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Madmaxista
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Ya me habían contado que ahora los gimnasios están más llenos. En el caso de Valencia, el paro se convierte en cuota de mercado... ::
Los gimnasios valencianos basarán su expansión en los jóvenes parados
11/04/2012 20:14
Hartos de bajar cada vez más las cuotas para no perder socios, los gimnasios han decidido lanzarse definitivamente hacia el concepto low cost. Una nueva fórmula, importada desde Alemania, que permite correr por la cinta, levantar pesas o participar en las actividades colectivas por 19,90 euros al mes, un precio entre tres y cinco veces menor al de los gimnasios convencionales.
La idea llega ahora a la Comunitat con dos gimnasios en Elche y Castellón de +Fit, vinculada al grupo Body Factory. Con un precio “atractivo” pretenden recuperar al público más joven, principalmente hombres entre 18 y 28 años, con problemas económicos, muchos de ellos parados o reacios a gastarse entre 60 y 100 euros al mes. “Desde entonces hemos multiplicado por cinco las nuevas inscripciones”, asegura Almudena Otero, gerente de Body Factory.
Como sucede con las aerolíneas, los gimnasios low cost son una versión más barata de las cadenas de referencia. Están despojados de cualquier lujo. Ni atención personalizada de los monitores ni los servicios de piscina, spa o jacuzzi. “En Alemania incluso no incluyen ni la ducha ni las clases colectivas con monitor”, explica Otero. En España, sin embargo, todavía no se ha llegado a ese extremo.
Pagar según complementos
A partir de un precio muy bajo, cada socio puede ampliar su tarifa en función de los servicios que desea utilizar. Por ejemplo, usar la piscina en +Fit implica pagar 10 euros más cada mes. La idea es que cada socio pague sólo en función de sus necesidades reales. Una idea que ha tenido mucho éxito entre los jóvenes parados.
Hasta ahora el gran problema para los gimnasios convencionales era que habían tenido que rebajar cada vez más las cuotas para intentar frenar la fuga de clientes. “La crisis ha llegado al sector un poco más tarde porque se nos considera como salud y no como ocio, aunque al final también nos ha cogido. Los clientes ya no tienen el nivel adquisitivo de hace unos años”, apunta la gerente de Body Factory.
Menos gastos y más socios
Por eso, los gimnasios se han lanzado hacia el low cost como una vía de escape. Por una parte, consiguen reducir gastos al ofrecer menos servicios, ya que por ejemplo sólo cuentan con sólo un monitor en la sala. Por otro lado, aunque los socios paguen menos, estos centros han conseguido multiplicar el número de clientes. “En Castellón hemos sumado 420 altas en la primera semana cuando lo normal es hacer 40”, asegura Otero.
Los gimnasios valencianos basarn su expansin en los jvenes parados
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Los gimnasios valencianos basarán su expansión en los jóvenes parados
11/04/2012 20:14
Hartos de bajar cada vez más las cuotas para no perder socios, los gimnasios han decidido lanzarse definitivamente hacia el concepto low cost. Una nueva fórmula, importada desde Alemania, que permite correr por la cinta, levantar pesas o participar en las actividades colectivas por 19,90 euros al mes, un precio entre tres y cinco veces menor al de los gimnasios convencionales.
La idea llega ahora a la Comunitat con dos gimnasios en Elche y Castellón de +Fit, vinculada al grupo Body Factory. Con un precio “atractivo” pretenden recuperar al público más joven, principalmente hombres entre 18 y 28 años, con problemas económicos, muchos de ellos parados o reacios a gastarse entre 60 y 100 euros al mes. “Desde entonces hemos multiplicado por cinco las nuevas inscripciones”, asegura Almudena Otero, gerente de Body Factory.
Como sucede con las aerolíneas, los gimnasios low cost son una versión más barata de las cadenas de referencia. Están despojados de cualquier lujo. Ni atención personalizada de los monitores ni los servicios de piscina, spa o jacuzzi. “En Alemania incluso no incluyen ni la ducha ni las clases colectivas con monitor”, explica Otero. En España, sin embargo, todavía no se ha llegado a ese extremo.
Pagar según complementos
A partir de un precio muy bajo, cada socio puede ampliar su tarifa en función de los servicios que desea utilizar. Por ejemplo, usar la piscina en +Fit implica pagar 10 euros más cada mes. La idea es que cada socio pague sólo en función de sus necesidades reales. Una idea que ha tenido mucho éxito entre los jóvenes parados.
Hasta ahora el gran problema para los gimnasios convencionales era que habían tenido que rebajar cada vez más las cuotas para intentar frenar la fuga de clientes. “La crisis ha llegado al sector un poco más tarde porque se nos considera como salud y no como ocio, aunque al final también nos ha cogido. Los clientes ya no tienen el nivel adquisitivo de hace unos años”, apunta la gerente de Body Factory.
Menos gastos y más socios
Por eso, los gimnasios se han lanzado hacia el low cost como una vía de escape. Por una parte, consiguen reducir gastos al ofrecer menos servicios, ya que por ejemplo sólo cuentan con sólo un monitor en la sala. Por otro lado, aunque los socios paguen menos, estos centros han conseguido multiplicar el número de clientes. “En Castellón hemos sumado 420 altas en la primera semana cuando lo normal es hacer 40”, asegura Otero.
Los gimnasios valencianos basarn su expansin en los jvenes parados
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