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Os paso un artículo de Josep Pernau (El Períódico), publicado en la edición de hoy:
ARTÍCULO // OPUS MEI
EL 'MILEURISMO' COMO BANDERA
JOSEP Pernau
Aquella tolerancia en el coste de la vivienda trajo los actuales abusos. Era presidente del Gobierno el señor Aznar, quien, con el optimismo que le caracterizaba cuando estaba en el cargo, con una declaración complació al ramo inmobiliario e indignó a los aspirantes a inquilinos o propietarios de una vivienda. Reconoció que los precios eran muy elevados, pero, que si la demanda absorbía todas las existencias de la oferta, era señal de que la economía española vivía momentos gloriosos. El histórico "unos tanto y otros tan poco", tan característico de este país.
Se vive ahora un momento parecido. Un movimiento reivindicativo se ha puesto en marcha a través de internet, que reclama viviendas al alcance de las economías de los jóvenes. Por los circuitos cibernéticos han sonado las palmas electrónicas de que la movilización iba a comenzar y la protesta se ha hecho visible en numerosas ciudades de España. Movilización apartidista, sin militancias ni siglas, sin protagonismos políticos, solo con el mileurismo como seña de identidad. Son los 1.000 euros mensuales de sueldo, definitorios de un sector social. Si los SMS del móvil sorprendieron al PP el 14-M del 2004, ahora el 15-M del 2006 ha sorprendido a todos los partidos.
Ha aparecido el fenómeno de la ocupación reivindicativa de la calle por los jóvenes, pero sería interesante saber cómo ha surgido, si ha sido consecuencia de experiencias sembradoras de desconfianza hacia la política o es el mileurismo que surge con fuerza, sin ensayarse antes la intermediación social de partidos y sindicatos. Puede haber un poco de todo. Los que respondieron a la convocatoria merecen una respuesta. El silencio de las organizaciones políticas y sociales no hará más que generar el retorno del pasotismo.
ARTÍCULO // OPUS MEI
EL 'MILEURISMO' COMO BANDERA
JOSEP Pernau
Aquella tolerancia en el coste de la vivienda trajo los actuales abusos. Era presidente del Gobierno el señor Aznar, quien, con el optimismo que le caracterizaba cuando estaba en el cargo, con una declaración complació al ramo inmobiliario e indignó a los aspirantes a inquilinos o propietarios de una vivienda. Reconoció que los precios eran muy elevados, pero, que si la demanda absorbía todas las existencias de la oferta, era señal de que la economía española vivía momentos gloriosos. El histórico "unos tanto y otros tan poco", tan característico de este país.
Se vive ahora un momento parecido. Un movimiento reivindicativo se ha puesto en marcha a través de internet, que reclama viviendas al alcance de las economías de los jóvenes. Por los circuitos cibernéticos han sonado las palmas electrónicas de que la movilización iba a comenzar y la protesta se ha hecho visible en numerosas ciudades de España. Movilización apartidista, sin militancias ni siglas, sin protagonismos políticos, solo con el mileurismo como seña de identidad. Son los 1.000 euros mensuales de sueldo, definitorios de un sector social. Si los SMS del móvil sorprendieron al PP el 14-M del 2004, ahora el 15-M del 2006 ha sorprendido a todos los partidos.
Ha aparecido el fenómeno de la ocupación reivindicativa de la calle por los jóvenes, pero sería interesante saber cómo ha surgido, si ha sido consecuencia de experiencias sembradoras de desconfianza hacia la política o es el mileurismo que surge con fuerza, sin ensayarse antes la intermediación social de partidos y sindicatos. Puede haber un poco de todo. Los que respondieron a la convocatoria merecen una respuesta. El silencio de las organizaciones políticas y sociales no hará más que generar el retorno del pasotismo.
