Dentro de ese espectáculo de la hispanidad no existe el consenso ni la unificación de un sentimiento hispano-americano que haga del evento una expresión de orgullo unánime, común a todos sus afectados.
Y digo afectados, porque, desde dentro, desde la raíz propia del Estado español, esa unión, esa identidad, esa razón de orgullo, la Hispanidad, es una disputa continua entre españoles, por la simple razón de la desigualdad, la mala gestión económica, la solidaridad parasitaria entre CCAAs y la merma de diálogo y el respeto. Sobran muchos narices y faltan estrategas de la política que busquen el fortalecimiento de la hispanidad desde un principio de inclusión, que no el de la imposición desde varios frentes.
Para muestra un detallito. Lean, lean... :fiufiu:
Tras aquel artículo del año pasado, tan representativo de la perfecta Simbiosis solidaria entre las comunidades autónomas de España, la radiografía diferencial de los habitantes de la NACIÓN sigue su curso hacia el desamor pecuniario que nos une en el tinglado mal montado y peor avenido de la piel de toro. Baleares sube otro escalón en la solidaridad nacional y ahora es la SEGUNDA CCAA que más aporta al estado.
Baleares aporta al Estado 1.330 millones de euros más de los que recibe | Baleares | EL MUNDO
Baleares aporta al Estado 1.330 millones de euros más de los que recibe
En términos per cápita, Baleares aporta 1.192 euros
Hacienda apunta que "el saldo fiscal tiende a empeorar según aumenta la renta per cápita"
EUROPA PRESSMadrid Actualizado:21/07/2015 13:14 horas
Baleares tiene un saldo fiscal negativo con el resto del territorio nacional por valor de 1.330 millones, un 5,08% de su PIB; mientras que en Madrid asciende a 19.015 millones de euros, lo que equivale al 9,57% de su PIB, y en Cataluña a 7.439 millones, un 3,75% de su PIB.
Estos datos corresponden a 2012 y aparecen incluidos en el informe 'Sistema de Cuentas Públicas Territorializadas', difundido este martes por el Ministerio de Hacienda y elaborado a partir de una metodología diseñada por Ángel de la Fuente, Ramón Barberán y Ezequiel Uriel.
El informe, en el que se evalúa la relación entre cargas y beneficios como consecuencia de la incidencia en cada territorio de los presupuestos públicos, muestra que Madrid, Baleares y Cataluña, junto a Valencia, que aporta 1.453 millones (1,48% del PIB), son las cuatro regiones contribuyentes netas, con unos flujos de salida equivalentes a una media del 5,6% del PIB.
En el caso de las regiones receptoras netas, los flujos de entrada equivalieron a una media del 5,5% de su PIB. En total, los flujos redistributivos entre diferentes regiones ascendieron en 2012 a 26.000 millones de euros, un 2,8% del PIB de España.
Dentro de las regiones receptoras por orden de peso sobre el producto interior, Ceuta y Melilla recibieron 721 millones, un 24,5% de su PIB, por delante de Extremadura, que tuvo un saldo positivo de 2.655 millones, un 15,6% de su PIB. El saldo de Canarias fue favorable por valor de 3.479 millones (8,58% del PIB), frente a los 1.828 millones de Asturias (8,4%) y los 3.946 millones de Galicia (7,21%).
La sexta región con un saldo fiscal positivo más elevado en términos de PIB es Andalucía (6,02%, 8.531 millones), por delante de Castilla-La Mancha (6%, 2.291 millones), Castilla y León (5,42%, 2.933 millones), País Vasco (2,43%, 1.562 millones), Cantabria (2,19%, 270 millones), Navarra (2,09%, 371 millones), Aragón (1,54%, 509 millones), La Rioja (0,54%, 42 millones) y Murcia (0,36%, 98 millones).
Pér cápita
En términos per cápita, la comunidad autónoma que más aporta es Madrid, con 2.927 euros por persona, por delante de los 1.192 euros de Baleares, los 984 euros de Cataluña y los 284 euros de Valencia.
