Saludos, primera intervención.
Es cojonudo el articulito. Los promotores lo reconocen abiertamente: si el especulata ha metido la pata, que se aguante y apechugue con el muerto.
Disculpadme si no sale bien, no tengo gran pericia con este chisme
http://www.diariosur.es/prensa/20061203/marbella/compradores-niegan-escriturar-ante_20061203.html
Marbella
Más de 300 compradores se niegan a escriturar ante el peligro de que sus pisos sean ilegales
Las licencias de dos urbanizaciones de Elviria Sur son revisadas de oficio por la comisión gestora Los afectados son turistas e inversores británicos
HÉCTOR BARBOTTA/MARBELLA
GREEN HILLS. Los bloques ocupan suelo reservado para la construcción de viviendas adosadas. / JOSELE-LANZA
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PROMOCIONES
Los Lagos de Santa María
Localización: Elviria Sur
Viviendas: 340
Licencia: Proyecto básico concedido el 28 de noviembre de 2001 a Sur Inversiones Sema
Licencia de obras: Concedida el 19 de febrero de 2003
Infracción: Viviendas plurifamiliares donde sólo pueden ir viviendas unifamiliares
Santa María Green Hills
Localización: Elviria Sur
Viviendas: 192
Licencia: Proyecto básico concedido el 16 de octubre de 2002 a Sur Inversiones Sema
Licencia de obras: Concedida el 28 de abril de 2003
Infracción: Viviendas plurifamiliares en suelo calificado para vivienda unifamiliar adosada, viario público y parques y jardines
Las licencias fueron obtenidas por un imputado en la 'operación Malaya'
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No quieren convertirse en propietarios de viviendas amenazadas por la piqueta. Más de 300 compradores de pisos situados en dos urbanizaciones construidas en Marbella al amparo de licencias presuntamente irregulares se niegan a escriturar sus propiedades y reclaman que se les devuelvan las cantidades que entregaron como entrada. Tanto la promotora como el banco que actuó como avalista de la operación se niegan a reintegrar el dinero, y exigen a sus clientes que sigan adelante con la compra de los pisos. El asunto está ya en manos de los jueces, mientras las licencias de obra, concedidas cuando Jesús Gil y Julián Muñoz estaban al frente del Ayuntamiento y Juan Antonio Roca mandaba en Urbanismo, están siendo sometidas a una revisión de oficio.
El conflicto, una muestra clara de la herencia envenenada de 15 años de corrupción urbanística en Marbella, está planteado en dos urbanizaciones levantadas en la zona de Elviria Sur, Santa María Green Hills y Los Lagos de Santa María, cuyos compradores son en su mayor parte inversores y turistas residenciales británicos.
Las licencias de obra fueron concedidas en 2002 y 2003 por el Ayuntamiento de Marbella en clara violación al Plan General vigente, y están siendo revisadas de oficio por la gestora, según han explicado fuentes de Urbanismo, que han asegurado también que a ninguna de las dos urbanizaciones se les concederá la licencia de primera ocupación.
Un año terminados
Ante este panorama, los compradores, que han entregado como entrada cantidades que oscilan según los casos entre los 90.000 y los 110.000 euros, se niegan a seguir adelante con la operación. De los más de 500 pisos que suman ambas promociones, prácticamente vendidas al completo, han sido escriturados menos de 150 pese a que las obras llevan un año terminadas.
La promotora -Los Lagos de Santa María Golf, domiciliada en Granada- niega razón a los compradores, a quienes han requerido para que cumplan con las obligaciones adquiridas. Sostiene que las licencias de obras son legales, ya que fueron concedidas en su día por el Ayuntamiento, y que al día de hoy, pese al proceso de revisión iniciado por la gestora, tienen plena validez. También entiende que la licencia de primera ocupación ha sido concedida por silencio positivo.
Esta promotora se considera «un tercero de buena fe», ya que en su día adquirió ambas obras, que ya contaban con licencia municipal. Una de ellas fue comprada a la sociedad APEX 2000, filial inmobiliaria del grupo Iberdrola, mientras que la otra se compró a Sur Inversiones Sema.
Para el apoderado de la promotora, Víctor Sánchez, la razón que mueve a los propietarios para negarse a escriturar no está relacionado con la validez de las licencias, sino con el cambio que ha habido en el mercado y las dificultades que encuentran para vender las propiedades a terceros. «Como son inversores se niegan a escriturar porque no tienen compradores. La inversión les ha salido mal», argumenta.
La promotora sostiene que el retraso en la escrituración de los pisos le está causando graves perjuicios, ya que el banco le sigue cobrando intereses.
Una posición similar es la que mantiene el Banco Popular, entidad que actuó como avalista de las cantidades dadas como entrada. En uno de los documentos dirigidos al juzgado donde se dirime este litigio, el representante legal del banco argumenta que «si los demandantes no han recibido las viviendas es porque no han querido».
Y también recurre al argumento de la supuesta especulación por parte de los compradores. Lo hace en un lenguaje que llama la atención en un documento dirigido a un juzgado: «No hace falta pensar mucho para darse cuenta de que las viviendas se compraron para especular. Como ahora pintan bastos en la Costa del Sol, toca ir contra el banco a ver si suena la flauta y por lo menos se recobra lo entregado más los intereses, que tampoco es mal negocio».
