De la Coca-Cola pasamos al anuncio de Loterías

LoQueNoCuentan

Será en Octubre
Desde
15 Abr 2012
Mensajes
31.914
Reputación
28.229
[YOUTUBE]q-0Mu2TJD88[/YOUTUBE]

El totalitarismo económico hace que el pensamiento "orwelliano" de que la libertad es la esclavitud sea cierto, mientras todos trabajan a la sociedad del nada gratis, si no puede pagarlo se le expropia todo lo que tiene ya sea el estado o los bancos, avanzando a pasos agigantados a una sociedad donde un grupo privilegiados de individuos elitistas hayan realizado a través de la deuda a estados el mayor robo de toda la historia. La sociedad no ve ningún robo en que una tribu tenga que pagar por su agua si se le facilita el acceso una multinacional o si paga por alimentos que antes hacía en la tierra o la agricultura, bajo el manto del progreso se esconde la destrucción del resto de las virtudes humanas, maldita sea la mercenaria tecnología. Al fin de al cabo, el robo es el sistema.

Prefiero ser espiritual y tener lo necesario a ser rico y querer controlar al resto.
 
¿La libertad es el premio?

Me ha recordado a la película de la isla. Mieditor.
 
Pues yo prefiero tener los 100 millones del bote del Euromillones de éste viernes en mi cuenta corriente. Ya va siendo hora de forrarme.
 
Una historia sobre la importancia de disfrutar la vida antes que el ganar mucho dinero


El rico industrial del Norte se horrorizó cuando vio a un pescador del Sur tranquilamente recostado contra su barca y fumando una pipa.

"¿Por qué no has salido a pescar?", le preguntó el industrial.

"Porque ya he pescado bastante por hoy", respondió el pescador.

¿Y por qué no pescas más de lo que necesitas?", insistió el industrial.

"¿Y qué iba a hacer con ello?", preguntó a su vez el pescador.

"Ganarías más dinero", fue la respuesta. "De ese modo podrías poner un motor a tu barca. Entonces podrías ir a aguas más profundas y pescar más peces. Entonces ganarías lo suficiente para comprarte unas redes de nylon, con las que obtendrías más peces y más dinero. Pronto ganarías para tener dos barcas... y hasta una verdadera flota. Entonces serías rico, ¡cómo yo!"

"¿Y qué haría entonces?", preguntó de nuevo el pescador.

"Podrías sentarte y disfrutar de la vida", respondió el industrial.

"¿Y que crees que estoy haciendo en este preciso momento?", respondió el satisfecho pescador.
 
Una historia sobre la importancia de disfrutar la vida antes que el ganar mucho dinero


El rico industrial del Norte se horrorizó cuando vio a un pescador del Sur tranquilamente recostado contra su barca y fumando una pipa.

"¿Por qué no has salido a pescar?", le preguntó el industrial.

"Porque ya he pescado bastante por hoy", respondió el pescador.

¿Y por qué no pescas más de lo que necesitas?", insistió el industrial.

"¿Y qué iba a hacer con ello?", preguntó a su vez el pescador.

"Ganarías más dinero", fue la respuesta. "De ese modo podrías poner un motor a tu barca. Entonces podrías ir a aguas más profundas y pescar más peces. Entonces ganarías lo suficiente para comprarte unas redes de nylon, con las que obtendrías más peces y más dinero. Pronto ganarías para tener dos barcas... y hasta una verdadera flota. Entonces serías rico, ¡cómo yo!"

"¿Y qué haría entonces?", preguntó de nuevo el pescador.

"Podrías sentarte y disfrutar de la vida", respondió el industrial.

"¿Y que crees que estoy haciendo en este preciso momento?", respondió el satisfecho pescador.
La diferencia en la vida real, fuera de fábulas, es que el rico puede ELEGIR qué hacer mientras que el pobre está muy limitado en sus opciones.
Si bien, "hacerse rico" a base de apiolar animales, cortando árboles o contaminando acuíferos estaría para mí fuera de toda consideración.
La lotería por contra es una forma de hacer dinero totalmente inofensiva, es un simple juego al fin y al cabo.
 