Los ciudadanos que más reciben son los de Ceuta y Melilla (4.336 euros per cápita), frente a los 2.401 euros de Extremadura, los 1.704 de Asturias, los 1.642 de Canarias, los 1.423 de Canarias y los 1.158 de Castilla y León.
A continuación se encuentran los 1.085 euros de Castilla-La Mancha, los 1.010 euros de Andalucía, los 713 euros de País Vasco, los 576 euros de Navarra, los 377 euros de Aragón, los 456 euros de Cantabria, los 131 euros de La Rioja y los 66 euros de Murcia.
Los "más ricos" aportan más.
Entre las conclusiones del estudio, Hacienda destaca que, "como cabría esperar, el saldo fiscal tiende a empeorar según aumenta la renta per cápita, de forma que los territorios más ricos generalmente presentan déficit fiscales mientras que los de menor renta suelen disfrutar de superávits".
Hacienda, que defiende el "esfuerzo notable de transparencia" de este trabajo, que no se publica en ningún otro país, asegura que "los impuestos soportados por los residentes de los distintos territorios aumentan con el nivel de renta, aunque con altibajos significativos que revelan diferencias en niveles de presión fiscal entre territorios, mientras que los gastos no muestran una relación sistemática con esta variable".
También señala que casi el 70% de los saldos fiscales regionales se debe a que en los territorios con mayor renta se pagan más impuestos que en los más pobres, mientras que el 30% restante es "más problemático" y procede de "políticas de gasto, en algunas de las cuales podría haber una mayor discrecionalidad".
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Animo, este artículo es muy significativo.
Cada balear aporta al Estado 1.329 euros más de los que recibe - Diario de Mallorca
Cada balear aporta al Estado 1.329 euros más de los que recibe
Madrid admite que las islas sufren un agujero fiscal de 1.483 millones, incluso con un cálculo que maquilla la dimensión del agravio - La comunidad destina un 5,7% de su economía a sostener al resto.
24.07.2014 | 06:30
Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda, ayer, en el debate sobre financiación. efe
Alberto Magro. palma.
Ni el maquillaje estadístico aplicado por el Ministerio de Hacienda a las balanzas fiscales de las autonomías evita lo que ya se sabía y ayer mismo adelantaba este diario: Balears destaca, con Madrid y Cataluña, como la comunidad más castigada en el reparto regional de los recursos públicos. Pese a haber sido “cocinados” para reducir a la vista el tamaño del agujero que esquilma los recursos de Balears (como reconoció en público el economista autor del informe, Ángel de la Fuente), los datos son contundentes: cada ciudadano de estas islas aporta cada año al sistema de todos los españoles 1.329 euros más de los que recibe. Todo un pico, que tiene otras cifras que hablan de discriminación a la hora de tratar a los distintos habitantes de España: mientras cada balear pone esos 1.329 euros de más al año, cada extremeño en vez de poner, recibe 2.697 euros más de los que suelta. Entre cada pagano balear y cada privilegiado extremeño hay exactamente 4.026 euros de diferencia al año, que explican a la perfección por qué Balears quiere cambiar el sistema por el que se financian todas las comunidades y, en cambio, Extremadura defiende con uñas y dientes la situación actual, mientras llama insolidarias a las comunidades que sostienen sus servicios públicos y sus exclusivas bajadas de impuestos.
Así que la batalla está servida, que las balanzas fiscales que ayer hizo públicas el Ministerio de Hacienda son solo el principio de una guerra que ya ha vivido sus primeras escaramuzas: la que debe saldarse con un nuevo modelo de financiación. Y el conflicto será duro. Un choque de tanques. Se intuye ya en los datos presentados ayer, calculados con una metodología que expertos fiscalistas consideran hecha a la medida del Gobierno Rajoy en su pugna con Cataluña. Por el camino, se atropella a Balears, que sufre fundamentalmente un golpe metodológico: según explican De la Fuente y su equipo en el informe de 41 páginas presentado ayer, unos ingresos clave para medir el esfuerzo fiscal de las islas, como es el IVA que pagan aquí los turistas, en vez de ser computados como aportación balear, se dividen a partes iguales entre todos los españoles. Con lo que el esfuerzo balear cae en picado, al menos de cara a la galería.