Es cojonudo el articulito. Los promotores lo reconocen abiertamente: si el especulata ha metido la pata, que se aguante y apechugue con el muerto.
Disculpadme si no sale bien, no tengo gran pericia con este chisme
http://www.diariosur.es/prensa/20061203/marbella/compradores-niegan-escriturar-ante_20061203.html
Marbella
Más de 300 compradores se niegan a escriturar ante el peligro de que sus pisos sean ilegales
Las licencias de dos urbanizaciones de Elviria Sur son revisadas de oficio por la comisión gestora Los afectados son turistas e inversores británicos
HÉCTOR BARBOTTA/MARBELLA
GREEN HILLS. Los bloques ocupan suelo reservado para la construcción de viviendas adosadas. / JOSELE-LANZA
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PROMOCIONES
Los Lagos de Santa María
Localización: Elviria Sur
Viviendas: 340
Licencia: Proyecto básico concedido el 28 de noviembre de 2001 a Sur Inversiones Sema
Licencia de obras: Concedida el 19 de febrero de 2003
Infracción: Viviendas plurifamiliares donde sólo pueden ir viviendas unifamiliares
Santa María Green Hills
Localización: Elviria Sur
Viviendas: 192
Licencia: Proyecto básico concedido el 16 de octubre de 2002 a Sur Inversiones Sema
Licencia de obras: Concedida el 28 de abril de 2003
Infracción: Viviendas plurifamiliares en suelo calificado para vivienda unifamiliar adosada, viario público y parques y jardines
Las licencias fueron obtenidas por un imputado en la 'operación Malaya'
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No quieren convertirse en propietarios de viviendas amenazadas por la piqueta. Más de 300 compradores de pisos situados en dos urbanizaciones construidas en Marbella al amparo de licencias presuntamente irregulares se niegan a escriturar sus propiedades y reclaman que se les devuelvan las cantidades que entregaron como entrada. Tanto la promotora como el banco que actuó como avalista de la operación se niegan a reintegrar el dinero, y exigen a sus clientes que sigan adelante con la compra de los pisos. El asunto está ya en manos de los jueces, mientras las licencias de obra, concedidas cuando Jesús Gil y Julián Muñoz estaban al frente del Ayuntamiento y Juan Antonio Roca mandaba en Urbanismo, están siendo sometidas a una revisión de oficio.
El conflicto, una muestra clara de la herencia envenenada de 15 años de corrupción urbanística en Marbella, está planteado en dos urbanizaciones levantadas en la zona de Elviria Sur, Santa María Green Hills y Los Lagos de Santa María, cuyos compradores son en su mayor parte inversores y turistas residenciales británicos.
Las licencias de obra fueron concedidas en 2002 y 2003 por el Ayuntamiento de Marbella en clara violación al Plan General vigente, y están siendo revisadas de oficio por la gestora, según han explicado fuentes de Urbanismo, que han asegurado también que a ninguna de las dos urbanizaciones se les concederá la licencia de primera ocupación.
Un año terminados
Ante este panorama, los compradores, que han entregado como entrada cantidades que oscilan según los casos entre los 90.000 y los 110.000 euros, se niegan a seguir adelante con la operación. De los más de 500 pisos que suman ambas promociones, prácticamente vendidas al completo, han sido escriturados menos de 150 pese a que las obras llevan un año terminadas.
La promotora -Los Lagos de Santa María Golf, domiciliada en Granada- niega razón a los compradores, a quienes han requerido para que cumplan con las obligaciones adquiridas. Sostiene que las licencias de obras son legales, ya que fueron concedidas en su día por el Ayuntamiento, y que al día de hoy, pese al proceso de revisión iniciado por la gestora, tienen plena validez. También entiende que la licencia de primera ocupación ha sido concedida por silencio positivo.
Esta promotora se considera «un tercero de buena fe», ya que en su día adquirió ambas obras, que ya contaban con licencia municipal. Una de ellas fue comprada a la sociedad APEX 2000, filial inmobiliaria del grupo Iberdrola, mientras que la otra se compró a Sur Inversiones Sema.
Para el apoderado de la promotora, Víctor Sánchez, la razón que mueve a los propietarios para negarse a escriturar no está relacionado con la validez de las licencias, sino con el cambio que ha habido en el mercado y las dificultades que encuentran para vender las propiedades a terceros. «Como son inversores se niegan a escriturar porque no tienen compradores. La inversión les ha salido mal», argumenta.
La promotora sostiene que el retraso en la escrituración de los pisos le está causando graves perjuicios, ya que el banco le sigue cobrando intereses.
Una posición similar es la que mantiene el Banco Popular, entidad que actuó como avalista de las cantidades dadas como entrada. En uno de los documentos dirigidos al juzgado donde se dirime este litigio, el representante legal del banco argumenta que «si los demandantes no han recibido las viviendas es porque no han querido».
Y también recurre al argumento de la supuesta especulación por parte de los compradores. Lo hace en un lenguaje que llama la atención en un documento dirigido a un juzgado: «No hace falta pensar mucho para darse cuenta de que las viviendas se compraron para especular. Como ahora pintan bastos en la Costa del Sol, toca ir contra el banco a ver si suena la flauta y por lo menos se recobra lo entregado más los intereses, que tampoco es mal negocio».
