http://www.sinpermiso.info/articulos/ficheros/Incendios.pdf
Incendios forestales: el coste de no
actuar. De un reino en llamas
Los incendios forestales que están arrasando el país el principio del verano de
2012, han vuelto a originar una grave alarma social con miles de evacuados,
un piloto muerto, además de importantes efectos económicos, en un periodo
especialmente grave por la crisis (cuantiosos gastos en extinción, pérdida de
propiedades, bosques, madera, recursos cinegéticos,,,), pero sobre todo
importantes efectos ecológicos, tanto respecto a las masas forestales, la
madurez del sistema, como a la fauna, efectos sobre la erosión del suelo, al
ciclo hidrológico y emisiones de co2.
En efecto, en los primeros días de julio alrededor de 50.000 hectáreas en
Cortes de Pallás y Andilla, en la provincia de Valencia, y otras 8.000 hectáreas
en Albacete y Murcia quedaron arrasadas por el fuego, siendo los más graves
ocurridos en los últimos años en España. Pero, hace tan solo unos meses
ardieron las Fragas del Eume, parque natural, sin lugar a dudas uno de los
bosques mejor conservados y más interesantes de Galicia. Por superficie
calcinada, habría que remontarse hasta 1994 o 2004 para encontrar otros
focos de similar intensidad.
Estamos a mitad de un muy complicado verano en lo que a incendios se
refiere, la fuerte sequía, a pesar de la abundante lluvia de estos años pasados
viene acompañada esta vez de las temperaturas más altas registradas en el
mes de Julio, en ocasiones con fuertes vientos continuados. pero estas
condiciones suceden cada cierto número de años, no es la primera vez.
Se ha escrito, y es cierto, que un bosque tarda en formarse como tal entre
docenas y cientos de años y sin embargo su desaparición por incendios o talas
se produce en tan solo unos minutos por ello es evidente que no podemos
descuidarnos estos minutos para conservar algo tan frágil como son los
bosques…
Historia que se repite
A las sucesivas olas de calor le sucederán, cuando llegue el otoño, lluvias
torrenciales. Y esto sucede cada cierto número de años, sobrevienen sequías,
se producen periodos de altos vientos y se producen grandes incendios, pero
parece que nos coge por sorpresa otra vez…
Nosotros ponemos todos los ingredientes para que esto suceda. Por una parte
la vegetación pirófita, en el caso de la Comunidad Valenciana, pino halepensis,
pinaster y matorrales sin continuidad. En Galicia miles de hectáreas de pino
pinaster y de eucaliptos, especies exóticas en ese territorio, especies que
tienen una gran propensión natural a arder, especies que son favorecidas por
los incendios, además no las cuidamos y la catástrofe sucede cada cierto
tiempo, de una forma casi predecible…En una u otra punta de España se están
poniendo las condiciones para que los ecosistemas ardan, y no solo las
especies, la estructura de los ecosistemas está tendiendo hacia la
matorralización, la falta de uso crea grandes continuidades de biomasa forestal
que tienen un gran riesgo de arder y luego indefectiblemente arden…...… Y
esto tiene importantes consecuencias ecológicas, -, riesgo de erosión, pérdida
biodiversidad, emisiones de gases de efecto invernadero, sociales ‒muertos,
afecciones a la salud como estamos viendo en Valencia estos días o en
importantes ciudades gallegas en el 2006- y económicas ‒perdida del
patrimonio natural, madera, caza, etc…..
En el tema de los incendios se suele distinguir entre causas inmediatas y
estructurales. Las inmediatas son las ya conocidas y nombradas, descuidos,
negligencias, los intereses madereros, especulativos de recalificación de suelo,
y también los naturales como los rayos. Algunos de estos se han conjurado o
por lo menos se ha legislado para que no puedan volver a ser problema tales
como la prohibición de recalificar terrenos incendiados,…otros siguen y
seguirán siendo problema como la necesaria educación de todos, el obligar al
máximo respeto hacia los sistemas forestales, el evitar las negligencias, etc.
Bien las causas inmediatas siguen incrementándose en todo el país, lo cual
revela un importante fracaso en las políticas seguidas, tanto de los gobiernos
autonómicas como del gobierno central…La legislación aprobada para que no
se puedan recalificar terrenos los próximos 30 años (si van unidas a la
necesaria creación de una base de datos de superficies quemadas, claro!) o la
creación de una fiscalía especializada en los temas urbanísticos y de medio
ambiente pueden ser claves para luchar contra este fenómeno de las causas
inmediatas, pero esto es solo una parte, y no la más importante, como se ve en
las estadísticas de fuegos.
Lo quemado tiene un desigual valor ecológico. En ocasiones escaso:
eucaliptales abandonados, zonas de pino pinaster sin gestionar en Galicia,
amplias zonas de matorral: de tojo, de aliagas, matorral pirófito que volverá a
rebrotar, pero otras eran de gran valor ecológico , alcornocales en producción
de docenas o cientos de años, encinares, pinares maduros, zonas de matorral
nobles, coscojares, zonas protegidas, zonas de pino halepensis con gran valor
para fijar suelo, bosques que tardarán cientos de años en volver a sus
características actuales,....