Maquillaje metodológico:
Lo que no se divide a partes iguales entre todos los españoles son los gastos públicos que generan aquí esos turistas, ya sea en forma de servicios sanitarios, infraestructuras básicas de transporte, mantenimiento de equipos básicos como las muy costosas depuradoras o simplemente los costes extra derivados de garantizar la seguridad y limpiar el entorno tras el paso de 12 millones de turistas al año. El resultado es que Balears ve cosméticamente reducido a 1.483 millones de euros al año un agujero fiscal que la última vez que se calculó (en 2008) superaba los 3.700 millones.
No es la única rareza (o capricho metodológico) que reflejan unas balanzas fiscales claramente condicionadas por la pugna política entre el nacionalismo español del Gobierno Rajoy y el nacionalismo catalán de la Generalitat de Artur Mas. Un ejemplo: mientras los ingresos de los turistas extranjeros de Balears son de todos y sus gastos no, los miles de millones que la comunidad de Madrid aporta en impuestos gracias a ser capital y sede de la mayoría de las multinacionales que luego venden en toda España se computan en su mayor parte como si fueran exclusivos de Madrid. Los extranjeros son de todos, salvo si son empresas multinacionales. Y las multinacionales españolas también, con casos tan risibles como que una compañía que lleva el mar en el nombre, como Transmediterránea, sea considerada, gracias a su sede capitalina, parte de la aportación fiscal de Madrid. Y allí no hay playa, vaya, vaya. El resultado es así el buscado a priori, gracias a un modelo creado ad hoc para denostar la teoría del expolio fiscal catalán y balear , según dicen fiscalistas catalanes y baleares. De ese modo, dicen, el Gobierno Rajoy puede vender con el informe oficial en la mano que el agujero fiscal es mayor en Madrid que en Cataluña. Y es justo lo que hacen en el Gobierno. Concretamente, el Ministerio de Hacienda asegura que Madrid pone en el sistema 16.723 millones más de los que recibe, mientras Cataluña apoquina 8.455 más de los que le dan. Con lo que aquello de “Madrid nos roba” quedaría convertido en “Madrid se roba”.
La pelea catalana salpica a Baleares.
¿Es así? Pues en Cataluña calcularon sus propias balanzas fiscales, elaboradas con la colaboración de fiscalistas tan prestigiosos como los menorquines Guillem Lopez-Casasnovas y Joan Rosselló. La conclusión era bien distinta: Cataluña aporta entre 11.000 y 15.000 millones más de los que recibe. La horquilla responde a un ejercicio de transparencia que el Gobierno central y el equipo del asturiano Ángel de la Fuente no han querido imitar: en Cataluña calcularon las balanzas con distintos métodos, y ofrecieron los datos de todos ellos, no solo del que más les interesaba.
¿Y Balears? Pues Balears, según el propio Rosselló (en conclusión compartida por el Govern balear), es víctima del cambio metodológico citado. Aunque los números también mejoran con respecto al cálculo de balanzas de 2008 por otra razón clave: el modelo de financiación negociado en 2009 por los gobiernos socialistas de José Luis Rodríguez Zapatero y Francesc Antich se saldó con una aportación adicional a las islas de casi 450 millones al año, que ya se están recibiendo desde el año 2011.
Hacia un reparto más justo
Aún así, las islas están entre las más perjudicadas por el actual sistema de financiación. Y esa será la siguiente batalla, conseguir que estas balanzas fiscales sirvan para replantear el modelo por el que se reparten los recursos, de modo que sea imposible algo que también reflejan los datos hechos públicos ayer: que Balears, para financiar los mismos servicios públicos, reciba 1.745 euros por habitante (la cifra más baja del Estado), mientras Extremadura cuenta con 2.429, Cantabria se embolsa 2.486 y vascos y navarros superan los 4.000 euros.
