El Nvcleo del Alma
Madmaxista
- Desde
- 1 Ene 2012
- Mensajes
- 4.374
- Reputación
- 6.759
Este subforo está plagado de lo que comunmente se considera como casapapi perdedor sin futuro, etc.
Cada casapapi es diferente pero vengo a sostener que aquellos cuya única obligación es levantarse por la mañana, sus padres no le dan mucho la matraca y acabarán heredando un piso que a las malas lo podrán alquilar son los auténticos triunfadores de la sociedad.
Cuando uno es casapapi es fácil imaginarse como sería la vida como un triunfador de éxito en el extranjero, disfrutando de dinero, shishis rubios sin depilar de 20 años que caen rendidos en noches de alcohol ante el latin lover español de turno y viajes a lugares exóticos cada año.
Yo he estado en los dos lugares y he decir que me quedo de casapapi de largo.
No he sido inmigrante precario fregasuelos, he ganado bastante panoja, pero cada día en la oficina era un fruta tortura. Recuerdo haber pensado que me cambiaría por el indigente de la calle. Recuerdo haber pensado que no debería olvidarme de haber pensado eso para no volver a cometer el mismo error de querer llevar vida de triunfador.
El mundo de los adultos es la pérdida de la inocencia. Te hará reprobar a todo ser humano. Cada día vas tener que experimentar la miseria moral y la locura de que somos capaces: en el metro, en el trabajo, por parte de tu novia, de tu casero. El mundo de los adultos es un mundo muy ridículo lleno de constante agresividad por los asuntos más triviales o por ganar el más misero euro. Por no hablar del sentimiento de vacío que supone perder 8 horas al día haciendo algo por lo que no tienes el más mínimo interés. Un día trás otro, trás otro, trás otro.
Cada persona es un mundo pero alguien como yo cuyo único vicio caro son las pilinguis y el buen comer y siempre he sido feliz con aficiones sencillas el "casapapi way" es el auténtico camino hacía una vida plena. El mundo del triunfador hay que dejárselo a los iluso sin principios.
Cada casapapi es diferente pero vengo a sostener que aquellos cuya única obligación es levantarse por la mañana, sus padres no le dan mucho la matraca y acabarán heredando un piso que a las malas lo podrán alquilar son los auténticos triunfadores de la sociedad.
Cuando uno es casapapi es fácil imaginarse como sería la vida como un triunfador de éxito en el extranjero, disfrutando de dinero, shishis rubios sin depilar de 20 años que caen rendidos en noches de alcohol ante el latin lover español de turno y viajes a lugares exóticos cada año.
Yo he estado en los dos lugares y he decir que me quedo de casapapi de largo.
No he sido inmigrante precario fregasuelos, he ganado bastante panoja, pero cada día en la oficina era un fruta tortura. Recuerdo haber pensado que me cambiaría por el indigente de la calle. Recuerdo haber pensado que no debería olvidarme de haber pensado eso para no volver a cometer el mismo error de querer llevar vida de triunfador.
El mundo de los adultos es la pérdida de la inocencia. Te hará reprobar a todo ser humano. Cada día vas tener que experimentar la miseria moral y la locura de que somos capaces: en el metro, en el trabajo, por parte de tu novia, de tu casero. El mundo de los adultos es un mundo muy ridículo lleno de constante agresividad por los asuntos más triviales o por ganar el más misero euro. Por no hablar del sentimiento de vacío que supone perder 8 horas al día haciendo algo por lo que no tienes el más mínimo interés. Un día trás otro, trás otro, trás otro.
Cada persona es un mundo pero alguien como yo cuyo único vicio caro son las pilinguis y el buen comer y siempre he sido feliz con aficiones sencillas el "casapapi way" es el auténtico camino hacía una vida plena. El mundo del triunfador hay que dejárselo a los iluso sin principios.