Última edición:
ya estamos con las etiquetas fulastres de progre. Todos tenemos que amar la oficina y el progreso parece...
 
La diferencia en la vida real, fuera de fábulas, es que el rico puede ELEGIR qué hacer mientras que el pobre está muy limitado en sus opciones.
Si bien, "hacerse rico" a base de apiolar animales, cortando árboles o contaminando acuíferos estaría para mí fuera de toda consideración.
La lotería por contra es una forma de hacer dinero totalmente inofensiva, es un simple juego al fin y al cabo.

Han hecho una sociedad en donde el pobre si no trabaja, digamos meses, le quitan todo. Es una aberración.

pero tú lo has dicho, ELEGIR, la capacidad de ELECCIÓN, poder hacer lo que quieras sin tener problemas, salvo que nazcas de un linaje de millonarios parece que tienes un problema, ya desde antes de nacer. SOMOS UNA SIMPLE ETIQUETA, UN PRODUCTO, UNA MERCANCÍA. Nos han cosificado y nos utilizan como tal.

Varios milenios de esclavitud, feudalismo y capitalismo me parecen que esa especie parezca querer el sufrimiento. Es un sometimiento eterno, una supeditación absoluta y premeditada y lo peor consentida. Y aquí no hablo de soplapolleces de izquierda vs derecha, donde se limita la actitud vaga vs la actitud del rico.

Habría que humanizar la economía, que el ser humano no fuera sólo el dinero que tenga, que estuviera destinado a lo social, el dinero no nació para mejorar la vida de las personas por facilidad? entonces por qué se tras*formó en todo lo contrario?

Obviamente no es lo mismo un rico científico que ha realizado una medicina para mejorar la salud de las personas a uno que está todo el día en la bolsa vendiendo y comprando cualquier cosa haciendo dinero del propio dinero.

La vida es otro juego, un juego que no merece ser considerado ni serio ni que alimente el ego en este circo.
 
Bueno, no estoy de acuerdo. No tienes que pagar por agua y alimentos si no quieres, hay ríos y terreno para cultivar. Yo tengo un pozo en la finca y no pago nada por el, y suelo sembrar y criar pollos ya por tradición (está cerca de la ciudad).
El tema está en que si quieres comodidades como agua corriente, electricidad y bajar a la calle a comprar bravas, tienes que pagarlo. Todo servicio hay que pagarlo, pero en tu mano está irte a vivir a un bosque. No podemos tener el todo gratis.
 
La coca-cola es la felicidad

“Es lo que siempre he querido, pero es una cosa, una auténtica cosa”.

Tania Peligero

La-f%C3%B3rmula-de-la-felicidad.jpg


Cuando vi la lata de Coca-Cola que me compré ayer, la que ven en la imagen, lo primero que pensé es: ¡palos, están vivos! What the fuck! ¿Acaso llevaba puestas las gafas de John Nada? ¿Acaso la felicidad es beber esa cosa? ¿Las corporaciones traen la felicidad? ¿El capitalismo es la felicidad? ¿La multinacional Coca-Cola, con ese oscuro pasado tan relacionado con las conspiraciones mundiales, con tantos secretos, nos trae la felicidad? ¿Para eso organiza congresos donde psicólogos, médicos, deportistas y filósofos hablan de la fórmula secreta de la felicidad? Shiiiiiiiiit…

¿La chispa de la vida? Por mis huevones. Ya somos mayores, ya no creemos en los reyes magos, ni en las declaraciones de la NASA, ni vamos a ver al Papa. No tenemos caras de peregrinos adolescentes borrachos gritando “Benedicto es el puñetero amo”. A la gente normal se le cae la cara de vergüenza con tanto cinismo y tanta hipocresía y tanta doble jovenlandesal… 50 millones de euros para su divina cuenta corriente, en semejante situación. Deberíamos haber soltado el doble, por sus santos huevones inmaculados. Y luego escuchamos a los políticos, esos bastardos malnacidos y pusilánimes con corbatas fosforescentes, atreviéndose a exigirle sacrificios al pueblo… Por el bien de España, de Europa, de la democracia y de su cuenta corriente.