El agravio se ve aún más claro si se compara el agujero fiscal con el tamaño de cada economía regional. Lo que aporta de más Balears, esos 1.483 millones anuales de solidaridad de ida sin vuelta, equivalen al 5,7% del PIB balear. Es decir, las islas donan cada año el 5,7% de su economía para que a otros les vaya mejor. Y a quien mejor le va es a Extremadura, Canarias y Asturias. Sobre todo a Extremadura, siempre Extremadura: la comunidad del jamón y los pantanos obtiene el 17,6% de su PIB de lo que les llega de un modelo generoso con ellos como con nadie más. Aunque también es curioso el caso canario: en el otro archipiélago la insularidad sí existe, y se corrige con reducciones fiscales que hacen que Canarias reciba cada año 4.054 millones más de los que pone en la caja común. Que en materia de financiación, hay islas de primera y de segunda.
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Y este otro estudio no tiene desperdicio.
Las ventajas financieras concedidas a País Vasco y Navarra agravan los problemas de España, según Deutsche Bank
Las ventajas financieras concedidas a País Vasco y Navarra agravan los problemas de España, según Deutsche Bank - elEconomista.es Las ventajas financieras concedidas a País Vasco y Navarra agravan los problemas de España, según Deutsche Bank - elEconomista.es
En un documento publicado recientemente por el banco alemán Deutsche Bank se advierte a España de que "las reglas fiscales desiguales agravan los problemas del país", tanto en lo económico como en el sentimiento separatista de algunas comunidades.
En dicho documento, los investigadores de la entidad alemana explican que "en muchas regiones de España existen identidades culturales diferentes, pero sólo en algunas de ellas existe un movimiento y un sentimiento que clama realmente por la autonomía total y la independencia". Estas comunidades son País Vasco, Navarra y Cataluña.
El sentimiento independentista en estas regiones es más fuerte y extremo por su situación económica, entre otras cosas: "La renta per cápita de Cataluña, el País Vasco y Navarra se encuentra muy por encima de la media del conjunto de las comunidades españolas, sólo la Comunidad de Madrid puede competir en término de renta per cápita".
Esto explicaría por qué en otras comunidades con una identidad cultural muy marcada, como es el caso de Canarias, Asturias o Galicia, proliferan partidos 'regionalistas' y no 'independentistas'. Según Deutsche Bank, estas comunidades no defienden una idea tan extrema porque la "renta per cápita se encuentra por debajo de la media nacional".
Asimetrías regionales:
Por otro lado, el banco alemán señala las asimetrías regionales como otro de los grandes problemas de España. Los estatutos autonómicos especiales concedidos a Navarra y País Vasco, permiten a estas comunidades ser perceptoras netas del Estado a pesar de ser de las regiones más ricas de España, lo que desemboca en mayor desigualdad económica entre las regiones de un mismo país.
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Cataluña, Islas Baleares y Madrid son las comunidades que contribuyen con mayor peso a la igualdad: "Sorprende que teniendo en cuenta que el sistema está basado en la solidaridad, las regiones más ricas apoyan a las más pobres, Navarra y País Vasco sean receptoras netas de fondos en lugar de contribuyentes. Las direcciones poco comprensibles de los flujos y la asimetría de los regímenes fiscales hacen mucho más comprensible el descontento de los catalanes".
Desde la entidad financiera, se explica que aunque estas diferencias de trato justifican parte del sentimiento de los catalanes, no se puede compartir por otro lado "el reclamo que se escucha a menudo entre los nacionalistas catalanes argumentando que el Estado español explota de forma sistemática la fortaleza económica de Cataluña no está justificada. Después de todo, Madrid y Baleares aportan más que Cataluña en términos per cápita".
Lo que sí habría que mejorar son las asimetrías que "han generado ventajas financieras considerables para Navarra y el País Vasco. Ambas regiones serían contribuyentes netas del sistema si fueran tratadas igual que el resto. La situación actual es claramente desfavorable para las regiones más prosperas que se encuentran bajo el régimen autonómico común".
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¿Es España una Nación justa y equitativa para todos sus ciudadanos?
