IPH_2
Himbersor
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Yo no tengo tan claro que sea el inmobiliario la causa principal. Desde luego, es una de las causas, y además es (creo) la más llamativa. También existe un componente cultural muy fuerte que ha sido perfundido en la sociedad española en los últimos cuarenta años, en dos vertientes:
a) Si no eres funcionario eres un perdedor y estás tirando tu vida a la sarama.
b) Si no logras un pelotazo rápido y te forras enseguida, estás tirando tu vida a la sarama.
En cualquier caso, el efecto es que tener un trabajo mainstream, normal, de toda la vida, incluso ganando bien, se ve como algo espantoso e indigno de ser llamado siquiera "vida". Y esto se ha acelerado en las últimas décadas, cada vez más, porque toda la propaganda en los medios de comunicación y las redes sociales va dirigida a "hazte millonario antes de los treinta", "corre, corre, corre que te lo quitan", "si no tienes cash sano eres la fin en vida", etc.
En resumen: o funcionario o pelotazo, pero ambos responden a la misma idea de fondo, en la que si no logras algo "rápido" (pelotazo), al menos "date a la buena vida". Cualquier otra cosa no merece la pena ser vivida.
Los salarios se han desplomado, también, porque mucha gente no quiere trabajar. Así de simple, así de duro, así de trágico. Nos hemos convertido en una sociedad envejecida, en la que las personas mienten, roban y estafan todo lo que pueden, porque no quieren trabajar. Tampoco quieren comprometerse ni quieren dedicarse a nada más que a ellos mismos, pero eso es cuento para otro día. En lo que ahora nos ocupa, cualquier cosa antes de trabajar, ése es el lema para muchos.
Y también te digo, no me sorprende, dado que los empresarios tampoco quieren trabajar, sino que quieren que se lo den hecho. Al menos en una parte importante, tienen metido en la cabeza que si tengo una empresa tengo que tener cierto nivel de vida. Por tanto, en cuanto empiezan a ver cifras de facturación de más de cuatro ceros (ojo, facturación, no beneficio, pero ahí no se paran a pensarlo), les da la hibris y ya piensan que son el gas de la Coca Cola. Y endiosándose, dejan de entender que ellos también tienen que dar el callo. Probablemente, los que más.
Y ves gente con empresas con facturaciones acondroplásicas (en el marco general, comparadas con lo que mueve un señor trabajando, es mucho más dinero) y cuyos dueños pierden completamente los papeles: hipotecas de un millón de euros, coches de noventa o cien mil euros, vacaciones de cinco mil euros, casa en el campo, en la playa, piscinas, pádel, masajes, tratamientos estéticos, etc.
Luego llega la realidad como un mercancías y les pasa por encima, y "es que la gente no quiere trabajar" y "los españoles son unos vagos". Lo somos, no lo niego. Pero tú, empresario, lo eres también.