Y se atreven a exigirlos porque el dinero es la libertad y la libertad es la felicidad y la felicidad es Coca-Cola y el Vaticano es Coca-Cola. Como dice Karra Elejalde en Año Mariano, “no me molestan los ricos, lo que me joroba es que haigan los pobres”. El sistema es implacable. El neoliberalismo, inventado por ese santo varón llamado Milton Friedman, genera desarrollo y riqueza, claro. Pero sólo para aquellos que lo prodigan. Y al coste que sea. Por lo tanto el capitalismo es demasiado cruel para que sea la felicidad. Ahí no hay ningún equilibrio, cualidad imprescindible para ser feliz, según los griegos antiguos. Sólo hay placer por el lucro y libertad monetaria. Así que no nos hagan reír, mercaderes de la Coca-Cola. Dejad en paz a los jovenlandeses, no quieren vuestro brebaje canceroso ni vuestras guerras de cosa. No entienden vuestras sonrisas de comerciales ni vuestro circo del lucro. Ni nadie lo entiende en verdad.

1235401724.jpg


Ya sabemos en qué consiste la felicidad, y no es en apiolar y engañar por dinero. Mucho se ha escrito sobre este estado de ánimo mágico que parece ser el sentido o el fin último de la vida (a falta de otro mejor, que por el momento desconocemos). Muchos pensadores hablan de que la felicidad consiste en estar a gusto con uno mismo, tener una actitud positiva y tratar de contagiársela a los demás. No sé dónde se encuentra la felicidad, si en una pequeña mansión o en el neocórtex del cerebro, pero de seguro que no está en vuestras latas ni botellas ponzoñosas.

Son las palabras de grandes hombres las que nos ayudan a desentrañar el misterio de la felicidad y del sentido de vida, no vuestras lenguas viperinas marketinosas. Para conquistar la felicidad, Sócrates y Platón nos exhortan hacia la virtud. Aristóletes nos dice que seamos buenos. Epicuro nos propone el cuadrifármaco: no temer a la fin, no temer a los dioses, buscar el placer y soportar el dolor. Groucho Marx dice que la felicidad está hecha de cosas caras. Y no le falta razón: en las sociedades modernas el dinero es la felicidad porque el dinero es la libertad, es decir, que la libertad aumenta en la medida que aumenta la cuenta corriente. Pero nada tiene que ver realmente el dinero con la felicidad. Como dice Epicteto, el esclavo filósofo, la única manera de ser feliz es ser libre y no desear nada.

Tolstoi aconseja no hacer lo que queremos, sino querer lo que hacemos. Neruda cree que el secreto está en encontrarse con uno mismo. Oscar Wilde nunca buscó la felicidad en el amor. Freud nos propone que seamos petulantes o, en su defecto, parecerlo. Victor Hugo recomienda que te ames mucho, a pesar de ti mismo. Voltaire dice que lo importante de la felicidad es saber dónde buscarla. John Locke -el filósofo, no el alopécico de Perdidos- dice que la felicidad es interior, está en la mente. Pero Nietzsche nos recuerda que no hay épocas felices, sólo momentos. Y que el hombre será feliz si trata de mejorarse cada día. Porque no ser feliz es para Borges el peor pecado. Comte dice que vivamos para los demás. Goethe cree que la felicidad nace de la moderación y de la capacidad de alegrase por los logros de los demás. Si hacemos caso a Flaubert, debemos ser estúpidos, egoístas y estar bien de salud. Aunque la principal es la primera. Bertrand Russel prefiere que seamos objetivos.

