al alza que llevará a situar el IPC en diciembre en el 2,7%. En media anual, lo que es más representativo, el IPC se situará en el 2,1%, muy lejos del 3,5% con que se cerró el año pasado.
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Ya estaaaa aquiiiii, ya ha llagadoooo...