TheyLive.jpg


Pascal apunta que la manera de agrandar la felicidad es repartirla a los demás. Kase.O dice que sólo hay que olvidar el pasado. El truco de Montesquieu era imaginarse a los demás más tristes. Woody Allen sólo sería feliz si le gustase sufrir. Vargas Llosa dice que hay que ser petulante o algo para ser totalmente feliz. Aldous Huxley disfrutaba de su felicidad sin tratar de disminuir la de los demás. Erasmo de Rotterdam era feliz porque lo que quería ser era lo mismo que lo que era. Para Rousseau, más que hacer lo que queremos, la felicidad consiste en no hacer lo que no queremos. Para Kant todo se basa en la imaginación. Salomón creía que estando bien de ánimo, la atraías. Juvenal vio una vez a un hombre feliz y le pareció más raro que un cuervo blanco. Para Eurípides, el hombre comienza a ser feliz sólo en su último día, cuando desciende a la tumba. El hombre feliz del Dalai Lama es compasivo. Sófocles pensaba que el saber y el conocimiento son lo más importante para lograr la felicidad.

JBy6l1Bb3b7xf5haYZ68xzDr_500.jpg


Según Santo Tomás de Aquino, la felicidad está en la contemplación de la verdad. Shakespeare era feliz en sus amigos. Para Jon Egaña la felicidad está en el camino. Quizá lo mejor sea disfrutar coleccionando caracolas como Stevenson. Porque a veces el hombre infeliz no se da cuenta de que es feliz, como decía Dostoyevski. La felicidad para Séneca es no necesitarla. Gandhi nos sugiere que pongamos de acuerdo nuestros pensamientos, nuestras palabras y nuestros actos. Parece que así llegará ella sola un buen día, porque la felicidad huye del que la busca, como la piedra filosofal.

coca-cola-y-capitalismo-2.jpg


Esto que ponen en las latas de Coca-Cola es tan obvio, es tan Orwell, es tan “Están Vivos”, que me entra la risa y me río. La publicidad de Coca-Cola es un cáncer, una felicidad de broma para mezclarla con ron Brugal y olvidarse. Pues no. Las ranas no olvidamos. Bebemos ron con Coca-Cola pero sabemos que la verdadera felicidad es una actitud, y hay que estar bien predispuesto y seguirla con disciplina y motivación. Como diría Krahe, lo primero es emplear cierto tiempo en conseguirla. Luego ya veremos lo que pasa.
 
Bueno, no estoy de acuerdo. No tienes que pagar por agua y alimentos si no quieres, hay ríos y terreno para cultivar. Yo tengo un pozo en la finca y no pago nada por el, y suelo sembrar y criar pollos ya por tradición (está cerca de la ciudad).
El tema está en que si quieres comodidades como agua corriente, electricidad y bajar a la calle a comprar bravas, tienes que pagarlo. Todo servicio hay que pagarlo, pero en tu mano está irte a vivir a un bosque. No podemos tener el todo gratis.

El todo gratis lo han tenido las tribus y sociedades simples desde hace 200000 años y vosotros aquí lo habláis como si fuera la utopía, definitivamente sois un experimento la civilización, bueno tienes razón de hecho considero más importante esa alimentación o agua recogida de forma natural a la comprada, y sobre la tecnología pues bueno, creo que estamos mal acostumbrados y no nos deberían adaptar a ella antes que no la entendamos si es que no pasa ya, supongo que si el sistema obsoleto se rige por los precios habrá que pagar por ella la que lo quiera, aunque es preferible conservarlo lustros o décadas a renovar constantemente aunque el puñetero mercado lo haga y el consumidor trague como buen "moderno" que es. El problema viene cuando el moderno no sabe vivir sin la civilización, sin pagar por nada o en medio de la naturaleza, lo considero un proceso de deshumanización antinatura.

---------- Post added 27-may-2013 at 00:42 ----------

[YOUTUBE]uAebS5dLZdc[/YOUTUBE]

otro anuncio interesante... nunca deja indiferente los comerciales de esta marca de cosa.
 
Última edición:
Volver